Petróleos Mexicanos (Pemex) evalúa ajustar a la baja los niveles de inversión que podría ejercer en lo que resta de la administración, dadas las limitaciones presupuestales y los menores ingresos que se esperan por la caída de los precios del petróleo.
El Consejo de Administración tiene en revisión los montos de inversión de su Plan de Negocios 2015-2019, el cual parte de un presupuesto austero con un nivel promedio anual de 250 mil millones de pesos en los próximos tres años.
El último año en el que Pemex ejerció una inversión superior a ese monto fue 2014, cuando registró 277 mil millones de pesos (el monto más alto en la historia) al que además se le aplicó un recorte por 40 mil millones de pesos.
Todavía en abril de este año los números que se revisaban y formaron parte del paquete de información que se difundía entre inversionistas, hacían referencia a inversiones promedio al año del orden de 32.9 mil millones de dólares entre 2016 y 2018, unos 441 mil millones de pesos con un tipo de cambio de 13.4 pesos por dólar.
Sin embargo, la petrolera confía en que los mecanismos financieros que tiene ahora disponibles, con el nuevo marco legal que surgió a raíz de la reforma energética, le van a permitir detonar inversiones adicionales para compensar los bajos presupuestos de los próximos años y obtener 300 mil barriles diarios extras a la producción actual hacia 2022.
De este volumen de hidrocarburos adicionales, aproximadamente 20 mil barriles diarios de crudo provendrán de asociaciones entre Pemex y privados; 20 mil más de otras asociaciones o farm outs; 50 mil más de la exploración que haga la empresa; 50 mil de nuevos descubrimientos; 30 mil de explotación de recursos no convencionales; 40 mil de yacimientos en tierra; y 90 mil de campos en mar.
Con ello, Pemex estima que en ese año producirá 2.6 millones de barriles diarios de petróleo crudo. Actualmente promedia 2.26 millones.
En el pasado roadshow que Pemex realizó en Londres, el pasado 6 de octubre, su director Emilio Lozoya Austin sostuvo que “la nueva era petrolera en México implica oportunidades significativas de crecimiento”.
Por esta razón la petrolera apuesta a la asociación o los llamados farm outs con empresas privadas, nacionales o extranjeras para generar inversiones por 17 campos, por un monto de 59 mil millones de dólares.
La mayor cantidad, 27 mil millones de dólares, habrá de obtenerse de las grandes petroleras que se asocien con Pemex para explotar el área de Perdido, en el Golfo de México.
A ello se sumarian 44 mil millones de dólares que se generarán con la migración de 22 contratos que Pemex tiene vigentes con empresas privadas.
En este esquema están involucradas Tecpetrol, Grupo R, Petrofac, Schlumberger, Diavaz, Cheiron, Lewis Energy, Lukoil, Halliburton, entre otras.