El juez de Jáchal, Pablo Oritja, levantó hoy la medida cautelar que impedía los trabajos normales en la mina Veladero, más precisamente, en el valle de lixiviación. Pero además, el Juez, explicó a través de una nota realizada en Radio Antena 1, que ahora la apertura de la compuerta de la polémica estará a cargo del Gerente General de Barrick que ordenó una serie de medidas para garantizar el trabajo y que la semana que viene 9 gerentes de la empresas serán llamados a indagatoria.
Pablo Oritja explicó en Antena 1 que “la medida cautelar era provisoria y hasta tanto se acreditaran una seria de obligaciones. Me lo había sugerido el consultor técnico. Se ha cumplido con las condiciones mínimas y necesarias para trabajar en el lugar”.
“En la compuerta por la que salió el líquido cianurado, según me ha informado la empresa, solamente se va a poder levantar con autorización expresa la gerencia general de la compañía y yo he agregado que de levantarse esa compuerta debe haber un monitoreo cada 30 minutos hasta que la compuerta se vuelva a cerrar”, dijo el magistrado.
Además, manifestó que “un monitoreo que ellos habían estipulado, de las válvulas de venteo, de donde se rompió y salió el líquido en el valle de lixiviación, se había programando un control cada 3 horas y yo lo he reducido cada 2 horas”.
Esta medida se le suma a la ya realizada de “calefaccionar las válvulas y realizar un plan de mejoramiento, que ya ha sido presentado, con obras que ha sido hecha y con una planificación a futura de que se van a hacer”, explicó Oritja.
Por otro lado, siguiendo la investigación, el Juez informó que "hoy hemos terminado con todas las declaraciones testimoniales y hemos citado a indagatoria para la semana que viene a nueve directivos de la empresa”.
El Juez Pablo Oritja, explicó esta mañana cómo es que la empresa Barrick comunicó el caudal de solución cianurada que pasó la compuerta y llegó al río Potrerillo y cómo llegaron al valor de 1.072.000 litros.
“Cuando se interpuso la acción de amparo, una de las medidas que se le solicitó a la empresa era determinar el caudal escurrido y el momento en el que se rompió la válvula. Me lo han informado y me han explicado cómo han llegado a ese número. En principio, la cuantificación la han obtenido en virtud del aforador que existe en el Río Potrerillo que detecta una modificación en el caudal del río y la duración de ese aumento de caudal”.
“El aumento del caudal comenzó a las 21 horas del día 12 y concluyó a las 12 horas del día siguiente por lo tanto, en virtud de ese aumento de caudal, se puede determinar cuántos litros fueron los que salieron. En este caso, lo que han informado ellos, es que es 1.072.000 litros”.
Además, aclaró que “he ordenado que los monitorios continúen a cargo de un comité integrado por la Universidad, por la Policía Minera y otras dependencias. Los monitoreos se mantienen y los costos serán asumidos por la empresa”.
la nación
La defensa que hizo el candidato a la presidencia por el Frente para la Victoria, Daniel Scioli, del papel del Estado en el control medioambiental en su visita a San Juan, en medio de la polémica por el derrame de un millón de litros de solución cianurada, despertó suspicacias. Es que el juez Pablo Oritja, que investiga el hecho, levantó la clausura a la planta de lixiviación de la mina Veladero, de la empresa Barrick, tras el discurso político.
"No hay un Estado ausente", afirmó Scioli al defender la gestión del gobierno provincial, liderado por José Luis Gioja, y reclamar "responsabilidad empresarial en la sustentabilidad ambiental". En su discurso, también anticipó que "hay que industrializar cada vez más" la actividad minera. Las palabras pronunciadas por el candidato oficialista se asociaron aquí con el levantamiento de la medida judicial.
Inicialmente, el juez de San Juan había clausurado por cinco días la operación, y hace tres la había extendido hasta el 22 octubre. En ese lapso, se conocieron tres cifras bien distintas del derrame en la cuenca del Jáchal: 15.000 litros, según circuló por las redes sociales; 224.000 litros, en un informe de Barrick para la provincia, y anteayer 1.000.000 de litros, en un comunicado oficial de la minera.
Greenpeace, la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN) y la Asociación Argentina de Abogados Ambientalistas (AAdeAA) reaccionaron en contra del juez. "Nos preocupan el hermetismo con el que se manejó el incidente, la escasa información sobre las circunstancias del hecho brindadas por las autoridades y las medidas de gestión de riesgo y manejo de contingencias utilizadas", señalaron los ambientalistas en un comunicado.
Oritja le impuso ayer una serie de condiciones a Barrick para levantarle la clausura de las operaciones. Hacía un par de días le había autorizado suspender la entrega de dos litros de agua mineral a cada vecino de Jáchal, uno de los pueblos que podrían verse afectados por el derrame químico.
Negligencia. Según fuentes de Barrick, es habitual que suenen las alarmas y se lo llame "un falso positivo". No descartan que al encenderse las alarmas no se haya prestado demasiada atención. Donde ocurrió el desastre no hay cámaras de seguridad. La mina está a 4000 metros de altura y la temperatura rondaba los -20°C. Si se comprueba la negligencia, a Barrick le acarrearía pérdidas incalculables en multas y daños.
Sabotaje. De poder demostrarse, estaría favorecido por la falta de cámaras de seguridad. Hace poco más de 30 días hubo algunos despidos, entre ellos de personal técnico. Nadie habla de los peritajes de la válvula rota y entre los fiscales hay desconfianza. Una compuerta estaba levantada y debía estar baja. La válvula se rompía, pero no llegaba la solución al río. De probarse esta hipótesis, Barrick quedaría más aliviada ante reclamos civiles por indemnizaciones.
Autosabotaje. Es el que tiene menos probabilidades de prosperar, pero Oritja no descarta nada. La situación financiera incómoda de Barrick a nivel mundial y la posibilidad de querer cerrar el campamento aurífero e irse rápidamente son elementos que sostienen esta hipótesis.
En los últimos siete días, el valor de la acción de Barrick cayó 20% por el "efecto Veladero". Las notificaciones del incidente en San Juan son de comunicación obligatoria a sus accionistas en las bolsas de Nueva York y de Toronto.
La compañía había informado a sus accionistas que Veladero produciría unas 650.000 onzas de oro en 2015; difícilmente lo logre. Barrick intenta reestructurar su deuda después de anunciar recortes a nivel mundial por US$ 3000 millones de dólares.
La compañía se deshizo del 50% de una mina de cobre en Antofagasta y embolsó unos US$ 1000 millones. En Australia obtuvo US$ 550 millones por una venta similar. Cedió parte de la producción de oro y plata en otros emprendimientos, como en la República Dominicana, con lo que ganó US$ 610 millones.
La prensa de San Juan recogió trascendidos judiciales, según los cuales el juez Pablo Oritja hizo lugar al pedido de Minera Argentina Gold (MAGSA) de reabrir la mina suspendida hace 9 días, tras el derrame de cianuro.
Fuentes judiciales confirmaron a DIARIO DE CUYO que Pablo Oritja ya notificó a la empresa Barrick sobre esta decisión, pero le puso "condicionamientos", que hasta el momento no se revelaron. Así las cosas, la empresa podrá volver a operar con cianuro.
La empresa Barrick había pedido que se levantara la suspensión en la mina Veladero que le impedía desde hacia 9 días operar con cianuro, o sea no poder producir onzas de oro, y el juez Pablo Oritja decidió esta mañana darle
curso a esa solicitud pero con "condicionamientos", según confirmaron fuentes judiciales a DIARIO DE CUYO.
Aún no se han conocido esos "condicionamientos" pero se sabe que apuntan a que la empresa pueda garantizar la seguridad de las operaciones en alta montaña.
La empresa, tras el incidente y posterior inspección del Juez, encaró una serie de obras de mejoras en el valle de lixiviación que había ordenado el magistrado para garantizar que el área sea segura y que no haya otro derrame de solución cianurada. Estas tareas fueron verificadas por la autoridad judicial.
El planteo de Barrick apunta a retomar las actividades en el yacimiento, ya que si bien luego del derrame continuaron extrayendo y triturando roca, no hay generación de lingotes de oro debido a que está paralizado un proceso clave como el de cianuración, donde se separa el oro y la plata de la roca estéril.
Para la compañía el parate significa una pérdida millonaria, aseguró una fuente vinculada al caso.
El Valle de Lixiviación de Veladero. Operable, con condiciones
Habilitó la zona de la planta de lixiviación, donde se produjo el derrame. Pero puso condiciones que la empresa debe cumplir. Podrán volver los trabajos.
El juez Pablo Ortija decidió levantar la clausura que había dispuesto sobre la planta de lixiviación de la mina Veladero, donde hace casi dos semanas se produjo el derrame de cianuro. La medida había sido dispuesta como respuesta a una cautelar presentada por un ciudadano jachallero, ante el riesgo de que la zona no estuviera apto para el desarrollo de la actividad.
Oritja aceptó la cautelar y le puso faja de clausura a la planta de lixiviación, aunque la decisión afectó solamente a la zona donde se trabaja con el cianuro y el resto de las dependencias de la mina pudo seguir con las funciones. Hasta ahora, el trabajo en Veladero se centralizó solamente en la zona de extracción de mineral, sin que ese producido pudiera operarse en la planta de lixiviación.
La cautelar de Oritja fue inicialmente por 5 días que vencieron el lunes pasado. Pero ese mismo día, el magistrado resolvió extenderla sin plazos hasta que la empresa cumplimentara con todas las medidas de protección tanto en las válvulas que generaron el derrame como en la compuerta que fue el lugar del error humano que permitió que el cianuro llegara al río. Lo hizo en consonancia con un informe técnico solicitado a un perito de la UNSJ, quien había recomendado que se mantuviera por el momento vedada la actividad en toda la zona del incidente.
Ahora, Oritja decidió levantar la restricción, aunque estableció condiciones que aún no se han dado a conocer con precisión pero tienen que ver con el mantenimiento de la zona. Se espera en consecuencia que la actividad en la mina Veladero retome los trabajos con normalidad.
El juez civil y penal de la ciudad sanjuanina de Jáchal, Pablo Oritja, que investiga la fuga de agua cianurada de la mina Veladero, aseguró hoy que, de acuerdo a las investigaciones, "todo indica que ha sido un error humano" la causa del siniestro.
"Todo indica que ha sido un error humano en virtud de una decisión tomada en forma inconsulta por personal de la empresa", señaló.
En declaraciones, el magistrado confirmó que ayer Barrick Gold presentó un informe final en que admite que el derrame fue de más de un millón de litros de agua cianurada, y que ahora se deben establecer los perjuicios para la ciudadanía.
"Lo que vamos a determinar es el daño, el impacto que pueda producir en las comunidades, en la salud", sostuvo.
Oritja minimizó además el hecho de que en un primer momento la empresa haya informado que el líquido derramado era de poco más de 200 mil, y aseguró que "desde un primer momento" se sabía "que la cifra iba a ser muy superior".
El juez explicó además que no hay un tiempo establecido para que la mina vuelva a estar activa, ya que la empresa tiene que cumplir una serie de requisitos para evitar nuevos inconvenientes. Ayer, la empresa confirmó que el derrame detectado hace diez días en la mina en San Juan, fue estimado en "1.072 metros cúbicos" de solución cianurada, y que se debió "a la falla de una válvula de venteo en una tubería de transporte de esa solución, que habría ocurrido aproximadamente a las 20 del sábado 12".