RICARDO RUIZ*
Las oscilaciones de los precios internacionales del petróleo y gas natural son frecuentes. Actualmente nos encontramos en un ciclo de precios bajos. ¿Qué impacto tiene para nuestro país? Abordaremos esta cuestión con una serie de preguntas.
¿Por qué los precios del petróleo cayeron de forma tan repentina? La corrección de los precios es el resultado de una demanda inferior a la estimada y de un notable aumento de la oferta.
Adicionalmente, la demanda ha sido afectada por la creciente recuperación del dólar a nivel global. Por el lado de la oferta, varios años con altos precios del barril en alrededor de u$s 100 generó un tremendo crecimiento en la producción de varios países, principalmente Estados Unidos, Brasil, Canadá e Irak. La producción de crudo mundial en el año 2014 llegó aproximadamente a 92 millones de barriles día, excediendo al consumo mundial y conduciendo a un inventario de 500 mil barriles día. El panorama para 2015 resulta similar.
¿La industria se estabilizará después del 2016?
A efectos de contestar esta pregunta tenemos que entender dos cuestiones fundamentales. Primero, que los campos convencionales de petróleo y gas a nivel mundial experimentan una declinación anual en su producción del orden del 4%/5% debido al agotamiento normal. Por lo tanto, la producción de hidrocarburos cada año debe reemplazar este agotamiento natural para satisfacer el mismo nivel de consumo. Segundo, la participación futura de hidrocarburos provenientes de campos de extracción no convencional (shales, tights, arenas petrolíferas, aguas ultra-profundas) irá creciendo, y de la misma forma lo harán los costos de extracción.
De esta manera, los precios futuros estarán íntimamente ligados a los costos marginales de producción de los hidrocarburos no convencionales para los cuáles los costos de equilibrio son superiores a u$s 60 el barril en la actualidad. En función de modelos que proyectan la oferta y demanda global de petróleo y gas, se estima que la demanda debería aumentar más rápidamente que la oferta en el 2016, y que el precio combinado de petróleo WTI y Brent, alcanzaría nuevamente un rango estable de u$s 75-80 por barril hacia finales de 2017.
Los mercados petroleros se auto-corrigen generando ajustes en los precios. El precio actual del barril del petróleo, inferior a u$s 50, inhibirá nuevos proyectos de inversión; estimulará la demanda por la elasticidad inherente del precio y la producción no podrá reemplazar el agotamiento natural de los campos de petróleo y gas.
¿Por qué Argentina deberá sostener los precios del petróleo y gas en el mercado interno a pesar de la crisis internacional de precios?
Esta industria se construye y desarrolla pensando en el largo plazo y no en la volatilidad de los precios de corto plazo. Argentina deberá sostener los precios del petróleo y gas natural producidos en el país de tal forma que permitan el desarrollo de nuestros recursos, ya que los precios internacionales probablemente convergerán con nuestros precios internos en el mediano plazo.
Nuestro país posee enormes recursos no convencionales de petróleo y gas técnicamente recuperables, que si fueran económicamente explotables en su totalidad, incrementarían el horizonte de reservas de petróleo a más de 100 años, y el de gas a más de 600 años.
Hasta ahora, YPF ha liderado el camino del desarrollo de los hidrocarburos no convencionales a pesar del contexto internacional adverso, asociándose con productores internacionales que han confiado en su proyecto y han compartido su visión estratégica, los riesgos asociados y el capital a invertir. Pero Argentina necesitará mucha más inversión, si quiere desarrollar todo su potencial energético.
Esto se logrará, sin lugar a dudas, manteniendo regulaciones de petróleo y gas que motiven la inversión; y al mismo tiempo con costos de desarrollo y de operación de los recursos no convencionales que los hagan económicamente sostenibles en el tiempo. Los argentinos tenemos que construir nuestra propia historia e identidad energética más allá de los vaivenes de corto plazo que proponga el contexto internacional. Que las intenciones de autoabastecimiento y de desarrollo económico y social se vuelvan una realidad, dependerá de las decisiones que tomemos hoy.
* SOCIO DE DELOITTE, INDUSTRIA DE PETRÓLEO Y GAS
