Seis meses se cumplen hoy desde que Minera Los Pelambres, filial de Antofagasta Minerals, apeló ante la Corte de Apelaciones de La Serena para revertir el fallo del juez de Los Vilos que ordena la demolición del tranque de relaves mineros El Mauro. Lo anterior, en el marco del denominado juicio de Obra Nueva.
En este contexto, Rodrigo Moya, gerente de medioambiente de Antofagasta Minerals -controlada por el grupo Luksic-, conversó con La Tercera sobre el juicio en desarrollo y analizó el complejo panorama que enfrenta la empresa. “Hemos podido seguir funcionando con normalidad en el tranque El Mauro, pues el fallo no establece otra cosa. Recurrimos a la resolución del juez de Los Vilos frente a la Corte de Apelaciones de La Serena y estamos esperando el resultado de esta apelación”, afirma.
El ejecutivo enfatiza que “estamos haciendo lo que haría cualquier otra empresa o personas que enfrentan un fallo adverso, que es agotar todas las instancias legales para defender nuestra posición”.
¿Cuándo podría resolverse la apelación? En la compañía creen que será antes de que se cumpla un año. En este sentido, advierte tajantemente que si los tribunales rafitican el fallo del juez de Los Vilos, “implicaría tener que demoler la pared del tranque y, obviamente, no podríamos seguir funcionando, porque no tendríamos dónde depositar los relaves. Y sin un depósito de relaves, no es posible hacer minería”. En este contexto, afirma que ante una resolución adversa analizarían recurrir a la Corte Suprema.
Consultado sobre el costo económico que conllevaría para la empresa el cierre de estas operaciones, Moya indica que no existe una estimación seria, “pero sí sabemos que afectaría a la provincia de Choapa y a toda la región, ya que Minera Los Pelambres representa una parte significativa de su producto económico y es la mayor fuente de puestos de trabajo de la zona”.
Mientras tanto, la firma ha postergado una inversión de US$ 1.200 millones que pretendía realizar para elevar la capacidad de tratamiento de mineral de esta faena desde 175 mil a 205 mil toneladas diarias.
El ejecutivo de Amsa también analiza el proyecto de ley de glaciares, que está generando ruidos en el sector.
“Es posible compatibilizar la protección de los glaciares con el desarrollo de la minería, siempre y cuando no se extremen posiciones. La mayor parte de las reservas mineras están en la zona central del país y si no somos cuidadosos con este tipo de normas, simplemente vamos a perjudicar el desarrollo de Chile”, asevera.
Señala que se deben proteger los glaciares blancos y los de roca cuando son reservas de agua relevantes para una cuenca. Esto es muy diferente a establecer que todos los glaciares son estratégicos, como han planteado algunos parlamentarios, acota.
