Por ABHEEK BHATTACHARYA (WSJ)
Los tres gigantes estatales de la energía de China no se atreverán a culpar a su propio país.
Pero el descenso del precio del petróleo motivado por la ralentización de la demanda china está a punto de hacer que empeoren los problemas de esas compañías.
El sufrimiento no era patente el jueves, cuando repuntó el precio del petróleo debido al aumento del miedo en todo el mundo. Las acciones de Cnooc, el productor chino de petróleo a grandes profundidades, se disparó un 14%, el mayor incremento en un día en la última década, en parte también porque comunicó un dividendo del 63% del beneficio durante la primera mitad del año, por encima del rango habitual del 30% al 40%.
Sin embargo, un pago elevado no resulta sostenible cuando el Brent ha caído un 16% en el último mes pese al repunte del jueves, y ahora vale unos 45 dólares el barril. Cnooc necesita que el Brent esté en 46 dólares sólo para cubrir costes en la segunda mitad de 2015, advierte Laban Yu, de Jefferies. Los mercados de futuros apuntan a que el Brent cerrará el año justo por encima de 45 dólares.
Y Cnooc no generó liquidez adicional durante el primer semestre para financiar estos dividendos. Su flujo de caja operativo descendió más deprisa de lo que recortó el gasto de capital.
Es difícil imaginar a Cnooc dándole un hachazo a su presupuesto de capital. La compañía comunicó un enorme incremento de la producción del 13,5% con respecto al año anterior, resultado de los ambiciosos objetivos de crecimiento establecidos previamente. El hecho de extraer más petróleo hoy implica que Cnooc tendrá que hacer una mayor inversión para reemplazar sus reservas -que, al ritmo actual de producción, durarían sólo 9,4 años. Los grandes actores globales suelen contar con reservas para 12 a 16 años. A diferencia de Cnooc, PetroChina generó 17.000 millones de dólares de efectivo durante la primera mitad del año, y gastó 9.600 millones en proyectos de capital. No obstante, esto tampoco es sostenible.
El mayor productor de petróleo del país tiene previsto un gasto de capital por valor de 40.000 millones de dólares para todo el año, lo que deja unos 30.000 millones entre julio y diciembre. Dado que los mercados de futuros apuntan a que el precio del petróleo descenderá en la segunda mitad del año en relación a la primera, es probable que PetroChina genere menos de 17.000 millones de dólares de efectivo, y viva por encima de sus posibilidades.
Puede que la que esté en peor situación sea Sinopec. Aunque China Petroleum & Chemical, como se la conoce oficialmente, obtiene la mayoría de sus beneficios del refino de petróleo, la compañía ha apostado con fuerza recientemente por la exploración y la producción.
Sin embargo, el bajo precio del petróleo ha hecho que reduzca su producción, cuando la razón de ser de un productor es aumentarla. La división de exploración y producción perdió dinero durante la primera mitad del año, durante la cual el Brent registró un precio medio de 59 dólares. En 45 dólares, la sangría será significativa.Las grandes petroleras chinas tienen que ajustar el gasto y reducir sus ambiciones. Hasta que no lo hagan, no convencerán a los inversores de que pueden gestionar un entorno de 45 dólares el barril.