El tipo de cambio cerró hoy en S/. 3.289 y alcanzó nuevo máximo de más de nueve años ante un alza global del dólar y en medio de compras del billete verde de clientes extranjeros y empresas, luego que el recorte de la tasa de interés en China elevó las esperanzas de una recuperación de esa economía.
El dólar subió un 0.27% a S/. 3.289, su mayor nivel desde fines de mayo del 2006. El lunes, la moneda estadounidense cerró en S/. 3.280.
El Banco Central de Reserva (BCR) vendió US$ 60 millones a un tipo de cambio promedio de S/. 3.2846 para reducir el avance del dólar, que llegó a cotizar en S/. 3.2930.
La autoridad monetaria también colocó swaps cambiarios por S/. 551 millones. En la jornada vencieron swaps por S/. 906 millones.
Durante el 2015, la divisa estadounidense subió 10.4% y las ventas oficiales suman US$ 6,792 millones.
“La jornada inició con un avance marginal del sol pero luego clientes off shores (extranjeros) y algunos corporativos salieron a comprar dólares al ver que (el billete verde) se fortalecía en los mercados externos”, explicó un operador.
A nivel global, el índice dólar, que mide al billete verde contra una cesta de seis importantes divisas, subía un 1.35% después de que los activos más riesgosos recibieron un impulso por la baja de tasas de interés del banco central de China.
En medio de una fuerte escalada que parece no tener fin, el dólar ilegal quebró por primera vez desde la instauración del cepo cambiario la barrera de los $ 16, y llegó a negociarse a $ 16,05 en el comienzo de la jornada de este martes.
De todos modos, con el correr de las horas el billete paralelo perdió algo de fuerza y terminó finalmente a $ 15,97, un avance de 13 centavos respecto a la cotización del lunes.
Mientras, la brecha cambiaria se estiró un poco más y ya alcanza el 72%.
Así, el paralelo alcanzó su mayor precio histórico al cierre, superando los $ 15,95 que había alcanzado el 24 de septiembre pasado.
Esta nueva disparada del dólar informal, que acumuló su quinta suba consecutiva (lapso en el cual su valor trepó un 6,1% o 92 centavos), se da en medio de los vaivenes en los mercados internacionales tras el derrumbe de las bolsas en China, y ante la incertidumbre que caracteriza a un período preelectoral, sin soslayar la constante amenaza de nuevos controles en la city porteña.
Según un informe de la sociedad de bolsa Rava, "las presiones sobre el peso argentino continúan en aumento" y se temen "efectos concretos por la caída del precio de la soja", el principal cultivo de Argentina, y la "contracción de sus principales mercados importadores", lo que hace prever un menor ingreso de divisas al país.
Sin la presión del "puré" (este martes la Afip efectivizó unos u$s 18,8 millones, cifra mucho menor a la de las primeras semanas del mes) que contribuye a sumar oferta y restar demanda en el circuito paralelo, el blue recibió el impulso además del "contado con liqui", que repuntó 29 centavos a $ 13,80, producto de una caída de los bonos argentinos en EE.UU. Mientras, el dólar Bolsa se mantuvo casi estable y apenas sumó un centavo a $ 13,30, ante la presión de inversores institucionales.
Por su parte, el Banco central debió vender en el mercado mayorista otros u$s 50 millones para mantener a raya la leve suba diaria del dólar oficial, que aumentó medio centavo a $ 9,285 en las principales agencias y bancos de la city porteña.
Las reservas, en tanto, sufrieron una sangría de u$s 39 millones (influyó una caída del 1,4% del oro) y terminaron en u$s 33.629 millones.
El dólar se empinó este martes a 703,1 pesos con una leve alza de un 0,14%, según informaron agentes cambiarios. Se trata de la segunda jornada de alzas por sobre la barrera de los 700 pesos.
La moneda doméstica había cerrado el lunes cotizando a 702,1 pesos, logrando los niveles más altos desde agosto de 2003.
De esta forma, el dólar terminó las operaciones a $702,53 comprador y $703,26 vendedor, en línea con la tendencia al alza que acumula una desvalorización de 13,7%.
Expertos aseguran que el alza no se detendrá, mientras que desde el gobierno han tratado de poner paños fríos a la situación, asegurando que está en condiciones de enfrentar la volatilidad económica que vive el orbe, ante la situación de China.
Una desaceleración de la economía china que influye en los precios de commodities como el cobre -principal producto de exportación de Chile- presionando a la baja la cotización del peso.