La inundación no da tregua. Ayer –primer día sin lluvias desde el inicio del fenómeno climático– el agua siguió avanzando sobre las localidades afectadas del noroeste de la provincia de Buenos Aires. Hoy se cumple una semana de la crecida de los ríos que ya afectó a más de 20 mil personas y que anoche dejaba unos 4.000 evacuados. Los pronósticos son poco favorables: para hoy y mañana se esperan nuevas precipitaciones. Serán de menor magnitud, pero se verán agravadas por una sudestada.
Las intensas lluvias –de entre 150 y 300 milímetros– sobrecargaron las cuencas de ríos que atraviesan buena parte del suelo bonaerense. Los seis distritos más afectados son Luján, Lobos, San Antonio de Areco, Salto, La Matanza y Arrecifes, pero en total son casi 30 los distritos con zonas anegadas.
En Salto, el agua se tragó un barrio entero, luego de que el río Arrecifes alcanzara un pico histórico de 9,30 metros. Uno de cada 10 habitantes ya tuvo agua adentro de su casa. La inundación ya es la más grande de la historia de la ciudad. Lo afirma el intendente, lo dicen los bomberos. Y lo repiten los vecinos que no tienen consuelo ante el desamparo de haberlo perdido todo y de tener que volver a empezar.
El paisaje es desolador. Calles convertidas en ríos, casas tapadas por 1,80 metro de agua oscura, espesa. Mónica Alonso y su hija Sara se abrazan. Y esperan. La madre tiembla: hace ya 36 horas que tiene los pies sumergidos en el agua que se adueño de su casa. Dice que se quedará ahí porque teme a que alguien ingrese a robarle lo poco que pudo salvar (una cama, un colchón, algunas sillas, la tele). Busca una explicación, pero no la encuentra. Y entonces aparece Sara y se abrazan. Casi lo único que les quedara para sobrellevar la espera.
Salto está ubicada a 200 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires y vive desde ayer en “estado de emergencia sanitaria” y “zona de desastre”. En la ciudad hay 600 evacuados y otros 500 vecinos que se autoevacuaron en la casa de algún familiar. Además desde bomberos voluntarios afirmaron que son unas 5 mil las personas que se vieron afectadas por el ingreso del agua a sus viviendas, es decir más de un 10 por ciento de la población de la ciudad.
El barrio más afectado se llama Trocha. Está cerca del río, detrás del terraplén por donde hace muchos años pasaba el ferrocarril Belgrano. Ahora ese terreno es lo que separa la ciudad seca de la ciudad inundada. Allí cientos de personas miran sus casas tapadas por el agua, resignados a no poder hacer nada: sólo observar y lamentarse. La única manera de moverse por ese barrio es con botes o lanchas. Son 30 manzanas anegadas y decenas de cuadras sin un metro de pavimento.
Alberto Ventura vive en la ciudad de Rojas, a 40 kilómetros de Salto, pero cuando se enteró de lo que pasaba vino rápido con su lancha, la que habitualmente usa para pescar pejerreyes. Ahora lleva a bordo una heladera, una mesa y una valija con ropa. Es que son los mismos vecinos los que se ayudan entre sí con comida o ropa. La municipalidad se vio desbordada (sí, como el río) y no da abasto para cubrir tantas necesidades juntas.
Los damnificados están distribuidos en ocho centros distintos. El coordinador local de Defensa Civil, Hugo Esteche aseguró que “quienes están en los centros reciben colchones, comida y otros suministros. Por suerte no tenemos lesionados, enfermos y tampoco personas desaparecidas”, indicó. Además explicó que se trata de “una crecida histórica” con un pico que alcanzó los 9,30 metros cuando la marca récord anterior del cauce era de 8,60 metros.
“El agua baja y sube un poco pero no vuelve al pico, por lo que está tendiendo a descender, aunque todavía hay mucha agua”, remarcó. Anoche, los vecinos que volvieron a ver sus casas, aseguraban que el agua había bajado unos 30 centímetros. Al calor del fuego, se preparaban para soportar una noche fría. Por lo bajo, algunos admitían su temor: que el pronóstico acertara, que hoy y mañana volviera a llover, que la prepotencia del agua invadiera otra vez esos centímetros que anoche había abandonado.
"Desafío al Ministro De Vido o a su vocero a que me demuestren lo contrario. Este Gobierno no tiene un plan hídrico estratégico que permita superar el problema (de las inundaciones en la provincia de Buenos Aires). Hay un plan maestro para la Cuenca del Salado, realizado en 1998, que debería estar terminado hace por lo menos dos años, pero sólo se hizo el 40 por ciento. El Fondo Hídrico que se recauda con naftas y GNC era para las cuencas del interior de la provincias y provincias vecinas, y en el 2006 empezó a utilizarse también en el Conurbano, pero lo hicieron sin plan, así que las obras no están interconectadas, lo que complica aún más las cosas. El resultado es que se inundan las distintas cuencas casi todos los años, y así seguirá sucediendo".
El que habla en el piso de InfobaeTV es el diputado Carlos Brown, ex ministro de la Producción bonaerense y ex intendente de San Martín, respondiendo el falaz comunicado de Horacio Mizrahi, vocero del Ministerio de Planificación Federal, sobre una nota aparecida en este diario.
Allí, Mizrahi desconoce que las obras de la Cuenca del Salado hayan quedado a medio hacer, como se dijo aquí, y miente al decir que "desde el punto de vista hidráulico están finalizadas", cuando todos los expertos del tema y vecinos de 62 distritos que tienen vinculaciones económicas e hídricas con la Cuenca del Salado saben que desde el 2010 las obras en el tercer y cuarto tramo están paralizadas. No necesitan un comunicado oficial para conocer los problemas que padecen.
En setiembre de este año fueron declarados en emergencia y/o desastre agropecuario 60 partidos de la provincia de Buenos Aires: Adolfo Gonzales Chaves, Alberti, Ayacucho, Azul, Balcarce, Benito Juárez, Bolívar, Bragado, Brandsen, Cañuelas, Carlos Casares, Carmen de Areco, Castelli, Chacabuco, Chascomús, Chivilcoy, Coronel Dorrego, Coronel Pringles, Coronel Suárez, Daireaux, Dolores, General Alvear, General Belgrano, General Guido, General Pueyrredón, General Lavalle, General La Madrid, General Las Heras, General Paz, General Viamonte, Guaminí, Hipólito Yrigoyen, Junín, Laprida, Las Flores, Leandro N. Alem, Lezama, Lincoln, Lobos, Maipú, Marcos Paz, Monte, Navarro, Necochea, Nueve de Julio, Olavarría, Pergamino, Pila, Rauch, Punta Indio, Roque Pérez, Saladillo, San Cayetano, Suipacha, Tandil, Tapalqué, Trenque Lauquen, Tres Arroyos y Veinticinco de Mayo.
DESDE EL 2010 EL TERCER Y CUARTO TRAMO DE LAS OBRAS CONTRA INUNDACIONES ESTÁN PARALIZADOS
El diputado Brown presentó en el 2012 un primer pedido de informes (0215-D-2012) –en tiempos de sequía, buen momento para encarar las obras suspendidas– para expresar su preocupación por la paralización de esas obras, que reiteró en marzo de 2013 (1485-D-2013).
Ante la ausencia de respuesta, en su carácter de ciudadano, y fundándose en el derecho de acceso a la información reconocido en el artículo 75 de nuestra Constitución, Brown envió una carta a la Unidad de Coordinación de Fideicomisos de Infraestructura, para pedir información del grado de ejecución física y financiera de las obras financiadas por el Fondo durante el 2014 y el plan de acción previsto para el corto, mediano y largo plazo en materia de infraestructura hídrica, particularmente de la provincia de Buenos Aires.
En este caso, sí obtuvo una respuesta, aunque cínica. Por carta, se lo invitó a dirigirse a la página institucional www.ucofin.gov.ar donde, justamente, la información no figura.
El comunicado de Mizrahi destaca algunas de las obras encaradas en el Conurbano y remite para más datos a la Plataforma de Identificación de Problemática (PIP) del www.minplan.gov.ar, donde lo único que se puede observar es un mapa de la República Argentina con puntos que marcan supuestas "obras hídricas", sin ningún tipo de información sobre nombre y tipo de obra, fecha de realización, estado de ejecución, monto de inversión, etcétera.
No vamos a insistir en lo que está claro para cualquiera, es decir, que aunque se hayan hecho algunas obras, están realizadas sin plan y no pueden auditarse. Puntualizaremos el absurdo de que el vocero pusiera hincapié en el aliviador del arroyo Medrano, porque es una obra realizada en los 90, pero que debió profundizarse por los cambios que provocó la construcción del parque Tecnópolis, que al asfaltar hectáreas que antes drenaban naturalmente, las lluvias provocaron nuevas y dramáticas inundaciones en la Villa Maipú, al fondo de esos terrenos que formaban parte de Campo De Mayo.
Las inundaciones de octubre y noviembre en el Conurbano provocaron 2 muertes y 6800 evacuados, además de una sensación de abandono por parte del Estado para los afectados que, en algunos casos, sufrieron hasta 18 veces en el año el avance de las aguas en sus hogares.
Las localidades inundadas fueron 25: Luján, Marcos Paz, La Matanza, Bragado, Mercedes, Arrecifes, Pilar, San Fernando, Tigre, San Miguel, Esteban Echeverría, Quilmes, Ensenada, Salto, Carmen de Areco, San Martín, Lomas de Zamora, Moreno, Berisso, Florencio Varela, Campana, Las Heras, Lanús, Escobar y Tres de Febrero.
Mizrahi dice que sin las obras encaradas por el Ministerio, "las consecuencias del temporal hubieran sido mucho mayores". Pero ¿de qué sirve la realización de un desagüe pluvial en un rincón de Luján, por ejemplo, si está ejecutado sin un plan? Cuando el agua llega, avanza contra todo, desagüe pluvial incluido. Dinero tirado. Salvo el que pudo haber caído en los bolsillos de la corrupción.
También se solaza Mizrahi con lo que cualquier empresario de la construcción conoce, como es que la provincia de Buenos Aires ha sido castigada en materia de presupuesto para obras. En la nota sobre el Fideicomiso de Infraestructura Hídrica (FIH), consignamos que sólo obtuvo el 25 por ciento del total de lo recaudado. El vocero desmintió y lanzó un número desopilante. Lo publicado en la nota anterior fueron números redondos. Más exactamente, obtuvo el 26,8 por ciento.
Pero este fin de semana, a pleno sol y sin lluvias, es ideal para hablar de un asunto que el Ministerio de Planificación Federal nunca explicó. Se trata de la Resolución Nº 760/2013, dondese adjudica las obras de las represas hidroeléctricas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic al consorcio integrado por Electroingeniería SA y China Gezhouba Group Company por la suma de 22.925.870.000 pesos, "incluyendo gravámenes".
En su artículo 4º, la norma estipula que "el gasto que demande el cumplimiento de la presente Resolución será con cargo al FIDEICOMISO DE INFRAESTRUCTURA HIDRICA, en el marco del financiamiento propuesto por el oferente".
La más grande obra de infraestructura que quedará en la Argentina de toda la década kirchnerista tendrá financiamiento chino. Iba a empezar a ejecutarse en julio de este año, pero dadas las complicaciones que generó el default, ahora se anunció que el crédito llegaría en diciembre, por lo que en enero podrían empezarse las obras.
AÚN NO SE SABE CON EXACTITUD POR QUÉ EL FONDO CONTRA LAS INUNDACIONES FIGURA EN LA ADJUDICACIÓN DE LAS REPRESAS
¿A cuento de qué el Fondo Hídrico figura en la resolución? Desde que empezó la recaudación, en enero de 2002, hasta ahora, el FIH lleva recaudados 11.000 millones de pesos, o sea, la mitad del presupuesto que demandarán las dos represas de Santa Cruz. Entonces, ¿en calidad de qué se lo menciona? La redacción es confusa ex profeso.
Para el diputado Brown, se trata de "algo así como una garantía frente a los chinos, aunque por cierto no está claro ni lo aclaran. Y es cuanto menos una barbaridad que en medio de ladesinformación sobre los planes y obras contra las inundaciones en Buenos Aires no se informe en qué se están invirtiendo las recaudaciones de 2014 ni se explique de qué manera el FIH interviene en las represas santacruceñas".
En 2010, la Auditoría General de la Nación (AGN) realizó un informe de seguimiento de las observaciones y recomendaciones efectuadas en 2006 por el organismo de control al Plan Nacional de Control de Inundaciones a cargo de la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la Nación. Ese año, conviene recordar, renunció Hugo Amicarelli, un técnico de gran experiencia, ya que durante años trabajó o estuvo a cargo de la estratégica Dirección Provincial de Hidráulica. "Hay ausencia de un diagnóstico integral y un plan sobre la problemática de las inundaciones", dijo en el 2010 la AGN. "El Estado ha quedado desmantelado en estos últimos años y ya no tiene capacidad de ordenamiento", dijo Amicarelli.
Sin plan, con recursos que se destinan a otros fines, con obras que son sólo maquillaje, la provincia de Buenos Aires seguirá inundándose cada vez más y más seguido. No tanto por el cambio climático ni la furia de la naturaleza, que son procesos que pueden ser mitigados con planificación y recursos, sino por el desinterés de la política en resolver algo más que su permanencia en el poder.
Por cierto, el comunicado anterior del Ministerio de Planificación criticando la "visión equivocada" de la nota sobre el Centro Cultural Kirchner, ni siquiera merece respuesta. No sólo porque no cuestiona ningún dato, sino porque remite a "las plataformas tecnológicas de acceso a las informaciones generadas desde el Poder Ejecutivo Nacional" que, ya sabemos, sólo se dedican al autobombo y el relato.