El director ejecutivo del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) solicitó informes a los ministerios de Salud y del Medio Ambiente, además de la subsecretaría de Pesca, para resolver los tres recursos de reclamación presentados contra la resolución de calificación ambiental obtenida por la termoeléctrica Bocamina II, de Endesa, en Coronel.
El 2 de abril pasado, y luego de una evaluación que fue extensa y compleja, Endesa obtuvo la resolución que le permitió volver a operar Bocamina II, central de 350 megawatts donde se habían hecho modificaciones sin autorización ambiental.
Sin embargo, en mayo y junio tres organizaciones de pescadores y recolectores de orilla de la zona hicieron presentaciones contra la resolución, argumentando que había aspectos que no fueron considerados.
Una de las reclamaciones recibidas por el SEA dicen relación con el acopio de carbón en la central, el que provocaría una alteración de la calidad del aire, afectando directamente la salud de la población.
Por esto, se pidió al subsecretario de Salud, Jaime Burrows, expresar si el titular se hizo cargo de este aspecto.
En tanto, al subsecretario del Medio Ambiente, Marcelo Mena, el SEA le pidió que se refiera a la denuncia de que el proyecto hubiese alterado la ubicación de sus infraestructuras, en particular si el estudio de dispersión original de la chimenea de Bocamina II es consistente con la nueva ubicación.
Al subsecretario de Pesca, Raúl Súnico, se le consultó por la reclamación de que la tecnología de succión de agua de mar evaluada, no sería la más idónea ni la más actualizada. Según la denuncia, ésta sería responsable de la disminución del orden del 38% de las capturas en la zona de Coronel.
Las reparticiones contaban con un plazo ya expirado para hacer llegar sus informes, mientras que Endesa, pidió un tiempo adicional para entregar los antecedentes que se le requirieron, aunque en presentaciones anteriores la empresa argumentó que las alegaciones de los recurrentes fueron abordadas durante el proceso de evaluación ambiental y calificada favorablemente por la autoridad.
Cabe mencionar que en un documento que el gerente general de la compañía, Valter Moro, hizo llegar al director ejecutivo del SEA, también comentó que el Comité de Ministros no posee facultades para calificar ambientalmente desfavorable un proyecto.