Otro capítulo más del litigio Glencore-Antofagasta. La minera chilena propuso un plan que no termina de convencer a su demandante. Mientras tanto, el gobierno de San Juan advierte que no permanecerá pasivo esperando entendimientos entre los privados.
La audiencia de conciliación entre la minera Los Pelambres y Glencore, a cargo del proyecto El Pachón, y donde participa la provincia parece haber llegado a un punto crítico para que las partes lleguen a un acuerdo por la escombrera que la empresa chilena depositó en territorio argentino.
Es que las mineras no llegaron a un acuerdo y presentaron algunas contradicciones durante la reunión para avanzar con la remediación y con la medida cautelar impuesta por el juez y por los puntos que presentó la provincia como de realización inmediata en el lugar.
Según explicó el Fiscal de Estado, Guillermo De Sanctis, luego de la reunión “hay contradicciones entre El Pachón y Los Pelambres, en algunos puntos técnicos. Ahora veremos si hay consenso delante del Juez y si no, fracasa la audiencia, y no descarto que la provincia un convenio luego con quien tiene que hacerse responsable de la escombrera que es Pelambres”.
Además, De Sanctis manifestó que hay consenso con la empresa chilena en “realizar un monitoreo de agua, auditoría ambiental con Nacional Unidas, retiro inmediato de los neumáticos”.
El fiscal fue muy crítico del resultado de la audiencia de conciliación. “No nos vamos a quedar con los brazos cruzados mientras ellos discuten. Vamos a cumplir con nuestro deber proteger el medio ambiente sanjuanino y que esa escombrera quede cerrada, aislada y blindada”, sentenció De Sanctis.
El conflicto fronterizo que involucra a nuestro país y Chile por la contaminación provocada en suelo sanjuanino por la compañía que explota el yacimiento trasandino Los Pelambres, en perjuicio directo a la minera que pondrá en marcha El Pachón, en Calingasta, entró en una etapa de solución luego de la intervención de la Justicia Federal de nuestra provincia.
El hecho de reconocer el daño causado, por parte de la firma perteneciente al poderoso grupo Luksic, en una zona utilizada como escombrera, donde se arrojaron enormes neumáticos en desuso de vehículos mineros, y contaminar una laguna del lado argentino, argumentando la supuesta inexactitud de límites, supone una irresponsabilidad mayor si se tiene en cuenta la rigurosidad de la que se jacta Chile en controles medioambientales.
La magnitud de la denuncia cobró tal fuerza del otro lado de la cordillera que precipitó la renuncia de Adolfo Galindo, jefe de Gabinete de la ministra de Minería, Aurora Williams, quien debió asumir la responsabilidad por haberse violado diferentes leyes vinculadas con el tratamiento de residuos peligrosos y presuntamente haber causado la contaminación de aguas cercanas debido a los distintos vertidos peligrosos, en este caso Cerro Amarillo, en jurisdicción argentina.
La cuestión, llevada a la Justicia por el enfrentamiento de dos grupos económicos poderosos, Glencore de origen suizo que opera un yacimiento de envergadura como el de Bajo La Alumbrera, en Catamarca y se apresta a invertir unos u$s 3.000 M para extraer cobre de las reservas de El Pachón, en territorio sanjuanino y, del lado chileno, Los Pelambres del conglomerado Luksic, pone al descubierto la discrecionalidad con que actúa la Superintendencia de Medio Ambiente de Chile.
Este organismo es el mismo que formuló cargos a Barrick en el proyecto Pascua-Lama, por infracciones referidas al incumplimiento de condiciones, normas y medidas establecidas en Resoluciones de Calificación Ambiental, antes de ejecutarse el plan. Pero al mismo tiempo el ente ignoró las infracciones gravísimas de Los Pelambres contraviniendo las normas por causar daño ambiental no susceptible de reparación (por ahora sacarán los neumáticos), con el agravante de generar un riesgo adicional para la salud de la población, por contaminar un reservorio de agua.
Diario Financiero
Sin buenos resultados terminó la conciliación entre Glencore y Antofagasta Minerals (AMSA), por el conflicto que mantienen en Argentina, a raíz de que Los Pelambres construyó por error un botadero de estériles tras la frontera, en terrenos del proyecto El Pachón.
Pese a que hace poco más de una semana se había avanzado en un acuerdo para que AMSA cerrara la escombrera, ayer eso no se logró plasmar en un documento con la firma de los tres actores: las dos mineras y el Fiscal que representa a San Juan.
Según trascendió, la principal diferencia fue que la minera suiza solicitó visar el plan que presentara AMSA, lo que no fue aceptado por la minera nacional.
Según trascendió, la suiza veía que al no haber un plan ni un cronograma concreto, era como dar un cheque en blanco en circunstancias que se hará sobre su territorio. En cambio, la minera nacional veía poco factible que con ese poder, se les aprobara un plan de obras.
Otro tema que complicó era por dónde se realizaban las obras. Mientras AMSA propone que sea por Chile, Glencore dice que debe ser por Argentina. El argumento de ambas firmas es que hacerlo como cada una de ellas propone es más expedito que como recomienda la otra.
De todos modos hay cierto consenso en que, por ejemplo, el retiro de más de 400 neumáticos que hay que realizar, debe hacerse por la frontera, ya que facilita temas como la reubicación.
Con el rechazo de la conciliación, el juez federal de San Juan solicitó que AMSA presente hasta el 21 de agosto un plan de control ambiental mientras dura el juicio, que es la medida precautoria que solicitó Glencore ante la autoridad.
Según trascendió, AMSA entregaría la próxima semana un plan de cierre concreto para la escombrera, el que fue elaborado por una empresa reconocida en este ámbito e incluiría hacer obras no sólo en el lado argentino, sino que también en Chile.
Origen del conflicto
El problema por el botadero llamado Cerro Amarillo surgió cuando en 2012 se detectó que había un error en la cartografía utilizada por Los Pelambres, lo que implicó que parte del botadero quedara en Argentina.
La empresa de capitales nacionales argumenta que ella obtuvo todos los permisos en 2004, con la cartografía oficial vigente, que no advertía de este nuevo límite.
Glencore presentó en 2014 una demanda civil y este año agregó una penal en busca de responsables.
Estas dos aristas siguen su curso, sin mayor avance hasta la fecha. Está pendiente que se resuelva la competencia del juez, ya que AMSA señala que esto debe resolverse en instancias binacionales.
Tiempo de San Juan
Se reanudó tras un cuarto intermedio la audiencia por Pelambres en el segundo piso del Juzgado Federal. La noticia pasa por un compromiso de la minera chilena, que tiene tiempo hasta el 21 de agosto para presentar un plan de trabajo que detalle el aislamiento de la escombrera en Cerro Amarillo (contemplando tanto el lado argentino como el chileno). La provincia le pidió a la empresa que cumpla con cuatro ítems claves.
"Se expresa en el acta que la parte demandada (Pelambres) se compromete a presentar en el marco de la medida cautelar y de la provincia presentar un plan de trabajo y un cronograma de tareas para el aislamiento de la escombrera en Cerro Amarillo, tanto del lado argentino como del lado chileno. La presentación tiene una fecha límite: el 21 de agosto", expresó el fiscal de Estado, Guillermo De Sanctis.
La medida cautelar del juez Miguel Ángel Gálvez tiene 5 puntos y aparte la provincia hizo una serie de pedidos adicionales para que fueran aceptados por Pelambres, entre ellos se enumeran cuatro puntos claves:
-El retiro de los más de 400 neumáticos de camiones mineros que están tirados en Cerro Amarillo.
Las partes en la audiencia por la escombrera que Pelambres armó en Cerro Amarillo. La sede del encuentro fue el Juzgado Federal.
-Un monitoreo de agua superficiales y subterráneas antes, durante y después de los trabajos debiendo extenderse al menos cinco años después de la culminación de los trabajos de Pelambres. La provincia exigió que el monitoreo sea realizado por el Instituto de Investigaciones Hidraúlicas dependiente de la facultad de Ingeniería, de la UNSJ sin perjuicio de los monitoreos realizados por la Policía Minera.
-Una auditoria de la calidad de marcha de los trabajos de aislamiento de la escombrera a cargo de una consultora especializada. La provincia sugirió al Programa de Nacionales Unidas por el Medio Ambiente para que se haga cargo de los estudios.
-Una garantía de calidad de la obra de aislamiento hasta diez años después de terminados los trabajos.
Este lunes se reanudó la Audiencia de Conciliación en el juicio Xstrata-Pachón contra Minera Los Pelambres, que comenzó el viernes 31 de julio. Tras el cuarto intermedio, la empresa se comprometió a cumplir con un plan de trabajo para aislar y descomprimir la zona de la escombrera que está en Cerro Amarillo, tanto del lado chileno como del argentino.
A través de la Fiscalía de Estado, San Juan solicitó que el Instituto de Investigaciones Hidraúlicas monitoree las aguas subterráneas y superficiales, se retiren más de 400 neumáticos de camiones mineros, se haga una auditoría de la calidad de los trabajos y se garanticen los trabajos de aislamiento por lo menos por 10 años después de finalizados.
La empresa deberá presentar su plan de aislamiento este 21 de agosto y será evaluado por las partes involucradas en la causa.
