El último 30 de julio, la Dirección de Protección Ambiental (DPA) de la provincia emplazó a las empresas petroleras que operan en Mendoza para que presenten un informe técnico sobre la situación de sus yacimientos y un listado de los pozos que están inactivos.
Según consta en la Resolución 555 publicada este miércoles en el Boletín Oficial, existen más de 1.600 pozos inactivos y es necesario determinar si se trata de un abandono temporal o definitivo.
En base a ello, la DPA le ha dado 10 días a las compañías petroleras para que especifiquen el estado de los pozos con el objetivo de "prevenir posibles impactos al ambiente". Sucede que muchos de los pozos han sido abandonados sin cumplir con las medidas de control que se exigen en esos casos para proteger el medio ambiente.
Entre otras cosas, la dependencia estatal busca identificar qué pozos han sido abandonados temporalmente y cuáles de forma definitiva, ya que el aislamiento de los mismos es diferente.
"No puede ser excusa del no abandono de los pozos el hecho de querer recabar información de pozos inactivos o la posibilidad de volver a reactivarlos de debido a nueva información encontrada o una mejora de las tecnologías actuales, pues la legislación prevé para estos casos un abandono temporario el cual es reversible", sostiene la resolución.
"Esta resolución busca prevenir posibles impactos al ambiente, el no cumplimiento de la misma no significa en todos los casos un impacto tangible al mismo, sin embargo existen pozos en los que el abandono sería el procedimiento indicado a fin de garantizar el resguardo ambiental", remarca el texto publicado este miércoles en el Boletín Oficial.
"Todos los plazos de abandono han sido superados, sin embargo las empresas que operan en la Provincia no ha dado cumplimiento estricto a la Resolución en cuestión", agrega.