La minera declaró que "continúa preparando el proyecto de ampliación", con lo que descartó una suspensión indefinida de la obra.
Chinalco agregó que informará a sus accionistas cuando haya avances respecto a la ampliación del proyecto, aunque no detalló una fecha.
Toromocho, ubicado en Junín, inició operaciones en diciembre del 2013 con una inversión de US$3,500 millones. Se estimaba que en esta etapa produjera 275,000 toneladas métricas finas (TMF) de cobre al año, según el Ministerio de Energía y Minas (MEM).
La ampliación del proyecto demandará una inversión de US$1,320 millones. Esta segunda etapa generaría una producción anual adicional de 25,000 TMF de cobre.
La minera tuvo problemas técnicos que generaron retrasos en la puesta en marcha de la mina.
Los problemas metalúrgicos que Chinalco enfrenta en Toromocho están llegando a su final. La minera china reveló hace pocos días que alcanzó capacidad plena de producción; pero su demora de casi veinte meses en alcanzar dicho objetivo [la mina fue inaugurada en diciembre de 2013] la ha obligado a suspender de forma indefinida su proyecto de ampliación de operaciones, en el que debía invertir US$1.320 millones.
“La empresa está en rojo. Por ello, no nos ha dado una fecha para este proyecto de ampliación”, reveló el viceministro de Minas, Guillermo Shinno.
La ampliación de Toromocho estaba programada para entrar en marcha en enero del 2016, según el cronograma del Ministerio de Energía y Minas (Minem). La alta concentración de arsénico en el yacimiento (mineral penalizado por las refinerías de cobre) habría sido el principal obstáculo de la minera china.
“Chinalco hizo una mala proyección. Sus ingenieros pensaron que el cobre con menor contenido de arsénico no estaba lejos de la superficie, pero en realidad estaba más abajo”, explicó el viceministro.
Refirió que la profundización del tajo permitirá que el productor chino pueda minar cobre de mejor calidad en los próximos dos a tres meses, posibilitándole acceder a capacidad plena de producción en setiembre u octubre de este año.
La minera también habría suspendido la construcción de su planta de molibdeno por este motivo.
FALTAN MEGAPROYECTOS
La solución reciente de los problemas de Toromocho ha tenido el efecto de mejorar las perspectivas de producción de cobre. Según el Minem, esta producción crecería 10% en el 2015, dos puntos más que lo estimado a inicios de año.
No sucedería lo mismo con la inversión minera, que se resentirá por la falta de nuevos megaproyectos en construcción. Por ello, caería a menos de US$8.000 millones en el 2015, tras haber anotado US$8.654 millones en el 2014.
“La construcción de Las Bambas (US$10.000 mlls.) estará concluida este año y lo mismo pasará con la ampliación de Cerro Verde (US$4.400 mlls.). Luego hay proyectos pequeños como Crespo y Anabí, pero la inversión podría mantenerse con la ampliación de Toquepala (US$1.100 mlls.) y la posible construcción de Quellaveco (US$3.300 mlls.) desde 2016”, dijo Shinno
