El vamos a la operación de reestructuración societaria dio ayer Enersis, luego de que el directorio de la firma aprobara una propuesta del controlador, la italiana ENEL, que supone la división de Endesa, Chilectra y Enersis para luego crear dos vehículos: Enersis Américas y Enersis Chile. Esta última albergará a su vez a dos compañías: Chilectra y Endesa Chile, las que seguirán transándose en la Bolsa de Santiago, tal como hasta ahora.
El primer paso será definir el nombre del perito independiente que establecerá las valorizaciones de los activos.
Más temprano sesionaron los directorios de Endesa, Chilectra y Enersis, en los que se analizó la propuesta y, en el caso de la generadora, se aprobó el pipeline de proyectos. Al menos en el caso de Endesa y Enersis la sesión fue más larga que lo presupuestado y, según trascendió, con acalorados debates.
Así lo explicó ayer el gerente general del conglomerado energético, Luca D’Agnese, quien detalló la forma en la que la compañía planea efectuar el proceso de división y fusión de sus activos, con el objeto de darle mayor visibilidad y valor de mercado a sus activos en América Latina.
Esto además supone el inicio de una ronda de conversaciones con los accionistas minoritarios y con el mercado en general, la primera de las cuales se realizará hoy en una conferencia telefónica que ocurrirá a partir de las 18:00 horas.
El plazo que tiene Enersis para aprobar esta operación es el tercer trimestre de 2016, lo que anticipa su concreción en seis meses respecto del plazo autoimpuesto originalmente. Esta reducción acota la incertidumbre en el proceso y se debe a una simplificación de la operación que hará menos compleja la reorganización societaria, tomando los activos de fuera de Chile de Endesa y Chilectra, sacándolos inmediatamente del país y fusionándolos con Enersis América. En el caso de Enersis, la operación es inversa.
Respecto a la presentación enviada a la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS), en abril de este año, no hay mayores modificaciones. Sí se aclaró cómo será la estructura organizativa de Enersis Chile -que tendrá a su vez dos empresas abiertas en bolsa, resultando cuatro compañías transándose públicamente-, se definieron los plazos y se incorporaron los planteamientos de la SVS en su resolución de la semana pasada, en la que definió que la operación no es entre partes relacionadas.
D’Agnese, además, dijo que ENEL no tiene el quórum por sí sola para poder aprobar la operación, que requiere de dos tercios de las acciones de la compañía. Por ello, es importante para la concreción del plan contar con los votos de los minoritarios.
Consultado sobre cómo van a conseguir el apoyo de, por ejemplo, las AFP que ya han manifestado su oposición, explicó que ya han tenido antes votaciones complejas como, por ejemplo, el aumento de capital de 2012, en los que salieron airosos.
“No puedo prever cómo van a votar (los accionistas minoritarios). En una votaciones muy conflictiva como el aumento de capital fue aprobada con amplia mayoría”, explicó el ejecutivo.
Otro punto clave para la empresa es el destino de los recursos del aumento de capital. Según el jefe de IR de Enersis, Pedro Cañamero, este proceso permitirá acelerar el proceso de utilización de los recursos, pues dará claridad acerca de los objetivos estratégicos del grupo. Además, reforzó el mensaje sobre que Enersis continuará siendo el vehículo único de las inversiones del controlador.
“El compromiso de vehículo único de inversión es con los accionistas. En esta operación los accionistas están en las dos compañías. El accionista que tenía una acción de Enersis va a quedarse con una acción de Enersis Chile y Enersis Latam. Claramente la frase vehículo único va a tener que ser modificada porque van a ser dos, pero el objetivo es bastante claro”, dijo D’Agnese.