El fabricante de sal y fertilizantes K+S rechazó un nuevo intento del grupo canadiense Potash Corp para intentar abrir conversaciones sobre una eventual adquisición, afirmó el martes un portavoz de la firma alemana.
K+S ya desestimó a principios de mes una propuesta de Potash Corp por 7.900 millones de euros (8.650 millones de dólares), a razón de 41 euros por acción, por ser muy baja y sugirió que la firma canadiense planeaba reducir el tamaño de la compañía.
Un portavoz de K+S dijo que el presidente ejecutivo de Potash Corp, Jochen Tilk, se reunió con el primer ministro del estado federal de Hesse -donde está la sede de K+S- y le entregó documentos sobre los planes de la firma canadiense para preservar los puestos de trabajo tras su adquisición.
K+S recibió también los documentos.
"Hemos leído estos extractos y llegamos a la conclusión de que no contienen nada sustancial más allá de lo que ya nos dieron por escrito. Por eso seguimos sin ver una base para conversar", comentó el portavoz.
Un vocero del gobierno de Hesse confirmó el encuentro a petición de Potash Corp, pero declinó hacer más comentarios.
El premier estatal, Volker Bouffier, ha dicho que luchará por preservar las instalaciones germanas de K+S.
Un portavoz de Potash Corp con sede en Alemania dijo que la compañía presentó en las reuniones las ventajas de un acuerdo para K+S y Potash, al tiempo que intentó calmar las preocupaciones del estado de Hesse.
K+S sugirió que estaría en riesgo cerca del 40 por ciento de sus operaciones en Alemania, pero analistas e inversores creen que es una exageración, refiriéndose a los prohibitivos costos de los envíos hacia Europa desde el principal centro de Potash Corp en la provincia de Saskatchewan.