“Estamos en presencia de una nueva promesa incumplida de la presidenta que en el año 2014 anunció con bombo y platillos una ley de protección de glaciares y frente a las presiones de los sectores más conservadores y de la minería está poniendo freno de mano a una iniciativa importantísima para proteger la vida y el agua en nuestro país”, Asegura Matías Asún director de Greenpeace en Chile.
Greenpeace denunció que las señales que ha dado el ejecutivo para retirar el proyecto de ley de glaciares "no han sido pocas". "Dilatación de discusiones, involucramiento de actores poco relevantes y suspensión de comisiones", han despertado las sospechas de los grupos ambientalistas y de algunos diputados que aseguran que una supuesta agenda de reactivación económica del gobierno supone entregarle el patrimonio ambiental a la minería.
“Estamos en presencia de una nueva promesa incumplida de la presidenta que en el año 2014 anunció con bombo y platillos una ley de protección de glaciares y frente a las presiones de los sectores más conservadores y de la minería está poniendo freno de mano a una iniciativa importantísima para proteger la vida y el agua en nuestro país”, Asegura Matías Asún director de Greenpeace en Chile.
El líder ambientalista además agrega que “aquí hay una operación mayor en curso; nos están vendiendo el cuento de que para reactivar la economía no podemos proteger el agua y los glaciares sin hacerse cargo de las consecuencias que esto tendría para la población del país que ya ha visto los efectos de la sequía y el cambio climático en los últimos meses”.
Por otro lado, en una nueva sesión de la Comisión de Medio Ambiente fue suspendida, luego de una reunión entre el presidente de esta Comisión, el Diputado Fernando Meza y el Ministro de Medio Ambiente, Pablo Badenier. En esta ocasión debía debatir una de las discusiones más relevantes de la Ley de Glaciares: proteger los ecosistemas glaciares.
Según Greenpeace "esta discusión es la que más se ha dilatado", ya que el Gobierno no tiene una postura clara al respecto y se ha negado a proteger los elementos del entorno que permiten preservar los glaciares. “El Gobierno enfrentado a la realidad de que su postura es tan deficiente no ha encontrado el apoyo suficiente para que la discusión avance y ha optado por dilatar la discusión hasta retirar el proyecto para complacer a las mineras. Sin embargo la gran mayoría del país sabe que es urgente proteger los glaciares, no vamos a parar hasta que eso se consiga”, agrega Asún.
A estas críticas se agregan otras desde el congreso. Al respecto la diputada Camila Vallejos señaló: “Estamos viendo con preocupación como se ha dilatado el proyecto de glaciares. Hace tiempo que venimos insistiendo ante el gobierno de que esto se tramite, que es urgente, que es necesario dar una protección real y efectiva a los glaciares de nuestro país y lamentamos que se esté postergando la votación en general. Nos preocupa que el gobierno esté dilatando esta materia”.
A ella se sumó el diputado por Arica y Parinacota Vlado Mirosevic; “Lamento que se haya decidido dilatar esta votación que es urgente. Ya lleva suficiente tiempo en la cámara discutiendo sobre este tema y por lo tanto seguir introduciéndole retrasos nos parece negativo y esperamos que en la próxima sesión se avance y no se incorpore una estrategia de dilatación que probablemente es la mejor técnica para hacer morir estos proyectos”.
Actualmente en la comisión de medio ambiente existen tres posturas que se discuten en torno a la ley de glaciares; la primera, la posición del gobierno que busca proteger solo los glaciares que están en parques nacionales y el resto podrá ser intervenido en distinto grado dependiendo del valor que le pueda dar un comité de ministros. La segunda posición, liderada por un grupo de Diputados, busca proteger todos los glaciares en tanto sean declarados reservas estratégicas de agua sin embargo, cuando existan intereses de por medio estos pueden ser afectados vía judaización, donde según los ambientalistas ganará quien tenga más recursos para llevar adelante los juicios. Finalmente, está la posición de Greenpeace quienes han exigido que todos los glaciares sean declarados intocables por ley, donde se garantice la protección del entorno que los conserva.