Un nuevo capítulo se está dando en la disputa que mantienen Antofagasta Minerals (AMSA) y Glencore, a raíz de que la minera nacional construyó por error un botadero de estériles, traspasando la frontera con Argentina, por lo que el material quedó depositado en un terreno propiedad de la minera suiza.
El subsecretario de Minería, Ignacio Moreno, salió al paso de una serie de críticas que recibió por parte de AMSA, después que la autoridad contestara una solicitud de Glencore realizada por Transparencia, a raíz de si el gobierno había revisado y avalaba los resultados de un informe técnico realizado por SGS sobre la calidad de las aguas cercanas al botadero, lo que fue utilizado en el juicio que se mantiene en Argentina.
Según publicó The Clinic, anteriormente AMSA había tildado de grave las respuestas que se entregaron oficialmente a Glencore, porque "dicen oficialmente desconocer información que no sólo estaba en su poder, sino que además ellos mismos habían utilizados y difundido en distintas ocasiones".
De hecho, la minera envió una queja al ministerio por este hecho, ya que la afectó en el juicio, lo que está en proceso de ser respondido.
En una entrevista publicada por el mismo medio, Moreno dijo ayer que sólo se ajustó "a los hechos".
"El Ministerio en ningún momento hizo un requerimiento a esa empresa de un informe, tampoco fue recibido este estudio por parte de SGS, no existe constancia de que el laboratorio haya enviado el informe", explicó.
Reiteró que el ministerio no ha "roto" el criterio de que este es un problema entre privados.
Consultado sobre si podría llevar a Los Pelambres a la justicia por este hecho, dice que es una instancia que siempre está abierta para cualquier ciudadano.