Una serie de agencias del gobierno chino han redoblado los esfuerzos el miércoles para apoyar a los maltrechos mercados del país, que, según el regulador de valores, atraviesan por una fase de pánico y ventas irracionales.
La Comisión Reguladora de Valores de China anunció que China Securities Finance Corp., una entidad que proporciona financiación para comprar acciones, incrementará las adquisiciones de títulos de pequeñas empresas. La iniciativa llega después de la promesa anterior de comprar acciones de grandes compañías para estabilizar el mercado.
El banco central de China también dijo que ayudaría a garantizar que esta entidad tenga abundante liquidez para normalizar el mercado. La agencia estatal podría recurrir al mercado interbancario, emitir bonos o utilizar financiación hipotecaria, dijo el Banco Popular de China en un comunicado. El banco central también dijo que seguirá de cerca la evolución del mercado e impedirá la aparición de riesgos sistémicos y regionales.
Los reguladores también anunciaron el miércoles que relajarán las reglas para que las aseguradoras compren títulos de pesos pesados del mercado y señalaron que las empresas públicas no deberían vender sus participaciones en filiales cotizadas.
Los nuevos esfuerzos se producen tras el fracaso de las medidas de Pekín para detener la caída de los mercados, a pesar de la introducción de estímulos sin precedentes, como recortes en los tipos y compras organizadas de valores por empresas públicas. El miércoles, el Shanghai Composite Index cerró con un desplome de 5,9% y el Shenzhen, de 2,5%.
El portavoz de la Comisión Reguladora de Valores de China, Deng Ge, calificó el tono actual del mercado como “de pánico”. En un comunicado, señaló que “las ventas irracionales han aumentado enormemente y esto ha provocado tensión en la liquidez del mercado de renta variable”.
China está una vez más en el centro de la trama de las materias primas, pero esta vez no es de manera positiva.
El derrumbe del mercado bursátil chino y los temores sobre la crisis económica griega han contribuido a una caída de los commodities a mínimos de varios años, lo que ahogó una incipiente recuperación de los precios de bienes básicos desde el petróleo al mineral de hierro. El declive también ha arrastrado las acciones de empresas de recursos naturales y las divisas de países productores.
Si bien los precios se estabilizaron un poco el martes después de la venta generalizada del lunes, los commodities como clase de activos han registrado un bajón prolongado este año, conforme han aumentado las preocupaciones sobre un exceso de productos como el aluminio y el carbón. El índice S&P GSCI, que sigue el desempeño de una canasta de materias primas, se encuentra 36% por debajo de su nivel de hace un año y ha descendido más de 6% este mes.
Tres semanas de declives en el mercado bursátil chino han ensombrecido el panorama para la segunda economía mundial, que es el mayor comprador de una gama de bienes básicos, como el mineral de hierro, el carbón, el cobre y el oro. Esto podría tener consecuencias para grandes productores, como Brasil, Colombia, Chile y Perú. El martes, las acciones chinas cayeron pese a una serie de medidas del gobierno en los últimos días para apuntalar el mercado. La perspectiva de nuevos problemas económicos en Europa, tras el rechazo de los votantes griegos a las condiciones exigidas para otro rescate en el referendo del domingo, ha agravado la situación de los commodities.
“Hubo ingresos de fondos de inversión hacia el petróleo y los mercados de recursos desde principios (del segundo trimestre), pero es posible que ese dinero haya empezado a salir por la reciente caída de las acciones chinas”, dice Osamu Takashima, estratega de Citigroup Inc. C -2.22%
Analistas de Barclays BCS -1.16% PLC dicen que la llegada de dinero hacia los fondos dedicados a los commodities se ha desacelerado tras un breve repunte a comienzos del año. “La mejora en las entradas de inversiones en los commodities (en el primer trimestre) ya empieza a parecer pasajera”, indicó el banco.
Las divisas de países que dependen de las exportaciones de materias primas se han debilitado. Las monedas de Brasil, Australia y Canadá han caído cerca de 15%, 9% y 7%, respectivamente, frente al dólar. El peso mexicano acumula un descenso cercano al 6% ante el dólar en lo que va del año.
Las acciones de las mineras más grandes y más resistentes se han rezagado. La brasileña Vale SA VALE5.BR -4.09% y las anglo-australianas BHP Billiton Ltd.BHP.AU -3.82% y Rio Tinto PLC han caído a sus niveles más bajos desde la crisis financiera. La australiana Fortescue Metals Group Ltd. FMG.AU -5.75% , una empresa altamente endeudada que es la cuarta mayor productora de mineral de hierro del mundo, acumula una pérdida de 28% desde el inicio de junio y se encuentra en su punto más bajo desde principios de 2009.
El bajón del mineral de hierro en los últimos días ilustra el pesimismo en torno a los commodities. Pese a la menor demanda, las grandes mineras siguen incrementando sus envíos a China, lo que ha vuelto a desatar dudas sobre un exceso de oferta en momentos en que caen los pedidos de acero, crecen los inventarios de mineral de hierro en los principales puertos y aumenta el nerviosismo en la bolsa china. El mineral de hierro se había recuperado a más de US$60 la tonelada tras caer a un mínimo de una década de US$47 la tonelada en abril. El martes, volvió a ubicarse por debajo de US$50, a US$49,70.
El aluminio, otro metal afectado por el exceso de oferta, ha vuelto a cotizar alrededor de sus mínimos de seis años tras un breve ascenso en el segundo trimestre. El repunte de los precios del crudo desde el inicio del año también se ha desinflado debido recientes datos que muestran altos niveles de inventario en Estados Unidos. Las expectativas de que el petróleo iraní inunde el mercado si se llega a un acuerdo sobre el programa nuclear del país esta semana han intensificado la presión bajista.
En Asia, la debilidad de los commodities ha golpeado a los países productores. Los ingresos de Australia se han reducido en línea con la caída de los precios del mineral de hierro, su principal exportación. Asimismo, los exportadores de petróleo y gas de Asia-Pacífico probablemente también se vean afectados. Malasia, por ejemplo, sufrió un descenso interanual de 48% en sus exportaciones de gas natural licuado en mayo.
Sin duda, algunos podrían beneficiarse de los menores precios de las materias primas. La caída de las cotizaciones del mineral de hierro podría aliviar la presión sobre las siderúrgicas chinas. Hasta hace poco, los precios del acero habían estado declinando más rápido que los del mineral de hierro, lo que redujo los márgenes de las siderúrgicas a su nivel más bajo desde 2011, dice Helen Lau, analista de Argonaut Securities. “La caída de los precios del mineral de hierro ayudará a restaurar la rentabilidad del acero”, afirma.
Los precios bajos por sí mismo también podrían resultar ser la mejor cura para el bajón de los commodities. Cuando el crudo descendió en el segundo semestre de 2014, ayudó a los márgenes de las refinerías asiáticas, lo que llevó a las empresas a procesar más crudo y alentó las compras de China para aumentar sus reservas a principios de año. Los precios minoristas de los combustibles para transporte cayeron, lo que resultó en una mayor demanda de gasolina en mercados de crecimiento clave como China e India.
El pesimismo podría ser difícil de neutralizar, especialmente teniendo en cuenta las perspectivas de China. “Nuestra opinión pesimista ha cobrado fuerza y se ve reforzada por los recientes acontecimientos”, señala Robert Hook, gestor de fondos de SG Hiscock & Co., en Melbourne. “Cuesta determinar si hay una burbuja financiera (...) pero, normalmente, un movimiento del mercado así es un precursor de un descenso de la economía”.