La biomasa avanza en Brasil y según el gobierno llegó a 12.417 MW de capacidad instalada en abril, lo que representa la tercera fuente más importante de la matriz energética, superando a la capacidad que tendrá la represa de Belo Monte, detrás de la hidroelectricidad (66,1% ) y gas natural (9,5%). En este conjunto, la biomasa de la caña de azúcar, es el punto más destacado, alcanzando un récord de 10.000 MW de capacidad instalada. Teniendo en cuenta todas las centrales de biomasa en el Sistema Eléctrico Brasileño (SEB), que incluyen el uso de otros combustibles además del bagazo de la caña de azúcar, la cuota de la biomasa en la matriz de la capacidad instalada de Brasil en abril fue del 9,1%.
Para la producción de electricidad mediante fuentes de biomasa térmica en marzo, se registró la participación del 1,1% del generado total, equivalente a 543 GWh. Es la energía suficiente para abastecer el Distrito Federal de Brasilia. El aumento fue posible por la disponibilidad estacional de los combustibles utilizados. En los últimos doce meses, se registraron las mayores cantidades de generación de energía a partir de biomasa entre mayo y diciembre, con una mayor generación en agosto, equivalente a 2.765 GWh, equivalente a 6.2% de la energía producida. En diez años, la capacidad instalada en plantas de biomasa térmica en Brasil ha aumentado en 8.362 MW.
Se espera que en 2018 entre en funcionamiento más de 1.750 MW de esta fuente y se espera que otros 2.400 MW que entre en funcionamiento en 2023.
La producción de etanol creció 4% en 2014 y llegó a 28,6 mil millones de litros, superando un récord de 27,9 mil millones de litros de 2010, según la Empresa de Investigación Energética (EPE). Este fue el tercer aumento consecutivo en la producción de biocombustibles. Según EPE, el aumento fue causado por el bajo precio internacional del azúcar, que dirige la mayor parte de la producción de caña de azúcar para la producción de biocombustibles, además de la liberación de los fondos públicos para el sector de azúcar de la energía, en medio de las crecientes expectativas de que el porcentaje de etanol anhidro en la gasolina C (de 25% a 27%, a partir de marzo de 2015) y la devolución de los impuestos sobre la gasolina.
En comparación con el biodiesel, el estudio de la EPE indica aumento del 16 ,7% del consumo en 2014 en comparación con el año anterior, totalizando 3,4 mil millones de litros. Desde 2005, cuando se implementó el Programa Nacional de Producción y Uso de Biodiesel (PNPB) hasta diciembre de 2014, que fueron producidos y consumidos en el país 17 mil millones de litros de biodiesel.
Con este resultado, Brasil ocupa el segundo puesto en el ranking mundial de la producción y el consumo de biodiesel, sólo por detrás de los Estados Unidos. Entre las regiones brasileñas, el Medio Oeste y el Sur concentran el 83% del biodiesel producido y consumido en el país el año pasado.