Las inversiones mineras en Perú, que han impulsado el crecimiento económico durante la última década, cayeron un 14% en el primer trimestre del año y podrían caer aún más si la violenta oposición contra la minería continúa.
Pero el panorama sombrío, proporcionado el mes pasado por el Presidente de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), Carlos Gálvez, puede ser de corta duración, según informa el periódico local Pulso.
Citando un estudio del Scotiabank, el artículo sostiene que la principal razón de la caída de la inversión son las crecientes dificultades para atraer financiación en un entorno de bajos precios de los metales, que tiene a los mineros gravemente heridos.
"Las inversiones han caído porque hay menos proyectos a gran escala," dijo Erika Manchego, economista del Departamento de Estudios Económicos de Scotiabank.
Añadió que la inversión minera probablemente caerá aún más este año, un 17% más en comparación con 2014.
De enero a marzo, casi la mitad de todas las inversiones mineras en Perú (48%) se deben a dos proyectos clave de cobre: la expansión de Cerro Verde, de Freeport-McMoRan (NYSE: FCX) de US$ 4,6 mil millones y Las Bambas de MMG.
A pesar de estos esfuerzos masivos, el Scotiabank prevé que las inversiones mineras en Perú probablemente totalizarán US$ 7700 millones este año, frente a los US$ 8700 millones en 2014 y significativamente inferior a la cifra récord de 10 mil millones en 2013.
En 2016 y 2017, se espera que las inversiones anuales sigan disminuyendo a US$ 5 mil millones. Esta cifra, según la SNMPE podría ser significativamente más baja si el proyecto Tía María de Southern Copper (NYSE, LON: SCCO) de US$ 1,400 millones no va hacia adelante debido a las protestas en curso, la mayor ola de oposición contra la minería en tres años.
El trastorno también podría hacer añicos los sueños de Perú de convertirse en un centro neurálgico de cobre para el año 2016, recuperando su segundo lugar como del principal productor mundial, detrás de Chile.