El futuro de las “tierras raras” que se usan en todo tipo de productos, desde los iPhones a los misiles Tomahawk, se oculta bajo las plantaciones de pinos del sur de Chile y en una fórmula secreta, según la minera de capital cerrado Minería Activa.
La arcilla de los alrededores de la ciudad de Concepción contiene elementos como el neodimio y el disprosio en concentraciones similares a las encontradas en el sur de China, que prácticamente ha acaparado el abastecimiento mundial hasta ahora. Las similitudes terminan allí, declaró en una entrevista Arturo Albornoz, responsable del proyecto BioLantánidos de Activa.
Mientras que las mineras de China suelen inyectar sulfato de amonio en la tierra y esperar a que este producto químico vaya saliendo con los minerales, en BioLantánidos el plan es extraer la arcilla, someterla a un proceso de filtrado en tanques con químicos biodegradables y devolverla limpia a la tierra para volver a plantar pinos y eucaliptos. Puede que esto sea laborioso pero Albornoz espera que compañías como ThyssenKrupp AG, Apple Inc. y el fabricante de los misiles de crucero Tomahawk,
Raytheon Co., acepten pagar una prima al saber que sus proveedores no están destruyendo el planeta.
“Es nuestra gran apuesta a la minería verde”, dijo Albornoz desde el sitio del proyecto, en las cercanías de la ciudad de Penco, unos 400 kilómetros (250 millas) al sur de Santiago. “Los productos químicos quizá sean más caros pero ahorramos en almacenamiento y gestión de desechos”, evitando todas las escombreras que afean el paisaje en China.
Albornoz, ingeniero metalúrgico oriundo de Concepción, no accedió a revelar cuál es la fórmula química biodegradable, que está en trámite de patentamiento por parte de la compañía.
Este no es el mejor momento para desarrollar un proyecto de tierras raras, según la firma de investigación Stormcrow Capital Ltd.
Los precios bajaron en los últimos años luego de que China dijera que cumpliría con una orden de la Organización Mundial del Comercio de poner fin a los cupos de exportación impuestos en 2010. El itrio, por ejemplo, que se usa en los motores de los aviones a chorro, bajó un 33 por ciento en el último año, mientras que el óxido de neodimio lo hizo un 8 por ciento y el disprosio un 2,2 por ciento, de acuerdo con los precios del Mercado de Metales de Shanghái.
“Esto lleva a los compradores a esperar para reponer sus existencias, dado que el precio de mañana probablemente sea más bajo que el de hoy, y esto incluso se ha extendido a China”, manifestó el presidente de Stormcrow, Jon Hykawy, al responder preguntas por correo electrónico. “El mercado no está muy bueno en estos momentos”.
Las empresas que invirtieron durante el auge de las tierras raras se han visto perjudicadas en el último año. Las acciones de Molycorp Inc. bajaron 84 por ciento en ese período y el lunes la compañía de Greenwood Village, Colorado, dijo que no cumpliría con el pago del cupón de un bono. Por su parte Lynas Corp., uno de los dos productores importantes de fuera de China, se desplomó 73 por ciento en Sídney.