Tía María es un proyecto de cobre, ubicado en la provincia de Islay, Arequipa, propiedad de Southern Copper.
El proyecto ha estado en constante conflicto desde que, en 2009 presentó el primer Estudio de Impacto Ambiental (EIA), el cual tuvo un sinfín de observaciones por parte de la UNOPS y que fue rechazado por la comunidad.
En 2012, la empresa levanta todas las observaciones y realiza un segundo EIA aprobado por el Ministerio de Energía y Minas (MEM) en 2014.
Tía María representa una inversión de US$ 1.400 millones, será una mina a tajo a abierto con una vida útil de al menos 18 años. La mina producirá 10.000 ton/día de cobre.
El proyecto comprende dos yacimientos a tajo abierto: La Tapada, que contienen 425 338 000 ton de mineral de cobre oxidado, con una ley de 0,43% Cu y; Tía María con 225 377 000 ton de mineral de cobre oxidado, con una ley de 0,29% Cu.
La explotación se hará en tres etapas. Primero se explotará La Tapada. Luego el tajo Tía María, - así se explotarán ambos yacimientos-, y en una tercera etapa sólo se explotará el yacimiento Tía María.
Uno de los temas que genera confusión en la población, es la ubicación del proyecto cuprífero.
Tía María NO se encuentra en el Valle de Tambo. Es más, la planta de proceso se ubicará a 8,5 kilómetros al Noroeste del Valle de Tambo.
Específicamente, Tía María se encuentra en los distritos de Cocachacra, Mejía y Deán Valdivia, provincia de Islay, Región Arequipa.
La localidad habitada más cercana es El Fiscal, a 4 km. En el caso de Cocachacra el Proyecto se ubica a 7 km.
Un aspecto importante a destacar sobre la ubicación, es que el Proyecto Minero Tía María se encuentra en una zona totalmente desértica que no califican como valle; que no son parte del Valle de Tambo y que no tienen aptitud agrícola. Las características del suelo donde se ubicarán los Yacimientos de La Tapada y Tía María del Proyecto Minero Tía María son Entisols (sin desarrollo de perfil), Aridisols (típicos de zonas desérticas) y Andisols (porosos).
Las instalaciones del Proyecto Minero Tía María se desarrollarán no sólo fuera del Valle de Tambo, en tierras que no tienen aptitud agrícola, en un desierto y en un nivel altitudinal (altura en relación al Valle) de entre 200 mts. a 900 mts., lo que garantiza que no se afectará el Valle, ni las actividades económicas que ahí se desarrollan.
En cuanto a las zonas de influencia, el EIA especifica como área de Influencia Social Directa los distritos de Cocachacra y Deán Valdivia y el distrito de Mejía. La Delimitación consideró las principales actividades de las poblaciones, generadas por las actividades que realizará el proyecto minero en una determinada área geográfica, presencia de las instalaciones del proyecto minero y el campamento de la empresa minera, ubicación de la planta desalinizadora.
El área de Influencia Social Indirecta abarca los distritos de Punta de Bombón, Islay y Mollendo. La delimitación del área consideró el tránsito y las percepciones por la ejecución del proyecto debido a su contigüidad a los distritos del área de influencia social directa.
Para su proceso, Tía María utilizará agua de mar. Durante su operación va requerir 235 lts/sed de agua que tendrá como fuente total el agua de mar, la que será desalinizada mediante un proceso denominado Ósmosis Inversa. Del total de agua de mar captado el 40% se usará en el proceso minero, y el 60% restante, en forma de salmuera será devuelto al mar de manera tal que no se generen impactos ambientales
La salmuera que se devolverá al mar, se transportará por un ducto a 856 m de distancia desde la línea de alta marea y a una profundidad de entre 25 a 30 m, lo que garantiza su dilución y dispersión sin causar impactos ambientales, a la fauna acuática o a los recursos hidrobiológicos. Además no afectará en lo más mínimo el paisaje o zonas de recreación lo cual se asegurará a través del Programa de Monitoreo de agua de mar permanente.
Se utilizará un sistema de difusores en el punto de descarga de salmueras, para permitir una dilución rápida de las aguas saladas del proceso de desalinización.
El balance hídrico actual del Valle de Tambo muestra una disponibilidad de agua de 800 Millones de Metros Cúbicos (MMC), de los cuales 500 se van al mar como excedentes, y ella estará disponible en su integridad para las actividades habituales de la zona (en especial agrícolas) ya que el Proyecto Minero Tía María no tomará agua del Valle o del acuífero para su proceso de operación o explotación. Además, en caso que existiese por razones naturales o climáticas una situación de stress hídrico, lo que no es probable, se tendrá disponible el recurso que provea la represa de Paltuture, que ha recibido viabilidad y que estará listo en 2017 y suministrará 82 MMC como volumen de agua regulada al valle de Tambo, mejorando sus más de 13 000 has bajo riego.
Este es el segundo punto del conflicto. La minera ha previsto todo un sistema para minimizar cualquier impacto posible.
Si bien es cierto una voladura o explosión genera ruido y polvos, estos no afectarán al Valle de Tambo, a sus cultivos o a las poblaciones más cercanas. El EIA explica que:
1. La distancia del Tajo más cercano, con el Valle y con el poblado El Fiscal que supera los dos kilómetros.
2. La diferencia altitudinal que hace que el ruido no llegue ni al Valle ni a la población
3. Las voladuras se efectuarán con una periodicidad interdiaria.
4. El material del chancado de roca se almacenará en un depósito cerrado “Domo”.
5. El viento sopla en dirección Nor-Este, es decir en dirección opuesta al Valle o cualquier centro poblado, lo que asegura que no se verán afectados.
6. El polvo que genere la maquinaria o las voladuras será irrigado con el fin que no se mantenga en suspensión
En la etapa de construcción, Tía María va a requerir más de 3.000 puestos de trabajo. Durante sus 18 años de operación, va a generar 650 puestos de trabajo directos y 3.500 puestos de trabajo indirectos.
En cuanto al aporte en concepto de canon y regalías, la región de Arequipa va a recibir S/ 270 millones por año. Mientras que la provincia de Islay recibirá S/ 64 millones al año y el distrito de Cocachacra, S/ 34 millones al año.
Además, la empresa se ha comprometido a realizar diversas obras para mejorar la salud y la educación. Por ejemplo, proponen una mejora en los servicios y la infraestructura educativa, competencias académicas y capacitación técnica.
En materia de salud, la empresa ha propuesto una mejora en los Servicios de Saneamiento (Agua Potable y Desagüe)
Además la minera propone otras oportunidades de trabajo como la dinamización de las actividades económicas (Restaurantes, comercio, turismo, etc.); obras de infraestructura: almacenamiento de agua, mejora de sistemas de riego, silos para almacenamiento de semilla. Apoyo actividades locales: agricultura, ganadería, pesca, acuicultura, etc. crecimiento económico: mayor actividad comercial.
El EIA es tan sólo uno de un conjunto de instrumentos que buscan garantizar el buen manejo ambiental de un proyecto como el de Tía María.
Así: 1. Se requiere la aprobación de un Plan de Cierre de Mina antes del inicio de la operación y en este deben señalarse medidas de manejo e incluso se exige que se garanticen las acciones de cierre final y post-cierre para garantizar que no se genere ningún tipo de pasivo ambiental. 2. OEFA como la entidad de fiscalización ambiental, que ha demostrado objetividad y credibilidad en su accionar, verificará el cumplimiento de los instrumentos de gestión ambiental y de las regulaciones ambientales. 3. De acuerdo al nuevo Reglamento Ambiental para las Actividades Mineras, el Estudio de Impacto Ambiental debe ser actualizado en su Plan de Manejo al 5to Año.
La minera Southern realizó dos Estudios de Impacto Ambiental, el primero que fue ampliamente observado, se realizó en 2008 y 2009. Y el segundo EIA se elaboró entre 2012 y 2013. En agosto de 2014, y luego de haber levantado todas las observaciones de la UNOPS, el Ministerio de Energía y Minas (MEM) aprobó este segundo EIA.
Se realizaron dos Talleres informativos como parte del segundo EIA en la localidad de Dean Valdivia el 24 de octubre de 2013 y otro taller el 30 de ese mismo mes. En ambos participaron más de 600 personas.
La Audiencia Pública fue realizada en la localidad de Cocachacra el 19 de diciembre de 2013, con la asistencia aproximada de 1,600 personas.
