La situación de abastecimiento de agua en las operaciones mineras de la Región de Antofagasta es crítica. Así de tajante fue ayer el presidente ejecutivo de Codelco, Nelson Pizarro, al referirse a los principales problemas que enfrenta la corporación para desarrollar sus proyectos de futuro.
Lo anterior obedece principalmente al crítico escenario que enfrenta el abastecimiento de agua dulce a nivel nacional y sobre todo en el norte, donde los acuíferos no están dando abasto para permitir el normal funcionamiento de la actividad minera y satisfacer el consumo humano.
Por ello Codelco, que mantiene cuatro operaciones en la región (Chuquicamata, Radomiro Tomic, Ministro Hales y Gabriela Mistral) ha decidido poner sus fichas en la desalación de agua de mar, a partir del proyecto RT Súlfuros que modernizará la división Radomiro Tomic.
El plan es partir con una planta de unos US$500 millones que permitirá abastecer a esa unidad. Sin embargo, el directorio decidió construir una planta modular, que podría crecer en hasta tres veces respecto de lo inicialmente proyectado. Así, podría llegar hasta los 1.800 litros por segundo, lo que satisfaría los requerimientos de todas sus divisiones del norte y, eventualmente, para consumo humano de la ciudad de Calama.
Según señaló el presidente ejecutivo de Codelco, Nelson Pizarro, la decisión de la empresa es invertir del orden de US$500 millones en el norte para abastecer de agua a la nueva concentradora de RT.
“Está adjudicada la instalación en Tocopilla de una planta desaladora. El primer módulo nos aportará 630 litros por segundo. La semana que viene se firman los contratos para comenzar con la construcción por parte del contratista. Esta planta desaladora va a tener dos módulos más hasta llegar a producir 1.800 litros por segundo. Está asignado del orden de 190 kilómetros de cañerías de 44 pulgadas para llevar el agua desde Tocopilla hasta RT de agua industrial que se puede potabilizar fácilmente”, dijo Pizarro, quien ayer participó de una sesión especial sobre Codelco en la Comisión de Minería y Energía del Senado.
“Nosotros vamos a generar el impacto en Calama y estamos viendo que este tema de la sequía suma y sigue, por lo tanto, la decisión está avanzada y no hay alternativa: o hay agua desalada o no hay minería”, dijo Pizarro, quien agregó que las faenas de Codelco con ley sobre 0,6% de cobre pueden pagar el uso de agua desalada, pero que faenas bajo 0,3% sencillamente no. “Afortunadamente nosotros podemos”, añadió.
Frente a la pregunta de si Codelco podría usar agua de mar de manera directa, Pizarro agregó que aunque es una alternativa factible y más económica, el proyecto no fue concebido así. “Decidimos no usar agua de mar, y voy a ser honesto, porque nuestros ingenieros en su momento no se atrevieron porque la primera faena que sí se atrevió, que fue Esperanza, generó una curva de aprendizaje; es perfectamente posible usar el agua de mar: impacta la recuperación del molibdeno y los relaves, pero ambas cosas tienen solución. La parte negativa es la agresividad que tiene el agua salada pero hay un trade off que avala su uso”, dijo.
El ejecutivo presentó las proyecciones de producción, excedentes y costos de la estatal. Se espera para este año un total de excedentes de US$2.142 millones, cayendo a US$2.004 el año que viene y a US$1.731 en 2017. La producción, en tanto, pasará de 1,703 millón de toneladas este año a 1,671 en 2016, 1,663 millón en 2017 y 1,551 millón de toneladas de cobre fino en 2018. El total de costos y gastos pasará de 219 centavos de dólar este año a 249 en 2016 y 259 el 2017, mientras que el costo de caja (C1) aumentará de 142 centavos de dólar este año a 152 centavos de dólar en 2016 y 157 el 2017.
Las grandes mineras del país están comenzando a contabilizar los efectos que puede tener la reforma laboral que está en trámite en el Congreso, algo que si provocara un aumento forzado en los suelos de la industria, podría tener un efecto negativo en el PIB del país, de unos US$ 3.000 millones en cinco años.
En ese plano, el presidente ejecutivo de Codelco, Nelson Pizarro, explicó ante la comisión de Minería y Energía del Senado, un punto que podrían impactar a la corporación.
Según precisó, los cambios a la jornada pasiva, que se refiere al tiempo que el trabajador está a disposición del empleador sin realizar labores propias del negocio, como serían algunos tiempos de traslado en la minería, tendrían un efecto de hasta US$ 253 millones adicionales en pagos de bonos a los trabajadores.
Pizarro explicó que actualmente unos 14 mil contratistas están afectos al pago de bonos por este concepto -para compensar los tiempos de traslado entre las casas de cambio hasta las faenas-, lo que implica un desembolso de US$ 3,6 millones.
De concretarse los cambios que propone la reforma laboral, éstos podrían incrementarse en 10 veces en un escenario base, pasando a unos US$ 34 millones solamente considerando a este grupo, pero irá aumentando dependiendo del detalle de la normativa.
"Me imagino que este tema será abordado en la reforma laboral y hemos dado algunas cifras para encuadrar la magnitud del problema", explicó Pizarro en la comisión.
Cuatro escenarios
Para Pizarro, una primera aproximación para constatar el posible impacto en la compañía fue la de valorar la jornada pasiva con un monto equivalente al valor de la hora extraordinaria. Esto, porque la reforma laboral incluye una ampliación de las materias de negociación colectiva, en temas como la jornada pasiva, donde se contempla un pago máximo de una hora diaria, valor que deberán negociar las partes asegurando un piso no inferior al de las horas extraordinarias.
Esta propuesta en específico hizo que la estatal se planteara cuatro escenarios de costos dependiendo de la cantidad de trabajadores que pudiesen verse beneficiados.
Si además de los 14 mil trabajadores actuales se incluye al total de contratistas de operación e inversión divisional, cerca de 39 mil trabajadores se verían involucrados en estos pagos, lo que elevaría el costo a US$ 94 millones.
El tercer escenario arroja mayores costos por US$ 116 millones si los beneficiario contempla la total de contratistas y se agregase los trabajadores de los proyectos estructurales, cuyo universo es de 48 mil.
Finalmente, si se considera el total de trabajadores propios y los contratistas, esta suma alcanzaría los US$ 253 millones.
Conflictos con contratistas
El ejecutivo abordó también los conflictos que la minera ha tenido que enfrentar con contratistas entre 2006 y 2014, donde han implicado el equivalente a 120 días de interrupciones de los procesos productivos.
En el caso de cortes parciales de El Teniente, El Salvador y Andina ha significado costos por unos
US$ 250 millones, a lo que se suman otros US$ 300 millones que le ha significado a la corporación los acuerdos para resolver los problemas.
Pizarro aseguró que para superar esta problemática, el foco de la administración ha estado en mejorar los estándares de las casas de cambio, acercándolas a las faenas para reducir los tiempos de traslado y mejorar sus estándares de habitabilidad, lo que debería finalizar este año.
"Hemos estado trabajando con las distintas organizaciones sindicales el tema de la jornada pasiva, pero es un tema que todavía no tiene una solución, sin embargo está debidamente pagado y compensado", dijo.
CORPORACIÓN DESCARTA RIESGO DE LIQUIDEZ
Un férreo rechazo al informe de Moody's, que ubicó a Codelco entre las seis empresas chilenas con riesgo de liquidez alto, entre las diez que mantiene cobertura, hizo el gerente de Contraloría de Codelco, Héctor Espinoza.
El ejecutivo aseguró que la estatal no tiene este riesgo, ya que 2/3 del financiamiento de la compañía proviene de recursos propios. Esto se suma al aporte que hace la capitalización del Estado a la composición de la deuda neta, ya que se aseguró la inyección de hasta US$ 4.000 millones, lo que le otorga estabilidad y evitar riesgo en el financiamiento. "Es claro que las inversiones que tenemos previstas en el quinquenio es una sobrecarga relevante que naturalmente durante un ejercicio puede o no provocar algunos desajustes de corto plazo en la caja de Codelco, pero esa situación está manejada como parte de la política de financiamiento", aseguró.
Dan luz verde a planta desaladora para RT
Cerca de US$ 500 millones invertirá Codelco para la construcción de una planta desaladora que busca abastecer de agua a la nueva planta concentradora de RT. Así lo informó Pizarro, quien precisó que estará ubicada en la caleta La Viuda en Tocopilla, cuyo primer módulo tendrá una capacidad de 630 litros por segundo. "Eso está aprobado, está firmándose la próxima semana para que el contratista empiece la construcción de la planta", anunció Pizarro.
La inversión contempla la edificación de dos módulos adicionales para totalizar una capacidad de tratamiento de agua de 1.800 litros por segundo, una de las más grande del país. El recurso será trasladado a través de 190 kilómetros de cañería de 8 pulgadas desde Tocopilla hasta RT.
"Esto va a generar un impacto en Calama, porque vemos que la seguía suma y sigue, por lo tanto la decisión está lanzada, no hay alternativa", aseguró.