“Obviamente, nos afecta muchísimo a nosotros y también afecta lo que nosotros aportamos al fisco. Nuestra esperanza es que para diciembre de este año empiecen a subir, lo que sería de beneficio mutuo para la empresa y el Gobierno”, dijo.

Detalló que cuando empezaron a operar la onza troy de oro estaba entre los $1,650 y $1,700 dólares, pero ahora se está vendiendo en precio cercano a los $1,190 dólares.

Este descenso no supone un balde de agua fría para las cuentas de la minera ni para las del país, dado que los descensos empezaron en 2014, cuando la Barrick generó el 55% del crecimiento del PIB, y las proyecciones de este año se hicieron con precios cercanos a los actuales.

Sobre las denuncias de contaminación ambiental y del agua que estaría afectando la salud de los moradores de las comunidades de vecinas de la mina, Rocha declaró que, en este sentido, Barrick está libre de responsabilidad.

“Como saben las enfermedades se desarrollan con el tiempo y nosotros tenemos aquí dos años operando la mina”, dijo, abundando en la explicación de que todavía están vigentes los efectos del pasivo ambiental generado por la estatal Rosario Dominicana, que empezó a explotar Pueblo Viejo en 1979.

Dijo que Medio Ambiente ha inspeccionado su actividad en 52 ocasiones y no ha encontrado indicios de que sus operaciones estén causando cáncer, afecciones en la piel u otro tipo de enfermedades que son citadas por moradores de la zona al hacer las denuncias.

Rocha habló de estos temas este martes, al finalizar el acto de presentación de resultados del proyecto “Manejo y conservación de los recursos naturales de las colinas bajas desde Piedra Blanca hasta Los Haitises”, que se lleva a cabo conjuntamente con Enda Dominicana.

El informe de avance fue presentado por Mamerto Valerio, quien destacó que en tres años de ejecución el proyecto ha tenido un costo de US$6,000,000 y un impacto positivo para al menos 6,000 familias.

Según precisó,  32,351 tareas fueron reforestadas en este periodo con la siembra de casi 1.3 millones de plantas y se produjeron 2.3 millones de unidades agroforestales en beneficio de cuatro mil familias de 553 comunidades.

También informaron que realizaron 100 cursos e instalaron 18 microacueductos que mejoran el acceso a agua de 553 familias.

El proyecto será extendido por dos años más, con un presupuesto de US$4,000,000. Tanto de esta partida como de la de la primera etapa (US$6,000,000), Barrick aporta el 50% y Enda Dominicana y los beneficiarios directos el resto.