El reciente repunte de los precios del petróleo fue "prematuro", dada la continua situación de exceso de suministro, dijo el martes Goldman Sachs, señalando que el movimiento frenaría el reajuste del mercado.
Pese a la reducción de la actividad de producción liderada por Estados Unidos, el banco dijo que persistiría el exceso de oferta este año. Goldman veía un exceso de suministro en el mercado del petróleo de 1,9 millones de barriles por día en el segundo trimestre de 2015.
Un debilitamiento secuencial de los precios se requeriría para que se reanude el reajuste del mercado, dijo el banco.
Los productores estadounidenses probablemente incrementen la actividad, de manera eventual, en caso de que los precios del crudo estadounidense tipo WTI sigan cerca de los 60 dólares por barril, agregó.
"Cuanto más tiempo tarde en materializarse este declive de precios, mayores son los riesgos al alza en nuestros inventarios proyectados, ya altos, hacia el 2016, especialmente en Estados Unidos", dijo el banco.
Los precios del petróleo se han recuperado este año tras una brusca baja a fines del año pasado, aunque muchos analistas ahora dicen que está por terminar el avance de los valores.
Los futuros del crudo referencial Brent se han recuperado un 15 por ciento desde el comienzo del año, y han ganado hasta un 40 por ciento desde su mínimo en el 2015.
La drástica caída de los precios del crudo desde el año pasado ha sido una bendición para los consumidores de todo el mundo, pero ha aumentado la volatilidad del mercado petrolero, situación que podría acabar afectando negativamente a la economía mundial, advierte el martes un estudio.
Los volátiles precios de la energía pueden provocar retrasos en las inversiones empresariales y ralentizar el crecimiento del empleo, según el estudio coescrito por Lord Nicholas Stern, un prominente economista experto en clima que trabajó para el Tesoro británico.
La Comisión Global sobre la Economía y el Clima, una iniciativa internacional encabezada por el expresidente mexicano Felipe Calderón, publicará el martes el estudio “Precios del crudo y nueva economía climática”, que analiza los beneficios y los costos de tomar medidas contra el cambio climático.
El estudio urge a los responsables de política a apoyar las energías renovables, que ofrecen menores precios y una baja volatilidad.
Las fuentes de energía renovable, como la solar y la eólica, tienen pocos o ningún costo operativo después de instaladas, indica el estudio, lo que significa que se puede controlar el costo de la energía durante 20 años o más. Además, el informe indica que los precios de instalar renovables siguen cayendo, lo que hace que estas fuentes de energía sean cada vez más competitivas en cuanto al costo.
El estudio además advierte de que los actuales bajos precios del crudo aumentan la adicción a los combustibles fósiles, lo que alimenta el cambio climático. El estudio cree que el periodo de bajos precios debería ser aprovechado por los gobiernos para reducir esa dependencia y para reformar los subsidios al combustible fósil.