El primer ministro instó a los pobladores de la provincia arequipeña de Islay que se oponen al proyecto minero a deponer el uso de la violencia en sus protestas.
Afirmó que ésa es la única condición del gobierno para retomar el diálogo y llegar a un entendimiento.
"Sin violencia, nosotros vamos a dialogar y nos vamos a entender, estoy absolutamente seguro. Vamos a dialogar sin violencia; bajo amenazas, de ninguna manera", señaló Cateriano.
Agregó que el gobierno está haciendo todos los esfuerzos para iniciar el diálogo; no obstante, afirmó que "no podemos iniciarlo cuando hay uso de violencia.
En la víspera, quince policías y dos civiles resultaron heridos luego de que los agentes fueran atacados cuando intentaban despejar la vía que une a los distritos de Cocachacra, Dean Valdivia y Punta de Bombón, en Islay.
Según recordó Cateriano, ayer se pudo apreciar que las principales víctimas de la violencia fueron los agentes policiales enviados para vigilar el orden.
"Eso no lo podemos aceptar, se tiene que restablecer el principio de autoridad. En democracia el uso de violencia está absolutamente vedado. Cualquier ciudadano tiene derecho a expresar su protesta libremente, pero no debemos ni podemos aceptar el uso de la violencia", enfatizó el premier.
Ante la prensa, el jefe del Gabinete confirmó que recibieron una comunicación por parte de las autoridades locales de Islay, en la que solicitan la reanudación de la mesa de diálogo con intermediación de la Defensoría del Pueblo.
Desde el pasado 23 de marzo, un grupo de pobladores de Islay acata un paro en contra de Tía María, perteneciente de Southern Copper, por considerar que el proyecto perjudicaría al valle de Tambo.
Unos 200 agentes de la policia nacional que pertenecen a la región policial Piura estan siendo enviados a la zona del conflicto minero por el proyecto Tía María en la región Arequipa; así lo confirmaron las fuentes policiales en la ciudad de Piura.
Consultado el coronel Walter Cardenas, indicó que esta decisión obedece a una disposición del Comando policial de nuestro país, ya que se requiere mayor presencia en el sur del país por el referido conflicto.
Cardenas confirmó que ayer domingo 03 de mayo partieron 100 agentes y hoy otros 100 agentes de la USE han sido enviados por tierra. “Si el comando lo requiere se tiene que ver nuestra disposición de efectivos para reforzar Arequipa. Su permanencia allá, será temporal”, refirió.
El Gobierno reiteró su voluntad de reanudar el diálogo con los alcaldes y dirigentes del valle del Tambo, en la región Arequipa, que se oponen al proyecto minero Tía María, pero para ello exige el cese de los actos de violencia y se brinden las garantías del caso para continuar las conversaciones.
Con ese fin, el ministro de Agricultura y Riego, Juan Manuel Benites, se reunió esta tarde con el adjunto de la Defensoría del Pueblo para los conflictos sociales, Rolando Luque, a quien dejó constancia de esa disposición.
Benites Ramos fue enfático en señalar que, para ello, es necesario el cese de los actos de violencia, a fin de lograr un ambiente adecuado de diálogo y se brinden las garantías para devolver la paz a la provincia del Islay.
Asimismo, el ministro dijo que confía en que los alcaldes y dirigentes analizarán la situación que viven varios distritos de esa provincia, y aboga a que se adopte una decisión inmediata que beneficie a todos los arequipeños y evite un clima perjudicial para la región, según una nota de prensa del sector.
El último intento de diálogo se frustró el miércoles pasado, cuando pese a la presencia de cuatro ministros de Estado en Islay, algunos alcaldes y dirigentes se negaron a dialogar, disconformes con la presencia de los congresistas de Arequipa.
Cuando un helicóptero de la Policía Nacional del Perú sobrevolaba rasante el distrito de Deán Valdivia, provincia de islay, los manifestantes opositores al proyecto minero Tía María lanzaron una piedra que impactó contra la parte frontal de la cabina de pilotos, provocando un forado de 15 centímetros.
Según el Ministerio del Interior, este ataque puso en riesgo a los tripulantes por lo que la nave tuvo que regresar a la base de inmediato. Actualmente, el helicóptero está inoperativo.
“No se puede permitir que unos delincuentes disfrazados de antimineros ataquen la estación de bomberos, las viviendas de la población y la comisaría. Aquellas personas que atacan con piedras -usando hondas y huaracas- una comisaría no son manifestantes, son delincuentes que agreden a la autoridad y la policía tiene todo el derecho de protegerse y repeler el ataque”, dijo el ministro José Luis Pérez Guadalupe, respecto a los actos de violencia.
