José Coya, presidente de Ancap.

Una de las inversiones que estaba prevista para el año pasado en conjunto con Petrobras era la perforación de un pozo para la búsqueda de gas mediante la técnica de fracking. El ente debía desembolsar alrededor de US$ 5 millones, pero ese trabajo fue postergado y hasta ahora no se realizó.

Carboclor.
El otro negocio que Ancap tiene en Argentina es la empresa de petroquímicos Carboclor, que es en su mayoría propiedad del ente. Sus resultados mostraron en 2014 un rojo de US$ 5,5 millones (al tipo de cambio de cierre de 2014), pero este año se espera revertir la situación. Así se volvieron a repetir las pérdidas que en 2013 habían sido de US$ 3,5 millones.

Según el balance de la empresa, al que accedió El País, el 2014 concluyó con pérdidas mayores al ejercicio anterior "pero con un desempeño operativo mejor", sobre todo en el segundo semestre del año.

En este sentido, se explica que los resultados negativos se "arrastran de la magra performance industrial de 2013, la coyuntura cíclica de márgenes bajos, afectaciones al negocio por medidas regulatorias y las consecuencias del caro financiamiento de las inversiones y del capital de trabajo para el crecimiento del negocio".

Ello llevó a un fuerte endeudamiento de corto plazo y a un costo muy elevado, que además se vio impactado por "una demora inesperada" en el aporte de capital del accionista controlante (Ancap) durante 2013, para acompañar las inversiones de crecimiento de la empresa al amparo de los buenos resultados de los ejercicios anteriores.

"A la demora de esta integración de capital se suma la del proceso de oferta a accionistas minoritarios para acompañar la decisión del accionista controlante, que por razones de procedimientos formales ajenos al control de la sociedad aún no se ha llevado a cabo", dice el balance.

A comienzos del año pasado el directorio de Ancap resolvió capitalizarla en US$ 5 millones como una señal de respaldo, en el entendido que sus resultados negativos son una "situación puntual" y la empresa tiene posibilidades de seguir desarrollándose.

Carboclor registró en 2009 ganancias por US$ 4,7 millones, en 2010 por US$ 792.000, en 2011 por US$ 840.000 y en 2012 por US$ 2,9 millones, pero sus números empeoraron en 2013 y 2014. Durante el último ejercicio otros dos hechos impactaron fuertemente en el negocio. El primero fue entre marzo y abril cuando el principal proveedor de materia prima no tuvo producción por una parada de su refinería.

Luego en diciembre, un conflicto gremial ajeno al giro de la sociedad se extendió a más de 40 empresas del sector químico y paralizó la actividad de la planta por 12 días. "Esta situación se dio en el trimestre de mejor performance industrial de la última década, afectando seriamente la producción y ventas de la empresa", dice el balance.

Para este año se espera que la baja en el precio del petróleo mejore los márgenes del negocio de solventes oxigenados, como consecuencia de la disminución de los costos de materia prima y por tanto de costos variables. "Ello, sumado a la mejora en los rendimientos operativos, hace esperar que en condiciones normales de mercado, 2015 se presente como un año mucho mejor que los dos anteriores", dice el documento.

Ducsa facturó unos US$ 1.600:
La Distribuidora Uruguaya de Combustibles (Ducsa), registró en 2014 una facturación de US$ 1.600 millones. La empresa que es propiedad de Ancap y que opera en el derecho privado tiene un 59,3% de participación de venta de combustibles en las 286 estaciones de servicios distribuidas en los 19 departamentos.

Durante el año pasado se comercializaron 941 millones de litros de combustibles blancos en todos los canales y 86,2 millones de litros de combustibles en bunker de bandera extranjera.

En el caso de sus dos líneas de lubricantes (Ancap y Texaco) la cantidad de litros comercializados fue de 8,7 millones, según la Memoria 2014 de Ducsa. Las utilidades el año pasado fueron por US$ 20 millones, había publicado El Observador.

La ministra de Industria, Carolina Cosse, se refirió ayer al término del Consejo de Ministros a la situación económica de ANCAP y anunció cambios a futuro. “ANCAP requiere medidas de reajuste de su economía”, admitió la jerarca en declaraciones a la prensa. El presidente de la petrolera estatal, José Coya, dijo la semana pasada a El País que se espera que el balance del año pasado tenga un resultado deficitario al menos similar al de 2013. En esa oportunidad el rojo en las cuentas fue de US$ 169 millones.

“Algunas cosas no han cambiado y seguramente nos van a impactar tal vez incluso más fuerte que el año 2013, básicamente en el tema diferencia de cambio porque el endeudamiento de ANCAP en dólares se ha mantenido”, explicó Coya.

En ese sentido, Cosse dijo ayer que el Directorio del ente está trabajando en una estrategia para recomponer su desempeño. “Son las medidas que está planificando el Directorio actual. Hay que acompañar y trabajar con mucho cuidado. Es una empresa muy importante para el país, para el desarrollo industrial. Hay que trabajar esas medidas con cuidado, atención y profesionalidad. Estaremos muy atentos”, aseguró la ministra de Industria.

La gestión de ANCAP ha sido flanco común de críticas de la oposición producto de sus abultadas pérdidas. De hecho, el líder del grupo mayoritario del Partido Nacional, Luis Lacalle Pou, designó el pasado fin de semana como representante de la oposición en el Directorio del ente al economista y contador Diego Labat, quien hasta ahora se desempeña como director de finanzas del banco Santander.

El desempeño de las empresas públicas es uno de los temas que también preocupa a las autoridades del equipo económico. El subsecretario de Economía, Pablo Ferreri, declaró a la prensa que hubo un bajo rendimiento de los entes estatales ya que aportaron casi dos puntos menos del PIB a Rentas Generales. “Tratar de restablecer estos aportes para contribuir a la economía general es algo que debe ser visto como un objetivo”, afirmó el jerarca. Por otro lado, el ministro Danilo Astori le entregó un informe al presidente, Tabaré Vázquez, “descriptivo” y objetivo” sobre la situación de las empresas públicas, consignó El País.

Cosse expresó que ANCAP requiere de mediadas de “reajuste” de su economía en cuya planificación ha comenzado a trabajar su directorio. Agregó que se trata de iniciativas que se deben “acompañar y continuar con cuidado”, porque es una empresa “importante para el desarrollo económico e industrial del Uruguay”.

Las declaraciones de la secretaria de Estado fueron realizadas tras el Consejo de Ministros que se realizó este lunes.

En los últimos días trascendió que el balance de ANCAP podría tener un resultado deficitario similar al del año 2013 el cual se ubicó en 169 millones de dólares.

El déficit del ente autónomo generó un fuerte cuestionamiento de todos los sectores de la oposición. Sin embargo, en su momento el entonces presidente de la República, José Mujica, dijo que las inversiones realizadas en los últimos años por ANCAP son “enormes y su recuperación no es matemática”.

Por tal motivo el jefe de Estado aseguró que “es natural que se produzca una situación de déficit, pero también por las diferencias del tipo de cambio en el dólar”.

Variables tales como el endeudamiento en dólares y la diferencia del tipo de cambio que tendría un impacto mayor, serían determinantes para un resultado deficitario del ejercicio 2014.

Plan de Eficiencia Energética

Por otro lado, Cosse anunció al gabinete ministerial que trabaja con un borrador del Plan de Eficiencia Energética para 2015, cuyas principales iniciativas fueron expuestas en la primera Mesa de Energía organizada el pasado 30 de abril.

El plan incluye medidas sectoriales y generales, estímulos al sector privado, acciones del sector público, planes de etiquetado de edificios y concursos para promover la eficiencia energética, entre otras medidas.

“Tendremos una meta de energía evitada a 2014 de 1.690 kilo-toneladas equivalentes de petróleo, que representa el 45% de energía consumida durante 2012. Esa sería la meta de energía evitada durante el período 2015- 2024”, dijo Cosse.

En otro orden, la secretaria de Estado destacó que la generación eléctrica en 2014 se compuso de 74% de hidráulica, 13% biomasa, 7% térmico fósil, y 6% eólica.