Luego del entusiasmo que provocó en el gobierno la última colocación de Bonar24 en el mercando, en la cual consiguió el triple de los dólares que se había propuesto como objetivo, el Ministerio de Economía lanzó hoy una licitación de Bonos del Tesoro Nacional (BONAC), en la que aspira conseguir 3000 millones de pesos, aunque este monto puede ser ampliable.
Las licitaciones de los títulos públicos serán hasta el próximo 7 de mayo, y se realizará una reapertura de la emisión de BONAC con vencimiento en marzo y septiembre de 2016, y un nuevo bono con vencimiento en marzo de 2016.
Los bonos será adjudicados con un sistema holandés de precio único a través de Siopel y deberá consignarse el precio incluyendo los intereses devengados hasta la fecha de liquidación.
En relación a la tasa de interés, el Ministerio de Economía recordó que "los BONAC con vencimiento en marzo y septiembre de 2016 devengan una tasa de interés variable pagadera trimestralmente en función del nivel de tasa de LEBAC a 90 días" y aclaró que "los nuevos BONAC con vencimiento en mayo de 2016 devengarán una tasa de interés variable pagadera trimestralmente en función del nivel de tasa de LEBAC a 252 días (expresada en base trimestral)".
Esta nueva colocación de deuda pública se produce luego de 15 días de la última emisión de Bonar 24, por las que el Gobierno logró recaudar el triple de lo que buscaba.
En esa oportunidad, el ministro Axel Kicillof anunció desde Rusia, en donde se encontraba acompañando a la presidenta Cristina Kirchner, que se habían conseguido u$s 1415 millones, un monto ampliamente superior al prevista, que era de u$s 500 millones.
Por: Pablo Wende.
A fin de esta semana el Gobierno deberá enfrentar el pago del título de moda, el Bonar 24. El título ya comenzó a cotizar "excupón" y tuvo ayer una suba significativa, reflejo del interés que existe entre los inversores por posicionarse en papeles argentinos. El próximo vencimiento involucra una cifra de u$s 142 millones, según se desprende de la información divulgada por el Palacio de Hacienda. Pero a este monto hay que agregarle el cupón de intereses de la última colocación por otros u$s 60 millones, lo que arroja un total levemente superior a los u$s 200 millones.
Las últimas colocaciones efectuadas tanto por el Gobierno como por YPF generaron una suba genuina de las reservas, que se ubican por encima de los u$s 33.900 millones, por lo que este pago no tendrá impacto considerable en el stock del BCRA. Pero el dato más significativo es que Economía no tendría mayores problemas para hacer frente a este vencimiento, a pesar de las presiones que vienen efectuando los fondos buitre para embargar estos pagos. De hecho, intentaron avanzar con recursos ante el juez Thomas Griesa para frenar la reciente ampliación del Bonar 24. El argumento esgrimido es que se trataba de deuda externa y no interna, aun cuando el título hubiese sido colocado bajo ley local.
El Bonar 24 subió ayer más de un dólar en Nueva York. Había finalizado a u$s 103,5 la semana pasada, pero saltó hasta u$s 104,60 (en la pantalla cotizó a u$s 100,25 pero se deben sumar 4,37 del cupón que se pagará el viernes).
Ayer fue una jornada positiva en general para todos los títulos argentinos, que habían detenido su racha alcista tras las recientes emisiones del Gobierno e YPF. Los inversores adoptaron sólo por unos días la postura de "wait and see" ante la posibilidad de nuevas colocaciones que inundaran al mercado de nuevos bonos, lo que podría impactar negativamente en los precios.
Sin embargo, duró pocos días y ayer volvieron a aparecer tomadores. Los preferidos son los bonos emitidos bajo ley local, como también la deuda corporativa y la provincial, fuera del alcance de Griesa.
En ese sentido, un reporte publicado ayer por Bulltick Capital señaló algunos aspectos relevantes sobre lo que está sucediendo con el mercado de bonos argentinos:
•Aun en el caso de una victoria oficialista con Daniel Scioli vemos un cambio de régimen. Scioli es muy pragmático y también está al tanto de lo que precisa la economía argentina en términos de reinserción internacional.
•El principal riesgo sigue siendo que Griesa decida el bloqueo de bonos argentinos emitidos bajo ley local. En nuestra visión, no alcanza con decir que es deuda externa sólo porque fue emitida con legislación local pero ahora está en manos de inversores extranjeros.
•La cotización del Boden 2015 por encima de u$s 98 claramente está indicando que el mercado no considera que el riesgo de semejante medida de Griesa sea considerable.