Hace más de quince años, la American Smelting and Refining Company (Asarco) llegó a Chile para iniciar cuatro exploraciones en el norte de Chile: Catanave, Sierra Áspera, El Salado y Esperanza.
La idea de la refinadora de cobre era invertir al menos US$ 100 millones de la época en cuatro minas subterráneas, para lo que se habían asociado con el Grupo Luksic.
El tiempo pasó, Asarco tuvo que acogerse a quiebra y fue comprada por el Grupo México, que la dejó en manos de su subsidiaria Southern Copper, con base en el vecino Perú.
Además, concluyó el acuerdo con los Luksic, aunque mantuvieron el dominio de las propiedades en el país.
Hoy su CEO, Óscar González Rocha, confirma que los proyectos que comenzaron con esas cuatro concesiones siguen vigentes y que, incluso, la inversión deberá multiplicarse en varias veces, pues la idea es iniciar el próximo año la construcción de una mina de oro subterránea en Chile.
"Estamos en el estudio de factibilidad, que esperamos sea muy positivo, para iniciar en 2016 una mina de oro subterránea muy cerca de la frontera de Chile con Perú", explica el alto ejecutivo mexicano de Southern Copper.
Aquí la inversión sería alta, pero la rentabilidad también se anticipa como interesante, agrega el ejecutivo, por lo que la idea es comenzar lo antes posible con este proyecto, aunque para eso hay que tener todos los estudios que permitan el inicio de esta inversión.
"Además, tenemos que coordinar nuestro trabajo con Argentina, Ecuador y Perú, y con todas las demás inversiones del grupo", explica González.
"Nuestra estrategia es concentrarnos en América, crecer en América, y estamos enfocados a esto", agrega Daniel Muñiz, director general de Finanzas y Administración de Grupo México, quien explica que el tercer mayor productor de cobre del mundo está exigido de capital, pero que la intención es empezar a movilizar las inversiones hacia los proyectos más rentables, muchos de los cuales llevan ya un largo tiempo sin avances.
Y la iniciativa en Chile, cuyo producto principal es el oro, pero que también podría producir cobre, sería uno de ellos.
Pero, advierte Muñiz, por ahora la decisión de inversión está solo comprometida para Tía María en Perú. Luego, explican los dos ejecutivos, se acercarían a Chile.
Los tres mayores
En este escenario, se vería en nuestro país el hecho inédito de que los tres mayores grupos productores de cobre del mundo estarían operando en el territorio nacional: Codelco, Freeport (que controla a Lumina Copper) y Grupo México, a través de Southern Copper.
Este panorama, en todo caso, no se daría antes de 2017, pensando que la construcción recién podría comenzar a fines del próximo año.
En cuanto a las otras concesiones en Chile, Óscar González dice que "ahora no tenemos más que este proyecto: lo primero es terminar con esto y luego veremos qué viene. Pero primero hay que hacerlo. Déjenos hacerlo y luego vemos qué sigue", concluye.