El nivel actual del costo marginal en el Sistema Interconectado del Norte Grande (SING), que ha bajado y se ubica en torno a los US$ 50 por MWh, limitaría en el mediano plazo el ingreso masivo de proyectos de Energía Renovable No Convencional (ERNC), por la menor competitividad que estos tienen a estos valores.
El director ejecutivo del Centro de Despacho Económico de Carga (CDEC) del SING, Daniel Salazar, explicó que se estima que en ese horizonte de tiempo esta red tendrá la capacidad de gestionar sobre los 1.000 MW de ERNC sin afectar su operación, aunque estas fuentes estarán limitadas por los actuales precios de la energía, entre otras variables.
"Los costos marginales del SING están en torno a los US$ 50 por MWh, y eso establece una realidad y hace poner los pies sobre la tierra a cualquier decisión de inversión. Los precios de corto plazo están en un nivel bajo. Esto naturalmente le dará una gradualidad a la inserción de las renovables, la que es bienvenida", dijo.
Un estudio del CDEC-SING estableció que a 2017 las ERNC multiplicarán por seis su capacidad de producción anual de energía en el norte grande, pasando del 3% actual a un 18%.
Asimismo, Salazar sostuvo que, dependiendo del escenario, esa red tendría la capacidad de gestionar de forma "segura y estable" entre 900 MW y 1.500 MW en centrales ERNC, principalmente solares.
Agregó que la barrera de los precios también obligará a los desarrolladores a apostar por proyectos "modulares" o de construcción por etapas, para incrementar la presencia de las ERNC.
"Si alguien piensa en instalar una mega central renovable, de varios cientos de megawatts, puede enfrentar problemas", aseguró.
Mayor flexibilidad
Salazar señaló que, a diferencia de lo que ocurre en el norte del Sistema Interconectado Central (SIC), el SING no tiene graves problemas de transmisión, sino que el punto crítico para el ingreso de las ERNC será la adecuación del parque térmico existente a mayores niveles de flexibilidad, lo que se lograría con la introducción de mayor capacidad a gas en desmedro del carbón.
"La variable clave no es la transmisión, lo que más desafía es cuán flexible será el parque de generación convencional para responder a la integración de más o menos ERNC", dijo.
En ese sentido, comentó que, tanto la interconexión con Argentina, a través de la línea de transmisión de propiedad de AES Gener, como la unión con el SIC, también permitirá lograr esta flexibilidad, con mayor seguridad.
"Con la interconexión con el SIC, el sistema va a tender a atraer más ERNC. La exportación va a tener sentido, va a ser de norte a sur, preferentemente, y esa orientación va a elevar los costos de operación, y eso podría dar más espacio o generar un nuevo cuadro económico al SING. Si suben los precios se puede hacer más atractiva la inserción de renovables", dijo.
Para este año, apuntó, los desafíos para el SING tienen que ver con lograr de manera efectiva la exportación de energía hacia Argentina. El tendido que une la central Salta con la red nortina puede transportar hoy unos 250 MW.