El mercado para el mineral de hierro no toca fondo. El precio de la materia prima para la fabricación de acero ha caído 60% en el último año y no hay señales de que el descenso vaya a parar. El mineral llegó a US$ 46,7 por tonelada el 2 de abril, lo más bajo en 10 años. En 2011, se transaba a US$ 190 por tonelada.
La industria del hierro se sostenía en dos pilares: uno, que la producción china de acero (y por tanto, las compras chinas de hierro) seguirían creciendo por varios años, y dos, que una nueva oferta, de bajo costo, desplazaría a los productores menos rentables, devolviendo el equilibrio al mercado. Los tres gigantes del sector, las angloaustralianas Rio Tinto y BHP Billiton y la brasileña Vale han usado este último argumento para defender ante sus accionistas su estrategia de seguir aumentando la producción en un contexto de menor demanda china. Entre las tres representan casi 70% del comercio global de mineral de hierro por vía marítima.
Pero la situación ha llegado al punto en que Standard & Poor’s puso el lunes a los productores de hierro en revisión negativa debido a la caída en los precios. S&P podría bajar las notas de Anglo American, BHP Billiton, CAP y Vale, entre otros, aunque afirmó la deuda de BHP Billiton, Rio Tinto y Exxaro Resources. La agencia redujo sus proyecciones de precios del mineral de hierro a US$ 45 por tonelada para el resto de 2015, a US$ 50 para 2016 y US$ 55 para 2017, de US$ 65 para 2015 y 2016 y US$ 70 en 2017.
Según Goldman Sachs, los volúmenes de producción de los tres megaproductores no están en riesgo, “pero el resto de la industria enfrenta un desafío existencial”. Goldman recortó su estimación del precio para 2015 en 18% a US$ 52 por tonelada, y prevé que caerá a US$ 44 en 2016 y a US$ 40 en 2017 y 2018. Según, la firma, hasta la mitad de la producción de hierro fuera de estas tres firmas podría cerrarse, con una demanda global que tocaría techo con unas 1.400 millones de toneladas el próximo año.
El presidente de Cap, Roberto de Andraca, tuvo que calmar las inquietudes de sus inversionistas en la junta de accionistas esta semana. “El precio de US$ 50 la tonelada de hierro o menos, para la gran mayoría de las compañías mineras del mundo significa un riesgo verdadero de quiebra, pero no es el caso nuestro”, aseguró, insistiendo que pese a las menores utilidades, están en mejores condiciones que sus rivales y siguen generando caja.
CAP ha logrado rebajar sus costos de extracción del hierro a cerca de US$ 40 por tonelada, desde los US$ 80 el año anterior, destacó el gerente general Fernando Reitich tras la junta anual de accionistas de la firma. “Estamos tratando de hacer la compañía rentable al menor precio posible. Es un esfuerzo constante (...), pensamos que podemos seguir bajando”, afirmó. La firma estudia el cierre temporal de la mina El Romeral, la de más alto costo.
Las utilidades de CAP cayeron 70% en 2014. “No tenemos las utilidades que nos gustaría, pero esperamos que la situación del mercado no se deteriore mucho más. Estamos preparados para un deterioro ligeramente mayor”, dijo De Andraca, quien espera un alza en el precio en el mediano plazo porque habrá salida de producción del mercado.
Pero Moody’s Investors Service advirtió el jueves que las posibles reducciones en la oferta se ven empequeñecidas por los aumentos previstos en la demanda, que se estima podrían superar los 300 millones de toneladas en los próximos años.
La desaceleración ha afectado la demanda de China, donde la producción de acero se contrajo en el primer trimestre luego de que el consumo cayera el año pasado por primera vez en tres décadas.
Rio Tinto advirtió en su junta de accionistas ayer que sigue habiendo “continuos baches” en su mercado clave y se comprometió a mantener el foco en el control de costos para sortear este período. “La realidad es dura y como organización todo lo que podemos hacer es responder del mejor modo que podamos a un ambiente duro”, declaró el presidente de Rio, Jan du Plessis, en la junta anual de accionistas.
Rio es hoy el productor de menores costos, tras bajarlos de US$ 19,5 por tonelada en 2014 a US$ 17 este año, gracias a un dólar australiano que se ha debilitado respecto del dólar y al menor precio del petróleo. La empresa espera bajar aún más esta cifra. “Con el mineral de hierro ahora en torno a US$ 590 tenemos que hacer más para asegurarnos de mantener el margen respecto de los productores de alto costo”, dijo el CEO de la firma, Sam Walsh, consignó Reuters. “Ser el productor de más bajo costo no es por competir o conseguir el derecho a presumir. Es fundamental para la salud de nuestro negocio”, añadió.
¿Cuánto más pueden bajar los precios? Eso dependerá mucho de lo que haga el gobierno chino, ahora que los datos del PIB del primer trimestre mostraron que la actividad creció un 7%, el paso más lento desde la crisis financiera. Eso podría llevar a Beijing a ordenar la construcción de más obras de infraestructura, aumentando la demanda.
Pero la salida, según analistas, es darwiniana. La oferta y demanda se equilibrarán cuando suficientes productores bajen la cortina.