Por Gastón Fenés.
El dólar oficial viene creciendo en forma lenta y progresiva. Durante mucho tiempo el Gobierno lo mantuvo en $8,00, pero de a poco fue creciendo hasta ubicarse en $8,845. Estos ajustes inciden en la cadena de producción de combustibles y es por eso que las principales refinerías van reacomodando los valores al público. También buscan recuperar la disminución del 5 por ciento aplicada en enero por el Gobierno Nacional.
Esta semana, YPF incrementó sus productos en promedio uno por ciento, centavos que pasaron desapercibidos por los consumidores. El resto de las compañías de bandera ya se está plegando a la medida, para sostener la estrategia comercial.
Al respecto, Daniel Montamat, ex presidente de YPF y Secretario de Energía, analizó los motivos de la adecuación de las petroleras: “El crudo en el mundo sigue por debajo del “barril criollo”, así que la suba no tiene nada que ver con la volatilidad de los precios internacionales, de los cuales estamos divorciados. El reacomodo va a seguir el curso de la devaluación del dólar oficial”.
Si la moneda extranjera se acelera, Montamat explica que las pizarras de las estaciones de servicio van a modificarse en menor tiempo del previsto en este contexto del negocio. “Puede haber otro reajuste adicional a la devaluación cuando se cierren los ajustes salariales, por la evolución de los costos que siguen la inflación”, agregó.
Problemas de rentabilidad
Los entendidos explican que los márgenes de las operaciones de hidrocarburos no convencionales en el yacimiento Vaca Muerta no alcanzan a cubrir los costos de explotación, tampoco los intereses de los títulos de deuda colocados en dólares. “YPF no pasa por su mejor momento, por eso se espera que compense mejorando los ingresos con retoques en las estaciones de servicio”, analizan.