Un primer revés en su estrategia judicial recibió hace algunas semanas Antofagasta Minerals en la disputa legal que mantiene con Glencore en Argentina, luego de que la justicia Federal de San Juan le ordenó a Minera Los Pelambres "que se haga cargo y controle los escombros que generó" el proyecto y que fueron depositados por error en territorio trasandino, según informó un medio local.
El conflicto legal comenzó en 2014, cuando El Pachón -proyecto de la minera suiza en Argentina- demandó a Los Pelambres porque entre 2004 y 2011 utilizó como botadero de estériles -rocas con bajo o nulo contenido de mineral- una zona en territorio trasandino.
En efecto, la minera ligada al grupo Luksic reconoció que utilizó una cartografía que tenía una demarcación diferente a la real, lo que fue aclarado en 2012. Por ese motivo, el 30% de este botadero de Pelambres quedó en territorio Argentino.
Durante marzo recién pasado, el juez civil Miguel Gálvez aceptó una medida cautelar propuesta por la minera suiza de pedir el cierre ambiental del botadero.
Consultados sobre esta situación, desde El Pachón señalaron que "nuestra demanda es clara y concreta.
Minera Los Pelambres debe retirar los escombros y desechos mineros que ilegalmente depositó en terrenos de El Pachón, en Argentina. Esto es lo que solicitamos al Juez Federal de San Juan en mayo de 2014, y mientras este proceso legal está en curso, el mismo Juez Federal ha ordenado que Pelambres adopte, en un plazo de 30 días, las medidas precautorias necesarias para evitar más y mayores daños ambientales".
A su vez, Los Pelambres se ha opuesto a la demanda, alegando que el juzgado no tiene competencia para resolver estas materias, dado que este problema tiene que ser resuelto por autoridades de ambos países. Dicho trámite aún está pendiente, aunque es posible que se resuelva en las próximas semanas, ya que el juez tiene todos los elementos para resolver.
Solución de fondo
Aunque la resolución de primera instancia puede atribuirse como un triunfo de la postura de Glencore, cercanos a la minera nacional lo consideran como un punto que confirma su postura.
Esto, porque AMSA siempre ha planteado que la resolución de este conflicto pasa por hacer un cierre ambiental del botadero de estériles, pero que esta tiene que ser una medida definitiva que termine con el conflicto y no transitoria mientras se resuelve.
De hecho, plantean que las pruebas que se han realizado descartan cualquier tipo de efecto medioambiental, especialmente en la contaminación de aguas. Según ha trascendido, Pelambres ha tomado muestras de recursos hídricos aledaños y no ha detectado variaciones en el PH. También se descartó que estos residuos puedan generar aguas ácidas.
Según trascendió, la defensa presentó un escrito al juez haciendo ver la postura a favor de un cierre, pero argumentando que esto no puede ser provisional, por las características que tienen estas obras.
Además, técnicamente la medida no funcionaría como se pretende, porque para concretarla no se puede cerrar sólo la parte argentina del botadero sino que hay que incluir la chilena, lo que además requeriría una serie de autorizaciones fronterizas y de permisos ambientales en ambos países.
Otras fuentes conocedoras del caso, comentan que aunque Pelambres quiera proponer un plan de cierre, lo que correspondería es que retire los escombros que están en terreno de Glencore, que de hecho es lo que solicitó la firma en su demanda.
¿Tema binacional?
Aunque ambos países han optado por mantener este tema como un problema entre privados, cercanos al caso explican que cualquier medida requerirá que las instancias binacionales actúen y que los Estados participen activamente.
Esto, porque por ejemplo, si se decidiera hacer un cierre al botadero, se requerirían autorizaciones para traspasar la frontera, así como validar planes y permisos para ejecutar las obras.
De todos modos, es un tema que las autoridades de ambos países han estado monitoreando activamente desde que se originó.
El Fiscal Federal Dr. Francisco Maldonado solicitó se investigue la denuncia planteada por minera Glencore contra Antofagasta Minerals, por usurpación de terrenos, de agua y presuntos delitos ambientales
Un nuevo escenario de enfrentamientos se abre entre las empresas mineras Glencore, proyecto Pachón, en Argentina, y Antofagasta Minerals, propietaria de la mina chilena Pelambres, al confirmarse el requerimiento de instrucción en instancia penal, realizado por el fiscal federal, para que la justicia investigue los presuntos delitos de usurpación de terrenos, usurpación de aguas y posible contaminación.
Hasta ahora la Justicia Federal en el ámbito civil, a cargo del Dr. Miguel Ángel Gálvez, había ordenado a la empresa AMSA- Pelambres hacerse cargo, y controlar los escombros generados por la explotación del emprendimiento minero en Chile, y que fueron depositados en territorio sanjuanino, más precisamente donde se desarrolla el proyecto Pachón, en Calingasta.
Ahora el Dr. Leopoldo Rago Gallo, es quien deberá resolver, en un plazo de 48 a 72 horas, aunque podría tomarse unos días más, para que se investigue, según expresa el Dr. Francisco Maldonado, fiscal federal de la causa “ la presunta comisión de delitos ambientales, contaminación por residuos peligrosos, afectación del medio ambiente y salud, y por usurpación de inmueble y aguas, por el desvío de un curso de río hacia el lado chileno”.
Confirmó el Dr. Maldonado, que conjuntamente con el requerimiento de instrucción “se han pedido todas las medidas posibles a fin de activar la instancia de investigación penal en la posible comisión de un delito: desde análisis de suelos, estudios técnicos de agua, testimoniales, y se irá avanzando, según la resolución que adopte el juez”.
La escombrera en cuestión, ubicada en territorio argentino, tiene 1.6 kilómetros de largo, por 600 metros de ancho, por 70 metros de alto y fue abandonada en el año 2011, según dijeron allegados a la causa, indicando que se había erigido en territorio argentino, hecho que fuera advertido por lugareños y conocedores de la zona.
Consigna el Dr. Francisco Maldonado que “deberá investigarse si éste botadero habría provocado que se hayan tapado lagunas, secado otras por el desvío e curso de aguas que debieran drenar hacia San Juan y lo están haciendo hacia Chile, con una evidente ruptura del equilibrio biológico”.
Fuentes judiciales precisaron que se han aportado a la causa fotografías las cuales mostrarían que en el lugar se habrían enterrado grandes cubiertas de camiones, la presencia de hidrocarburos, y otras sustancias tóxicas, todo lo cual debe ser investigado ahora por la justicia.
Cabe recordar, que autoridades de la empresa Glencore, habían manifestado preocupación por los residuos allí depositados, donde el material de roca es susceptible en determinadas condiciones de generar ácido de roca, por lo que AMSA debió continuar con el cuidado y control de la escombrera todo lo cual no habría ocurrido
A decir de la causa, tampoco cabe lo señalado por minera Pelambres respecto de un cambio en la cartografía del Instituto Geográfico Militar chileno, que lleva a confusiones sobre los límites de Argentina y Chile toda vez que el límite fue fijado por ambos países mediante el Tratado de 1881, y que no ha estado en disputa ni ha sido modificado desde entonces.
Mientras tanto, en la jornada de ayer transcendió, que se reunieron el Gobernador Gioja, algunos integrantes de su gabinete y el Fiscal de Estado provincial Dr. Guillermo de Sanctis para analizar de cerca la situación planteada entre ambas empresas mineras.
Ahora el titular del Juzgado Federal N° 2 a cargo del Dr. Leopoldo Rago Gallo deberá resolver si instruye la causa penal.