En poco tiempo el Centro de Despacho Económico de Carga del Sistema Interconectado del Norte Grande (CDEC-SING) tendrá un régimen de operación muy distinto al de hoy.
Uno de los factores que incide en este cambio es el fuerte incremento de las Energías Renovables No Convencionales (ERNC), puesto que el norte del país es un escenario que ofrece condiciones prácticamente únicas para este tipo de fuentes, sobre todo cuando se trata de radiación solar.
Un estudio realizado por el mencionado organismo concluyó que ese sistema está en condiciones de gestionar una capacidad superior a los 1.000 MW de ERNC a 2017, considerando diversos mix de generación, principalmente los de energía solar y eólica.
Esto sería posible solo si se desarrolla la expansión del sistema en el mediano plazo, tal como lo establece el Plan de Expansión del Sistema Troncal de la Comisión Nacional de Energía (CNE).
No obstante, el estudio advierte que "la incorporación de montos importantes de ERNC disminuye el costo global de operación del SING resultante del predespacho, y debido a la incorporación de un bloque de energía de bajo costo, este beneficio se vería disminuido producto de los efectos que impone la inyección ERNC en el régimen de mantenimientos de las unidades más flexibles".
Estas últimas centrales corresponden a unidades como las termoeléctricas, muy presentes en el norte.
Otros factores que inciden en el cambio de la operación del CDEC-SING son el fuerte ingreso de nueva capacidad termoeléctrica y también la interconexión que se dará con el sistema argentino.
Desafíos de entrada
El aumento de ERNC en Chile ha generado todo tipo de reacciones. Una posición que ha cobrado fuerza es la que advierte sobre los tremendos desafíos que tendrán los órganos que coordinan los despachos de energía, tanto en el SING como en el SIC. De hecho, un grupo conformado por la CNE, el CDEC-SING y SIC, y distintos gremios, viajarán a fin de mes a Europa a estudiar la mejor manera de incorporar estas fuentes.
De la capacidad total en construcción, y que se proyecta que entre en operación entre 2015 y 2018, el 40% -1.823 MW- corresponde a proyectos de ERNC. La ventaja de estas fuentes es que generan energía con recursos propios, pero el problema es que no puede inyectar de forma continua a la red. Ese es el principal problema que tienen los CDEC para incorporar este tipo de fuentes.
4.558 MW figuran actualmente en el plan de obras de la CNE , y se espera que entren en operación entre este año y 2018. De ese total, el 40% corresponde a fuentes renovables, en las que predomina la energía solar.
Cinco años se podría adelantar la meta de lograr que a 2015 el 20% de la matriz corresponda a Energías Renovables No Convencionales.