El precio del petróleo de EE.UU. cerró ayer con una fuerte suba del 6,11%, a u$s 52,14, en el segundo empujón más importante en lo que va de 2015, alentado por un cambio en las expectativas sobre el crudo iraní. Mientras hasta la semana pasada, los inversores especularon que el acuerdo entre EE.UU. y otras cinco naciones con Irán implicaría que este país volcara al mercado 1 millón de barriles adicionales, ahora parece primar el criterio de que por demora en las inversiones, las exportaciones iraníes sólo volverán a su nivel histórico en 2016.
La cotización del West Texas Intermediate (WTI) en Nueva York se incrementó en u$s 3 con respecto al cierre del jueves, la última jornada hábil de la semana pasada. El aumento fue el segundo mayor en una jornada en lo que va de año, después del incremento del 8,33% que tuvo el 30 de enero. Asimismo, el precio de ayer se sitúa cerca de u$s 53,53 del 17 de febrero, el máximo anual registrado hasta ahora.
En Londres, aun cuando los intercambios se redujeron por ser lunes de Pascuas, el valor del Brent subió un 5,7% o u$s 3,17, y cerró a u$s 58,12. No obstante, este repunte se produjo después de una caída de casi un 4% el jueves, cuando se conoció el acuerdo marco con Irán, y de todos modos, a pesar del avance de ayer, los precios siguen ubicándose a menos de la mitad de su valor en junio.
Analistas atribuyeron el aumento a la suba de los precios que Arabia Saudita cobra a sus clientes asiáticos por el petróleo, en un mercado que observa con atención el comportamiento de Riad. Arabia Saudita es el principal actor de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) e impulsor de la política de no tocar las cuotas de producción de la entidad.
En el mercado también influyó ayer la expectativa de que se estaría desacelerando el aumento en los inventarios de crudo en Estados Unidos que persiste desde hace meses. Sin embargo, como ya ocurrió en otras ocasiones, esa impresión podría derrumbarse el miércoles, cuando se conozcan los datos oficiales.
En cuanto al petróleo de Irán, este país y el llamado grupo 5+1 (Francia, Reino Unido, Estados Unidos, China, Rusia y Alemania) todavía deben resolver difíciles detalles técnicos antes del 30 de junio para lograr el acuerdo definitivo, y luego las instalaciones iraníes tendrán que ser visitadas por observadores internacionales. Por estas circunstancias y la falta de inversión, los analistas creen que el petróleo de Irán tardará al menos un año en volver a entrar al mercado mundial, y se espera que en ese plazo, la abundancia actual se haya reducido por una reducción de la producción en los yacimientos más costosos.
El lunes el petróleo avanzaba casi 6%. Los factores que más influyeron el rápido descenso de los precios, -como un desbalance entre oferta y demanda por una expansión de la oferta- empiezan a desvanecerse. En parte, esa sobreoferta inicialmente generó bajo interés de almacenamiento en algunas economías emergentes claves en la demanda de petróleo.
Sin embargo, una porción importante del aumento en la oferta mundial de petróleo provino de fuentes no convencionales, las cuales tienen una alta rapidez de extracción y de agotamiento. Es así como después de alcanzar su mayor nivel de producción este tipo de oferta disminuye hasta un 21% en los siguientes 18-24 meses.
Para mantenerse, el número de campos en producción deben prontamente ampliarse, pero la caída en los precios observada desde mediados de 2014 lo que ha hecho es disminuir el número de nuevos pozos no convencionales entrando a producción. Es más, el número de pozos activos disminuyó un 50% desde octubre del año pasado en Estados Unidos.
Por otro lado, comenzando el año, la demanda de gasolina aumentó cerca de 7,5% en Estados Unidos. A ese ritmo, la Agencia de Energía de los Estados Unidos estima que para el verano de 2015 el consumo habrá aumentado en cerca de 1 millón de barriles por día, lo que conjuntamente con un mayor aumento de la demanda con la recuperación de la economía europea, llegaría a implicar de nuevo una situación de desbalance, pero esta vez ocasionada por un aumento mayor de la demanda.
Finalmente, la semana pasada, el Wall Street Journal reseñó uno de los mayores avances diarios en los precios del petróleo durante 2015, explicado porque en efecto quienes negocian futuros sobre el precio del petróleo empiezan a estimar que la producción en Estados Unidos está llegando a su máximo nivel y porque se conoció que la tasa de producción se redujo por primera vez en el año.
Por su lado, la cadena CNBC resaltó las reflexiones de Goldman Sachs, uno de los bancos de inversión más reputados en el análisis de materias primas. Para la firma el precio del petróleo Brent podría llegar a unos US$70 el barril comenzando el segundo semestre del año, lo que supondría un aumento de casi 27% frente al cierre del primer trimestre.
Efecto en la tasa de cambio de Colombia
Uno de los probables efectos que traería consigo una estabilización y recuperación del precio del petróleo sería una estabilización y parcial recuperación de la tasa de cambio. Es decir, aunque no es un efecto simultáneo ni necesariamente proporcional, el comportamiento del petróleo sí ha sido una variable líder y un determinante en el desempeño de la tasa de cambio desde mediados del año pasado.
En ese sentido, en las últimas semanas el detenimiento en la caída del precio del petróleo también ha sido un factor importante en la leve recuperación de la cotización del peso colombiano frente al dólar.
El precio de la cesta de referencia de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) cerró el miércoles pasado en 52,48 dólares, lo que representó un aumento de 1,42 dólares con respecto al cierre previo de 51,06 dólares, de acuerdo con cifras de la Secretaría del grupo, divulgadas en su portal web.
El bloque petrolero, de que Venezuela es miembro fundador, está integrado por 12 países que extraen cerca de 30 % del petróleo del mundo y han acordado un techo de producción de 30 millones de barriles diarios.
La cesta OPEP incluye 12 tipos de crudo: el argelino Saharan Blend, el iraní Iran Heavy, el iraquí Basrah Light, el Kuwait Export, el libio Es Sider, el nigeriano Bonny Light, el Catar Marine, el saudita Arab Light, el venezolano Merey, el angoleño Girassol, el ecuatoriano Oriente y el Murban, de Emiratos Árabes Unidos.