Las obras complementarias de la represa Chihuido I demandarán una inversión de 2.500 millones de pesos. Así lo informó el presidente de Emhidro, Elías Sapag, quien precisó que los reasentamientos implicarán la construcción de 104 viviendas rurales y urbanas, tres museos y centros de interpretación, tres templos religiosos, un centro cívico, oficinas de organismos públicos, el cementerio de Quili Malal y otros servicios públicos.
Para el caso de Bajada del Agrio, el plan de obras incluye remodelar las escuelas primaria y secundaria, se hará un hospital, una comisaría y otro cementerio.
Además, se hará una preservación del patrimonio cultural, se emplazarán electroductos y una línea de 33 kilovoltios de Las Lajas a la obra para la etapa de la construcción, que después servirá para los parajes de Quili Malal, Agrio del Medio y Bajada del Agrio.
La presa
La obra de la represa demandará una inversión estimada de 18.039.210.643 pesos, de los cuales el Banco de Desarrollo y Comercio Exterior de la Federación Rusa aportará el 85%, a través de un préstamo de 1.938 millones de dólares a una tasa fija semestral del 6,5%. El 15% restante lo aportará el Estado nacional, con una suma cercana a los 2.715 millones de pesos.
El plazo de ejecución hasta la habilitación comercial total de la central es de 54 meses desde el inicio y el periodo de explotación es de 15 años desde la habilitación. Una vez finalizado el periodo del contrato, las instalaciones pasarán en su totalidad a manos de la Provincia.
El aprovechamiento permitirá tener mayor seguridad -al regular el caudal del río Neuquén y controlar las crecidas extraordinarias y evitar inundaciones aguas abajo-, mejor abastecimiento y más energía. La central hidroeléctrica estará equipada con cuatro turbinas Francis que totalizan una potencia instalada de 637 megawatts y prevé generar una energía media anual de 1.750 gigawatts por hora.
En cuanto a los aspectos técnicos, la presa consta de materiales sueltos con pantalla de hormigón con un volumen de terraplén de alrededor de 6.200.000 metros cúbicos, una altura de 105 metros desde el fondo del cauce, una longitud de 1.100 metros y cota de coronamiento a 630 metros sobre el nivel del mar.
La Provincia, a instancias de la Legislatura, ya avanzó en la sanción de la norma que posibilita la expropiación de las tierras para el emplazamiento de la obra. Esto es un requisito obligatorio para que el banco desembolse el crédito. También habrá exenciones impositivas, en una cifra que, según Elías Sapag, es “ínfima” si se la compara con otros ingresos que obtendrá la provincia de Neuquén durante 20 años.
El gobernador Jorge Sapag presentó oficialmente en Zapala dos videos documentales donde funcionarios públicos explican la incidencia energética y el impacto social, político, cultural y económico que tendrá la futura construcción de la represa hidroeléctrica Chihuido I en la zona Centro de la provincia.
Uno de los videos presentados fue un documental con explicaciones del titular de Emprendimientos Hidroeléctricos Sociedad del Estado Provincial del Neuquén – Emhidro, Elías Sapag. En el otro se reproduce una entrevista con el subsecretario de Planificación y Acción para el Desarrollo – Copade, Sebastián González
Un total de 104 viviendas rurales y urbanas, tres museos y centros de interpretación, tres templos religiosos, un centro cívico, oficinas de organismos públicos y el cementerio de Quili Malal deberán ser reubicados en Neuquén para que pueda ser construido el embalse Chihuido I.
Todas las labores complementarias tendrán un costo de 2.500 millones de pesos, según lo informó el presidente de Emhidro, Elías Sapag, quien precisó que los reasentamientos implicarán la construcción de y otros servicios públicos, tal como lo difundió el diario “La Mañana”.
Según el funcionario neuquino, se hará una preservación del patrimonio cultural, se emplazarán electroductos y una línea de 33 kilovoltios de Las Lajas a la obra para la etapa de la construcción, que después servirá para los parajes de Quili Malal, Agrio del Medio y Bajada del Agrio.
La obra de la represa demandará una inversión estimada de 18.039.210.643 pesos, de los cuales el Banco de Desarrollo y Comercio Exterior de la Federación Rusa aportará el 85%, a través de un préstamo de 1.938 millones de dólares a una tasa fija semestral del 6,5%. El 15% restante lo aportará el Estado nacional, con una suma cercana a los 2.715 millones de pesos.
El plazo de ejecución hasta la habilitación comercial total de la central es de 54 meses desde el inicio y el periodo de explotación es de 15 años desde la habilitación.
La Comisión de Asuntos Municipales de la Legislatura dio despacho esta semana al proyecto que aprueba los convenios necesarios para que arranque la obra de Chihuido. El texto también autoriza al Ejecutivo a expropiar unas 22.000 hectáreas y disponer del dinero para pagarlas. La idea, según se comentó, es que la propuesta se trate la semana que viene en las comisiones A y B y se vote en la próxima sesión ordinaria. El apuro tiene un argumento: el Banco de Desarrollo ruso, que pondrá unos 1.900 millones de dólares para esta obra, exige que esos papeles estén firmados para mediados de año. La intención es que en julio se haga el primer desembolso y pueda empezarse con la construcción de campamentos y movimiento de suelo.