Como se esperaba, la Cámara Federal desestimó la denuncia del fiscal Alberto Nisman contra la presidenta Cristina Kirchner por supuesto encubrimiento en la causa por el atentadocontra la AMIA. Los jueces de la Sala I, Eduardo Freiler, Jorge Ballestero y Eduardo Farah, un tribunal que dictó varios fallos favorables para el gobierno nacional, decidieron rechazar la denuncia por "inexistencia de delito".
El jueves pasado las partes argumentaron ante la Cámara Federal en favor y en contra de la sobrevida de la denuncia de Nisman. La audiencia de hoy, en la cual estaba prevista la votación, comenzó pasadas las 13, según confirmaron a LA NACION fuentes judiciales. Y culminó alrededor de las 15. Freiler y Ballestero votaron para ratificar la decisión del juez Daniel Rafecas, que había desestimado la presentación judicial de Nisman, mientras que Farah se manifestó en contra.
En este escenario, el fiscal de Cámara podría apelar el fallo. En ese caso, serían los jueces de Casación, en una sala por definir por sorteo, los que analizarían nuevamente el caso.
La semana pasada había trascendido que los jueces Ballestero y Freiler, que suelen votar en sintonía en temas en que es sencillo ponerse de acuerdo, iban a rechazar la denuncia. Y Farah habría previsto abrir la causa e investigarla.
Nisman denunció a la Presidenta, al canciller Héctor Timerman, al diputado de La Cámpora Andrés Larroque, al piquetero Luis D'Elía y al líder de Quebracho, Fernando Esteche, entre otros implicados, porque supuestamente habían tramado un complot para desincriminar a ex funcionarios iraníes de los cargos que pesan en su contra por idear y ejecutar el atentado contra la AMIA en 1994.
El de hoy es el segundo revés judicial que recibe la acusación contra la Presidenta por encubrimiento, tras el fallo del juez federal Daniel Rafecas, quien argumentó que en la denuncia no había elementos para sostener la comisión de un delito, luego de analizar la denuncia, el requerimiento de Pollicita y de los documentos que aportó el Gobierno al caso posteriormente, como un escrito de la procuradora del Tesoro, Angelina Abbona, y otros escritos de Nisman.
El fiscal federal Gerardo Pollicita impulsó el caso y pidió realizar medio centenar de medidas de prueba para avanzar y establecer si la denuncia era verosímil. Pero el juez Rafecas, tras estudiar el expediente una semana, entendió que no había evidencias para sostener la denuncia. Y dos días antes de que la presidenta Cristina Kirchner inaugurara ante la Asamblea Legislativa el período ordinario de sesiones en el Congreso, desestimó la denuncia.
Pollicita apeló el desistimiento para que la Cámara Federal revisara el fallo de Rafecas. Quién defendió la denuncia de Nisman ante ese tribunal es Germán Moldes, el fiscal ante la Cámara Federal. El Gobierno, a través de la defensa del diputado Larroque, intentó apartarlo del caso, pero la Sala I de la Cámara entendió que no había motivos..
La sala I de la Cámara Federal penal porteña decidió desestimar la denuncia que realizó el fiscal Alberto Nisman contra la Presidenta y funcionarios y dirigentes kirchneristas por presunto encubrimiento de los iraníes acusados por el atentado contra la AMIA.
Esa denuncia había sido presentada por el fiscal especial cuatro días antes de aparecer muerto en el baño de su casa, causa que aún se instruye y que no logra arrojar elementos sobre cómo murió.
La definición fue por 2 votos a 1; el juez Eduardo Farah votó en contra del rechazo a la denuncia.
La denuncia de Nisman había sido desestimada por el juez Daniel Rafecas y luego, fue apelada por el fiscal Gerardo Pollicita quien sostuvo la imputación de Cristina Kirchner, Héctor Timerman, luis D'Elía, Andrés Larroque, Allan Bogado y Yussuf Khalil.
La misma fue sostenida por el fiscal general Germán Moldes quien ahora, luego del falló de la Sala I, podría apelar al tribunal de Casación.
El tribunal está integrado por los jueces Jorge Ballestero, Eduardo Farah y Eduardo Freiler.
Nisman había denunciado que el Memorándum de Entendimiento firmado en 2013 con Irán en torno al atentado contra la AMIA de 1994 había constituido un "encubrimiento" de las cinco personas de esa nacionalidad acusadas por él mismo de haber planificado y ordenado el ataque contra la mutual judía.