Los precios del oro se dispararon hasta registrar máximos de casi cuatro semanas este jueves después de que Arabia Saudí lanzara ataques aéreos sobre Yemen, mientras que el dólar continuaba su descenso.
En lo relativo a la división Comex del New York Mercantile Exchange, el oro para entrega en abril se negoció a 1.219,00 USD por onza troy, máximos de la sesión y su cota más alta desde el 2 de marzo, para situarse luego en 1.211,10 USD durante la mañana de la jornada de negociación en Europa, avanzando un 1,17% o 14,10 USD.
Era posible que los futuros sobre oro encontraran un soporte en 1.178,60 USD por onza troy, su mínimo del 23 de marzo, y una resistencia en 1.223,00 USD, su máximo del 2 de marzo. El oro se negoció durante la jornada anterior en 1.197,00 USD por onza troy, con un avance del 0,47% o 5,60 USD, su sexta subida intradía consecutiva.
Mientras, la plata para entrega en mayo se disparó un 1,66% o 28,3 centavos hasta 17,28 USD por onza troy, su cota más alta desde el 16 de febrero.
La demanda de activos considerados refugio seguro se vio impulsada después de que Arabia Saudí y una coalición de aliados de la región del Golfo lanzaran ataques aéreos sobre Yemen para contraatacar a los rebeldes hutíes que, apoyados por Irán, están sitiando el sur de la ciudad de Aden.
Los precios globales del petróleo subieron más de tres dólares tras estas noticias. Se teme que un avance de las hostilidades podría desencadenar un conflicto en la región y disparar los precios del petróleo.
Los países de Oriente Próximo fueron responsables de casi el 35% de la producción de petróleo del año pasado.
Por otra parte, el índice dólar, que sigue la evolución de esta moneda con respecto a una cesta de otras seis divisas principales, retrocedió un 0,6% hasta 96,51 este jueves. El índice ha descendido más de un 4% desde que registrara máximos de 12 años el pasado 13 de marzo en 100,78.
El billete verde se vio sometido a una gran presión pues la decepción de la reciente tanda de datos económicos de Estados Unidos contribuía a la incertidumbre suscitada en torno a cuándo comenzarán a subir los tipos de interés.
Según datos publicados el miércoles, los pedidos de bienes duraderos disminuyeron el mes pasado un 1,4%, frente a las expectativas que apuntaban a una subida del 0,4%. Los pedidos de bienes duraderos clave, indicador fundamental de la inversión del sector privado, retrocedieron un 1,4%, su sexta caída mensual consecutiva.
A lo largo de la jornada, Estados Unidos publicará sus datos semanales sobre solicitudes iniciales de subsidio por desempleo pues los inversores aguardaban a conocer más indicios sobre el estado de la economía.
El oro registró mínimos de cuatro meses en 1.141,60 USD el pasado 17 de marzo ante las preocupaciones suscitadas en torno a que la Fed comenzará a subir los tipos de interés en junio, para después dispararse más de un 5% después de que la Reserva Federal pronosticara una ralentización del ritmo de subida de los tipos de interés.
Una demora de la subida de los tipos indica la tendencia optimista del oro, pues disminuye el costo relativo del metal, que no ofrece a los inversores ninguna garantía de reembolso similar.
Por otra parte, en el Comex, el cobre para entrega en mayo se disparó un 2,64% o 7,4 centavos, situándose en 2,866 USD por libra.
El debilitamiento del dólar se traduce en un aumento de la demanda de materias primas como inversión alternativa y abarata aquéllas denominadas en dólares de cara a titulares de otras divisas.