La australiana Pacific Hydro informó el miércoles que presentó la solicitud de un permiso ambiental para construir una hidroeléctrica de pasada de 280 millones de dólares en la zona central de Chile.
Pacific Hydro planea desarrollar la central Nido de Águilas de 125 megavatios en el Valle de Alto Cachapoal, donde ya posee la planta Chacayes.
"Se estima que la tramitación ambiental del proyecto tomará entre 12 y 18 meses. Luego de ello se llamará a licitación para la construcción, se iniciará el proceso de financiamiento y se adjudicarán las obras", detalló la empresa en un comunicado.
Una vez aprobado el permiso, se prevé que la construcción se lleve 46 meses utilizando el campamento ya existente que fue empleado para la construcción de su anterior proyecto.
Tras el fuerte rechazo que han tenido algunos proyectos tradicionales, Chile busca impulsar el desarrollo de Energías Renovables No Convencionales (ERNC) para atender la galopante demanda en el país para los próximos años, principalmente de industrias como la minería.
Pacific Hydro ingresó el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de la central hidroeléctrica de pasada Nido de Águilas, ubicada en la Región de O´Higgins. El proyecto tendrá una capacidad instalada de 125MW, generará 462 GWh/año y contempla un costo de construcción de US$280 millones.
La central Nido de Águilas fue sociabilizada de manera temprana con las comunidades del Valle del Alto Cachapoal, lo que permitió implementar mejoras y ajustar las medidas de mitigación contempladas en el EIA.
"Nuestra presencia en el valle desde hace más de diez años así como la experiencia de haber desarrollado y construido la central hidroeléctrica Chacayes fue clave en este sentido, lo que nos permitió fortalecer este proyecto que hoy presentamos luego de ser optimizado, tanto desde el punto de vista económico como social y ambiental", destacó el gerente comercial y de desarrollo de Pacific Hydro Chile, Alfredo Zañartu.
Se estima que la tramitación ambiental del proyecto tomará entre doce y 18 meses. Luego de ello se llamará a licitación para la construcción, se iniciará el proceso de financiamiento y se adjudicarán las obras.
La nueva central captará y restituirá las aguas en el río Cortaderal, y tendrá una empleabilidad promedio de 500 personas con un máximo de 1.000 en el periodo peak.
Se prevé que su construcción se extienda por aproximadamente 46 meses, período en el cual se utilizará el campamento ya existente y aprobado ambientalmente, utilizado durante la construcción de Chacayes, optimizando así el uso de infraestructura existente.
Además, la central tendrá una casa de máquinas subterránea y contempla una línea de transmisión de 18 km que se conectará a la de la central hidroeléctrica de pasada Chacayes, "aprovechando así las obras ya existentes y potenciando el desarrollo de la cuenca con una mirada sustentable y de largo plazo", comenta Zañartu.