Por: Pablo Wende.
Nada parece detener a las acciones argentinas en medio de la euforia de los inversores. Ayer fue otro día de gloria para los papeles locales. Los ADR de las compañías que cotizan en Nueva York subieron un 7%, especialmente las acciones bancarias y las energéticas. Pero hasta YPF se plegó a la tendencia alcista, pese a la nueva caída del petróleo que se acerca a los u$s 40.
Lejos de los temores generados por los fallos contra la Argentina que se van sucediendo del juez Thomas Griesa, y que agrandan el default, los inversores se entusiasman ante la posibilidad de un cambio a partir del recambio de Gobierno. Las mejores chances de Mauricio Macri tras el apoyo por parte de la UCR actuó como un trampolín para la mayoría de las acciones, que ya venían más que sostenidas.
No hubo mayores novedades respecto de las elegidas por parte del mercado. Los bancos volvieron a operar muy firmes desde la apertura. Finalmente terminaron todos con subas parecidas. El Galicia ganó el 6,3% y en lo que va del año, cuando aún no pasaron tres meses, acuula una suba del 54,6%, obviamente todo esto en dólares. Al Francés le sucede algo similar: subió todavía más, el 7,75%, y en lo que va de 2015 ya gana un 55,3% en Wall Street. A estos niveles, la capitalización bursátil ya asciende a u$s 3.830 millones, niveles récord para el papel. Edenor es la que encabeza las ganancias. Paradójicamente se trata de una empresa con balances en rojo y un patrimonio neto que no es negativo sólo por los salvavidas oficiales. Sin embargo, los inversores apuestan a que las tarifas se irán readecuando, lo que mejoraría los estados contables de la empresa. Ayer trepó más del 7% y en lo que va del año acumula nada menos que el 70% de ganancia.
La lectura no es complicada. El mercado apuesta a que un recambio de Gobierno permitirá avanzar con una salida del cepo, recomposición tarifaria y regresarán los capitales. Esto, a su vez, le permitirá al país retomar la senda de crecimiento luego de varios años de estancamiento. Está por verse, claro, si esta lectura casi lineal de parte de muchos inversores finalmente se cumplirá o no. Pero mientras tanto las expectativas mandan. No es casual que la semana pasada hayan desembarcado en Buenos Aires 50 fondos internacionales para analizar alternativas de inversión, especialmente en el mercado de capitales, pero también en la economía real.
Por MARÍA ELENA CANDIA.
La alianza que selló el domingo la Unión Cívica Radical (UCR) con Pro, de Mauricio Macri, y la Coalición Cívica (CC), de Elisa Carrió impulsó con fuerza las ganancias de la Bolsa a un máximo de cuatro meses, liderada por acciones energéticas y bancarias que ayer registraron subas superiores al 8%.
Es que, según los especialistas consultados, la lectura del mercado es que la nueva coalición mejora las probabilidades de que un candidato más favorable al mercado gane las elecciones de Octubre, lo que aumentó el entusiasmo entre los inversores.
Con un volumen muy grande de negocios unos $ 385 millones el índice Merval escaló ayer 4,9% hasta los 10.746 puntos tras reflejar su mejor jornada en cuatro meses. Las subas estuvieron lideradas por el Banco Macro (8,8%), Transener (8,3%), Banco Francés (7,7%), Grupo Financiero Galicia (7,6%) y Edenor (6,1%).
Animadas por una jornada en la que Wall Street cerró con ganancias, las acciones argentinas que cotizan en Nueva York también registraron incrementos importantes. Los ADRs del Banco Frances treparon 7,7% al igual que los papeles del Banco Macro. Además, las acciones de Edenor subieron 7,1%, seguidas por Telecom (6,9%), Grupo Financiero Galicia (6,3%) y Pampa Energía (4,3%).
"El mercado subió por expectativas. La lectura es que con el acuerdo la oposición tiene chances de ganar y en el mercado las preferencias se inclinan por el Pro", dijo Ruben Pasquali, operador de Mayoral Bursátil.
Sin embargo, Pasquali no descarta que en algún momento pueda haber una corrección en los precios. "Creo que las expectativas influyen de una manera importante, pero el tamaño del mercado hace que cualquier movimiento se exagere. Falta mucho para octubre y pueden pasar muchas cosas en el medio con un escenario internacional complejo de aumento de tasas de inerés. No veo una suba generalizada a este ritmo", agregó Pasquali.
Las apuestas de los inversores se canalizan hace semanas a través de las acciones energéticas y de los bancos. En el caso de las primeras, mayores aportes del Estado permitieron que las compañías de electricidad evitaran caer en una situación de patrimonio neto negativo, mientras que las tarifas se mantienen congeladas, aunque las expectativas de los inversores es que esta situación se revierta con el próximo gobierno.
"Las energéticas comenzaron a subir en el exterior hace varios días con los ADRs de Pampa Energía y Edenor, extendiendose acá a otros sectores que lo acompañaron. Más allá de las expectativas del mercado, también se sumaron ciertas noticias, como el balance de las generadoras", explicó Juan Manuel Palacios, analista de Bull Market Brokers.
En el caso de las acciones bancarias, su atractivo reside en que las entidades tienen liquidez y si bien es probable que este año no obtengan utilidades similares a 2014, el mercado apuesta por buenos resultados.
Las noticias políticas también impulsaron a los títulos públicos, que parecen haber dejado atrás el fallo de Griesa que extendió el default a los bonos del canje con legislación local. En la rueda de ayer se destacaron los cupones atados al PBI en euros, que subieron 5,26%, seguidos de sus pares nominados en dólares bajo ley Nueva York, que avanzaron 4,46% y el Par en pesos, con una suba de 4,32%. En tanto, el Discount ley argentina ganó 2,44%, seguido por el Bonar X (1%), el Bonar 2024 (0,73%) y el Boden 2015 (0,49%).
Por: Luis Beldi.
En el Forex-MAE, la principal plaza mayorista cambiaria, este ingreso inesperado de capitales y la mayor liquidación de algunos exportadores, estimada en u$s190 millones, elevaron los negocios a 312 millones de dólares.
A pesar de que el oro bajó 0,30% a u$s1.154,38 por onza troy y que el Banco Central giró u$s127 millones por importaciones de energía; canceló deuda con el Banco Mundial por u$s91 millones; pagó u$s86 millones por intereses del Bonar 19; vendió u$s30 millones a las automotrices y compensó comercio exterior con Brasil por 8 millones, las reservas subieron 32 millones a 31.409 millones de dólares.
Las cuentas no cierran. Contabilizando las pérdidas por la baja del oro, el Central tuvo que deshacerse de u$s344 millones e ingresaron u$s212 millones. Con estas cifras las reservas deberían haber caído. Habrá que esperar el ajuste contable para conocer el resultado real de este movimiento.
Mejores vientos para los activos financieros
Pero el mercado se mantuvo al margen de la polémica por las reservas. El triunfo de la alianza PRO y radicales, funcionó como un conjuro que hizo que la Bolsa negociara el volumen récord del año de $385 millones con una suba del Merval de las acciones líderes de 4,89%. La división de la oposición era un dato que intranquilizaba a los apostadores.
Los bancos fueron los grandes ganadores. Francés anotó un alza de 7,75%; Macro lo siguió con 7,69% y Galicia con 6,27%. Otros papeles de alzas notables fueron Edenor 7,12% de suba y su controladora Pampa Energía 4,33%. Los inversores ignoraron la crisis energética local y los recientes cortes de luz
Las petroleras, a pesar de la fuerte baja del crudo de casi 2%, a u$s46,13 por barril, subieron. Petrobras sumó 3,15% e YPF, 4,97%o. Estas empresas avanzan porque se utilizan para hacer operaciones de contado con liquidación que permiten que vengan inversores del exterior con pesos a apostar por bonos y acciones. También hacen la operación inversa: transformar pesos en dólares en el exterior utilizando acciones.
Lo cierto es que la suba de las acciones hizo que el dólar contado con liquidación tuviera una notable alza de 25 centavos a 12,14 pesos.
Es tanto el fervor por subirse carrusel de ganancias en Buenos Aires que en Wall Street aparecieron fuertes compradores de ADR's (certificados de posesión) de empresas argentinas. Los bancos fueron los elegidos. Macro avanzó 8,82%; Francés 7,73% y Galicia 7,55%. Otros papeles muy buscados fueron los de las empresas de electricidad. Transener avanzó 8,35% y Edenor 6,06 por ciento.
Baja del dólar libre
En la plaza marginal de cambios, la AFIP siguió conteniendo el precio del billete de los Estados Unidos, autorizando ventas de dólar – ahorro a los bancos por 13,8 millones. De esta manera, el cambio bajó 7 centavos a $12,89 por dólar. El exceso de vendedores interrumpió tres ruedas consecutivas de alzas.
En el Mercado Abierto Electrónico el monto de negocios en títulos de la deuda creció casi 40 por ciento a $1.303 millones de pesos. Nuevamente los bonos en dólares con legislación argentina fueron los más buscados. El Boden 2015 aumentó 0,69% y el Bonar X que vence en 2017, lo siguió con 0,46%. Los títulos se movieron en alza independientemente de la baja del dólar libre.
Al cierre quedó una fuerte expectativa para la próxima rueda porque sigue llegando dinero del exterior para apostar a una Bolsa que se está quedando sin papeles. Esto hace predecir precios más caros. El mercado financiero vive su propio presente que poco tiene que ver con la caída del consumo y de la actividad económica.
Por Javier Blanco.
Banco Central (BCRA) logró cortar ayer la sequía que venía enfrentando en la plaza cambiaria, al aprovechar el ingreso de divisas que hizo una empresa multinacional (cumpliendo con un acuerdo de inversión recientemente sellado) para alzarse con US$ 190 millones para reforzar sus alicaídas reservas netas.
Además, se benefició de una pausa en el proceso de devaluación del real (cerró neutro), a partir de un súbito debilitamiento global del dólar. La operación fue de tal magnitud que alteró el cansino ritmo de un mercado que cuenta los días para que aparezcan los dólares de la soja.
"Fue un ingreso en bloque que rondó los 200 millones de dólares, claramente inusual para el contexto, e hizo que el volumen total operado alcance los 400 millones, lo que lo convirtió en el más alto en lo que va del año", reseñó un operador.
El ingreso puede considerarse oportuno. El BCRA llevaba vendidos unos 350 millones en lo que va del mes. Y ayer había causado un brote de escalofríos en el mercado un pedido público del presidente del BCRA. Alejandro Vanoli, para que el país vuelva al mercado a buscar recursos para pagar la deuda. Esto llevó a algunos a pensar que la posición de reservas netas (va de los US$ 16.000 a los US$ 20.000 millones, según el criterio de cómputo que se aplique- cuando el país afronta vencimientos de deuda por 13.000 millones), puede ser más ajustada que lo que se creía. Vale recordar que el Gobierno había hecho, hasta aquí, del pago de deuda con reservas una bandera.
INGRESO FUERTE, APORTE BAJO
Con este aporte, las reservas contables del BCRA (que incluyen los préstamos de China y otros bancos centrales y los pagos de deuda bloqueados por la Justicia, entre otras cosas), avanzaron en la jornada en apenas US$ 32 millones al pasar de US$ 31.377 a 31.409 millones.
Fue otro día de fuertes pagos por importaciones de energía (US$ 127 millones) y vencimientos de deuda (US$ 91 millones a organismos y otros US$ 86 por un servicio de renta del Bonar 19). Y que los ingresos sojeros se demoran. ¿Llegarán? "El incentivo a retener, para quien tenga espalda financiera, es grande. Si pueden van a esperar el recambio y una probable baja en la retenciones", señaló el consultor Federico Muñoz..
El entusiasmo se había empezado a percibir desde el sábado. En los bancos y sociedades de Bolsa ya descontaban que el buen humor bursátil se notaría desde los primeros negocios de la rueda de ayer, por las expectativas que había generado el acuerdo resuelto en la convención de Gualeguay-chú entre la Unión Cívica Radical (UCR) y el PRO.
Los inversores se entusiasmaron porque con estas últimas novedades le asignaron mayor probabilidad de ocurrencia a un Gobierno más amigable con los mercados, a partir de diciembre próximo, que asegure un mayor ingreso de capitales y buenas ganancias para las compañías. El volumen creció a un récord de los últimos seis meses, el Merval se disparó casi un 5% y mostró subas de hasta un 9%, las acciones volaron hasta un 7,7% en Wall Street (ver aparte) y los bonos avanzaron hasta un 4,3%.
La apuesta de los analistas y bolseros de la plaza local está orientada hacia los títulos que siguen la evolución del dólar y se verán favorecidos por una liberación del mercado cambiario, y aquellos que están atados a la inflación y podrían recibir un impulso en sus precios con una normalización del INDEC. El volumen se disparó a un récord de $ 385 millones que no se alcanzaba desde el último 3 de septiembre. El Bonar X subió un 1%; el Discount en moneda extranjera un 2,44%; y el Boden 2015 un 0,5%. Entre los indexados, el Par en pesos ganó un 4,3%; el Bocon PR12, un 2,14%; el Bocon PR13, un 1,12%; y el Bogar 2018, un 0,63%. El cupón PBI en pesos también mostró una fuerte suba, mayor que el 4% si bien su pago anual recién podría activarse a fin de 2017, en el caso de que la Argentina crezca más del 3% el año próximo.
El viernes, en la víspera de la Convención radical, ya se había registrado una mayor demanda de bonos provinciales en dólares y atados al tipo de cambio en la Bolsa porteña. Los inversores se concentran sobre estos instrumentos porque consideran que con un nuevo Gobierno se sincerará la devaluación y el tipo de cambio oficial superará fácilmente los $ 10. Con todo, en el mercado sorprende que el rally alcista continúe a pesar de las malas noticias que llegan de Nueva York y las ganancias que ya acumulan muchas compañías a lo largo del año, que llega hasta el 70%.
Aun cuando consideran que el fin de la hostilidad con los mercados puede justificar cualquier recuperación, ya hay bancos y sociedades de Bolsa locales que advierten que en el país puede estar gestándose una burbuja de corto plazo, que explote en desilusiones mucho antes de las elecciones de octubre. Creen que detrás de esta extrema euforia puede estar descontado un escenario más simple que el que debería esperarse para después del 10 de diciembre próximo. Una aceleración imposible de justificar desde los fundamentos.
A las dificultades de la economía local, entre las que incluyen desequilibrios como los que hoy se ven en precios relativos o el tipo de cambio, se suma la incertidumbre que existe en torno al contexto externo. Factores que complicaron históricamente a la Argentina pueden convertirse en drivers importantes para el mercado, como la suba de tasas de interés prevista para el tercer trimestre por la Reserva Federal de Estados Unidos y la caída en los precios de los commodities que tarde o temprano provocará el fortalecimiento del dólar. Algunos grandes bancos del mundo, como Citigroup, Bank of America, Deustche Bank y Barclays, ya pronostican que el euro quedará debajo del dólar a fin de este año. Eso debería traducirse en una menor cotización para la soja.
Los inversores celebraron ayer el desenlace de la convención radical en Gualeguaychú: el mendocino Ernesto Sanz alineó al partido hacia una primaria contra Mauricio Macri, el candidato más amigable con el mercado, mejorando las perspectivas opositoras de cara a octubre. Fue una sesión con un altísimo volumen operado, marcando el regreso de los inversores institucionales, que volvieron a incorporar riesgo argentino en sus carteras. Los jugadores privilegiaron las acciones del sector bancario, aún con mucho "upside" a mediano plazo, pero también se notaron apuestas por los bonos atados a la inflación, el dólar y el crecimiento.
El panel líder de la Bolsa de Buenos Aires sumó un notable 4,89% hasta las 10.746,70 unidades. Negoció unos $ 385 millones en la jornada, su volumen más elevado desde comienzos de octubre, cuando asumió Alejandro Vanoli al frente del Banco Central. El sector financiero fue el gran beneficiado: el Macro ganó un 8,82%, el Francés un 7,73% y el Galicia otro 7,55%, apuntalados por el descuento que registran respecto de sus pares regionales. Las acciones energéticas no se quedaron atrás, con repuntes del 8,34% en Transener, del 6,06% en Edenor y del 4,96% en YPF. Además, la performance se replicó en Wall Street, donde los ADR criollos consiguieron subas de hasta el 7,69%.
Como si fuera poco, los mercados de referencia se unieron al festejo. El Dax alemán trepó un 2,24% y superó las 12.000 unidades por primera vez en su historia. Es que la debilidad del euro alimenta su imponente motor exportador. Asimismo, el estímulo del BCE lleva el rendimiento de los bonos a mínimos históricos, empujando a los inversores hacia el mercado bursátil en busca de mejores retornos: la Bolsa de París subió un 1,01%, Milán un 0,96%, Londres un 0,93% y Madrid un 0,78%. En Nueva York, el selectivo S&P 500 anotó un avance del 1,35%, un compás optimista frente a la reunión de política monetaria de la Fed.
En el caso de la renta fija, se percibieron importantes incrementos en todas las franjas del mercado. Entre los papeles más líquidos, el Bonar X saltó un 0,99%, seguido por el 0,72% del Bonar 2024 y el 0,48% del Boden 2015. La series del canje nominadas en dólares también treparon un 2,43% en la rueda.
Además, se multiplicaron las compras de oportunidad en los cupones PBI, encabezadas por un alza del 5,26 por ciento en el derivado en euros. El cupón en dólares subió en tanto un 3,83 por ciento, mientras la emisión en pesos lo hizo en un 1,87 por ciento. Hubo una apuesta similar por los títulos atados a la inflación -el Par sumó un 4,31 por ciento-, al igual que por los bonos "dollar linked" soberanos, que registraron rebotes de hasta el 1,93 por ciento en la jornada financiera.
En el mercado de cambios, la mesa de dinero del Banco Central se alzó con 190 millones de dólares, un saldo que no lograba en más de tres meses. Fuentes cambiarias aseguraron que hubo una liquidación puntual de una "importante empresa", aunque no precisaron de quién se trataba. En ese contexto, el dólar mayorista bajó tres milésimas, a $ 8,785, lo que representó su primer descenso en más de un mes. Por su parte, el dólar "blue" operó con un retroceso de 7 centavos hasta los $ 12,89. El billete marginal cortó así una minirracha de tres ascensos consecutivos que había registrado durante la semana pasada. De esta manera, la brecha cambiaria se achicó levemente, al 46,6%.
Por María Eugenia Baliño.
La euforia de los inversores extranjeros por las acciones argentinas no se detiene y los ADR ya se disparan hasta 75,65% en lo que va de este año en Wall Street.
Por su buena relación precio/retorno, los activos locales lograron ubicarse entre las preferencias de los fondos en Nueva York, recibiendo un fuerte impulso en los últimos meses.
Según los analistas, el empujón extra que están recibiendo los ADR argentinos tiene que ver con las expectativas de un cambio de rumbo político a partir de las elecciones de octubre próximo.
Ni siquiera los reveses judiciales en el litigio con los fondos buitres pudieron opacar el interés de los inversores internacionales por los papeles locales.
Los más buscados en este último tiempo son los ADR de las compañías energéticas, que venían fuertemente rezagados pero que este año cobraron brillo de la mano de una mejora en la situación financiera de las empresas del sector, que se vio reflejada en los balances que presentaron la semana pasada.
Así, Pampa Energía acumula una escalada de 75,65% en lo que va de este año en Nueva York, mientras que la suba en marzo ya llega a 34,04 por ciento.
En la misma línea, Edenor se dispara 71,72% en 2015 y crece 12,44% en lo que va del mes, en tanto que Transportadora Gas del Sur suma 62,29% este año y 47,92% en marzo.
A tono con las empresas energéticas, los bancos locales también consiguieron asentarse en las listas de preferencias de los fondos de Wall Street.
Entre los ADR del sector financiero, los favoritos hasta ahora son los de Grupo Financiero Galicia, que crecieron 54,75% en el año y en el mes ya suman un avance de 16,49 por ciento. Apenas por detrás, Banco Macro gana 40,84% en lo que va de 2015 y 20,39% en esta primera quincena de marzo.
Un dato que destacan los analistas es que el apetito por los papeles locales ha conseguido mantenerse intacto desde que arrancó 2015, aun a pesar de los continuos vaivenes que viene sufriendo la Bolsa neoyorquina y de la incertidumbre de los mercados europeos.
“Aun en medio de la montaña rusa en la que se ha convertido Wall Street recientemente, a raíz de intercalar cotidianamente fuertes subas y bajas, los activos domésticos siguen intentando conservar su mayor independencia aprovechando una continua demanda”, señaló el economista Gustavo Ber, titular de Estudio Ber.
Ayer los ADR argentinos saltaron hasta 7,75% en Wall Street, liderados por BBVA Banco Francés.