El anuncio sobre la conformación de una mesa de desarrollo en la provincia de Islay, para discutir la ejecución del proyecto minero Tía María, no fue bien recibido por un sector de la población del Valle de Tambo, que rechaza la actividad minera en esta jurisdicción.
La presidenta de la Junta de Usuarios de La Ensenada, Marilú Marroquín, confirmó quepese a que el gobierno anunció la suspensión del proyecto, y la conformación de la mesa en mención, iniciarán una huelga indefinida el lunes 23 de marzo."Ya no creemos en las mesas de desarrollo, nunca han cumplido con los acuerdos pactados", dijo.
La gobernadora regional de Arequipa, Yamila Osorio, lamentó esta postura. Consideró que las autoridades y pobladores del valle que insisten en medidas de protesta, no piensan en el desarrollo de Islay.
Compromiso
Osorio no descartó liderar la mesa de desarrollo. "Queremos garantizar la paz social y gobernabilidad, pero también canales donde se pueda escuchar a toda la población", sostuvo.
La mesa de desarrollo se conformará la próxima semana, con la presencia de la ministra de Energía y Minas, Rosa María Ortiz Ríos; el ministro de Agricultura, Juan Manuel Benites, y la premier Ana Jara. En este espacio se analizará el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) y la ejecución de proyectos en favor de la provincia.
La República intentó comunicarse con representantes de Southern, dueña del proyecto minero, para conocer su opinión al respecto, pero nunca contestaron a nuestro llamado.
En la mesa se conocerá los fundamentos del Estudio de Impacto Ambiental (EIA) y se abordarán proyectos de Islay.
Futuro de Tía María es incierto tras casi 6 años de protestas
El Comercio
En julio del 2009, la empresa Southern Copper Corporation anunció que invertiría US$950 millones en su proyecto minero de Tía María, en Arequipa. Desde entonces, las protestas sociales por temor a posibles daños en el medio ambiente y los intentos para dialogar han sido constantes en la accidentada historia de una de las mayores inversiones en la producción de cobre en el país.
Casi seis años después de aquel anuncio, el inicio de las operaciones sigue en suspenso. Esta semana, el viceministro de Minas, Guillermo Shinno Huamaní, declaró que para mediados de este mes se tiene proyectado aprobar la licencia de construcción del campamento minero. La noticia motivó a que la población opositora anunciara un paro indefinido para el 23 de marzo. Con esto, el clima de tensión crece en la provincia de Islay, la zona de influencia.
Frente a la crisis social que se vive, la gobernadora regional de Arequipa, Yamila Osorio, se reunió el martes en Lima con la ministra de Energía y Minas, Rosa María Ortiz Ríos. Horas después, en el aeropuerto de Arequipa, Osorio dijo que planteó al Gobierno Central suspender la entrega de la licencia de construcción de Tía María.
“Nosotros hemos expresado que no hay condiciones [para que se inicie la construcción del campamento minero]. Lo hemos solicitado [suspender la entrega de la licencia para construir esta infraestructura]. Ellos han manifestado que lo están evaluando”, dijo la máxima autoridad de Arequipa, quien incluso afirmó que esa sería una de sus condiciones para “sentarse a dialogar” con el gobierno.
Para los empresarios en Arequipa, la suspensión del proyecto minero Tía María, debido a la falta de garantías que podría generar un conflicto social, pone a la región Arequipa en una situación crítica y de poca confianza.
El representante del Centro Exportación, Transformación, Industria, Comercio y Servicios de Matarani (Ceticos Matarani), Fernando Bossio, aseguró que si el Estado escucha las pretensiones del sector antiminero, las inversiones desaparecerán en la zona.
"No podemos estar a merced de un grupo minoritario que no quiere el proyecto, sabemos que gran parte de la región, como Mollendo e Islay, están a favor", señaló.
Dijo además que es importante que el sector empresarial participe de la mesa de desarrollo propuesta por el Ministerio de Energía y Minas.
Esto demostraría al Estado, explicó, los aspectos positivos en cuanto a inversión que provocaría la ejecución del proyecto.
En tanto que para el presidente de la Sociedad Nacional de Industrias en Arequipa, Julio Cáceres Arce, la situación no es nada positiva. Al igual que Bossio, teme que las inversiones se alejen producto del clima de tensión que generan las autoridades antimineras (alcaldes del Valle del Tambo).
Señaló que hasta la fecha ninguna entidad ha llamado a los empresarios para participar de las mesas de trabajo, pese a que ellos forman parte importante del desarrollo de la región.
Indicó que es importante que el Estado intervenga, pero de forma eficiente, tratando de conciliar a ambas partes.
"El proyecto minero Tía María debe darse sí o sí, porque permitirá un mayor desarrollo en la provincia de Islay. Por ninguna causa éste debe suspenderse", acotó.
