Repsol está cerrando los flecos de un plan para que Antonio Brufau, el actual presidente ejecutivo de la petrolera, se mantenga como presidente del grupo más allá de la próxima junta, aunque cediendo los poderes ejecutivos a directivos de su máxima confianza: en concreto, a Josu Jon Imaz, actual consejero delegado. Además, éste podría apoyarse en Luis Cabra, actual director general de exploración y producción (upstream).
Se baraja que Antonio Brufau continúe al menos cuatro años más, tras su reelección como consejero de Repsol en la junta prevista para abril. El consejo ordinario de la petrolera se convoca el último miércoles de cada mes. El de este mes se ha fijado para el día 25 y servirá para convocar oficialmente la junta de este año, que en principio se celebrará el 30 de abril.
El plan apunta a que Brufau siga en la empresa como presidente del consejo con un esquema equivalente al que se produce en otros grandes grupos internacionales cotizados, especialmente de corte anglosajón, que para ese cargo usan el término de chairman. Desde ese puesto, Brufau no se ocupará del día a día, pero sí de la estrategia a medio y largo plazo, las relaciones institucionales con la Administración, accionistas y otros grupos de interés (stakeholders), y de la vigilancia del primer ejecutivo.
La potencial figura que se baraja para este puesto es la de Josu Jon Imaz, actual consejero delegado. Imaz llegó a Repsol de la mano de Brufau y en mayo del pasado año ascendió al cargo de consejero delegado. Asumiría los poderes ejecutivos que todavía conserva Brufau, que aun mantiene la supervisión directa sobre el área financiera, la de comunicación, la secretaría del consejo (asuntos legales) y la Fundación Repsol. Aún no está decidido si Imaz asumiría en solitario todo el poder ejecutivo en Repsol o descargaría parte de su trabajo en otro directivo, también de la confianza de Brufau. En este caso, el potencial candidato sería Luis Cabra, otra de las figuras al alza en Repsol.Esquema de poderUna de las ideas que se están analizando es que Cabra asuma el papel de chief operating officer (director general de negocio), una figura que Brufau ha usado ya dos veces en los últimos años. Tanto Imaz como Cabra han ido ascendiendo en Repsol en paralelo. En 2010, Cabra fue nombrado director ejecutivo de Desarrollo y Producción. Dos años más tarde, entró en el comité de dirección, al mismo tiempo que lo hacía Imaz. Desde entonces, ambos se han consolidado como dos de los hombres fuertes de Brufau, en detrimento de otros ejecutivos. El caso más notorio es el de Nemesio Fernández-Cuesta, que fue considerado el número dos de Brufau entre 2012 y 2014
Antonio Brufau se mantendrá al menos cuatro años al frente de la presidencia de Repsol (MC:REP) tras su reelección como consejero de la petrolera en la junta prevista para abril, aunque cederá todos los poderes ejecutivos al consejero delegado, Josu Jon Imaz, informó el miércoles el diario Expansión sin identificar sus fuentes.
El pasado 30 de abril, la petrolera ya anunció que Brufau iba a dejar la presidencia ejecutiva, aunque hasta la fecha ha mantenido el control sobre algunas áreas, como las de comunicación y finanzas.
La información del periódico financiero, similar a otra avanzada la semana pasada por el diario digital Vozpópuli, el futuro papel de Brufau se limitaría a las relaciones con instituciones y accionistas, mientras que Imaz asumiría a partir de ahora áreas como la financiera.
El ex político vasco -- artífice de la compra de la canadiense Talisman (TO:TLT) -- tiene bajo su supervisión las áreas de estrategia, personal, legal y las propiamente industriales.
La mano derecha de Imaz será, según Expansión, Luis Cabra, actual director general de exploración y producción, explicó el diario.
Un portavoz de Repsol no quiso entrar en detalles más allá de recordar la reorganización anunciada hace algo menos de un año.
En dicha remodelación quedó relegado Nemesio Fernández Cuesta, considerado hasta entonces como uno de los sucesores naturales de Brufau, quien recientemente ha dejado la petrolera para actuar de asesor económico del partido político de centro UPyD.
La petrolera celebra el próximo 30 abril su junta de accionistas, que es quien tiene la potestad de renovar por un período de cuatro años a los actuales consejeros, entre ellos Brufau.
En el mercado, las acciones de Repsol subían un 0,30 por ciento a 16,76 euros en un mercado alcista.
