La empresa provincial Camyen y Yamana Gold acordaron comenzar con la exploración del yacimiento Cerro Atajo y además firmaron el contrato por el cual la minera catamarqueña obtendrá hasta el 5% de la sociedad que controla Agua Rica al momento de su exploración.
En Cerro Atajo se realizará un plan de inversión en investigaciones exploratorias durante los próximos tres años que permitirá poner en valor este yacimiento. Estos trabajos serán desarrollados por los más de 100 empleados que Minera Agua Rica posee en Andalgalá.
Este yacimiento es considerado como la piedra angular para un avance posterior en el desarrollo del proyecto. En Cerro Atajo se ejecutará un plan mínimo de inversión de 2.700.000 dólares para las investigaciones exploratorias por los próximos tres años, que posibilitará la puesta en valor de este yacimiento.
A partir de ahora y con los procesos exploratorios que se pondrán en marcha, se podrá saber con mayor certeza la dimensión de recursos con los que cuenta. Este proceso comenzó con la determinación de que la minería sea una política de Estado, cuyo punto de partida fue la creación de la empresa minera provincial (Camyen) y la recuperación de las 17 minas que constituyen Cerro Atajo.
En caso de resultar factible económicamente la puesta en producción de Cerro Atajo, Camyen accederá a 2 puntos más de la propiedad de Agua Rica, que se sumará al 3% inicial.
Mientras que la firma de contrato por Agua Rica se da en marco al Memorando de Entendimiento suscripto en octubre pasado entre ambas partes, por el cual se constituye formalmente el Distrito Minero Agua Rica-Camyen. De esta forma, la provincia pasará a tener participación en los dividendos que genere este proyecto, al momento de su explotación.
Cabe destacar que este contrato prevé el desistimiento por parte de Minera Agua Rica de su reclamo por la propiedad de las 17 minas de Cerro Atajo, actualmente en litigio con Camyen.
A CanadáEstamos convencidos de que hay que buscar inversión para nuestra provincia
La gobernadora de la provincia, Lucía Corpacci, partirá este lunes a Canadá al encuentro que viene asistiendo desde su asunción. Se trata de la feria mundial de minería, donde asisten todas las empresas del mundo y todos los países que tienen minería, mostrando sus proyectos. “Estamos convencidos de que hay que buscar inversión para nuestra provincia”, afirmó. |
Finalmente ayer se concretó el acuerdo entre la empresa minera CAMYEN, que creó la Provincia, y Yamana Gold, propietaria del yacimiento Agua Rica. El acuerdo se firmó en Buenos Aires y ratifica la sociedad entre ambas empresas para desarrollar proyectos mineros. De esta manera, la Provincia podrá recibir otros beneficios por la explotación minera de sus recursos.
El primer paso del acuerdo se había concretado en octubre del año pasado. En Toronto, Canadá, cuando se anunció la firma de un memorando de acuerdo entre las empresas CAMYEN (Catamarca Minera y Energética Sociedad del Estado) y Yamana Gold, que apuntó a crear el distrito minero de Catamarca.
Desde el Gobierno brindaron algunas precisiones sobre el alcance del acuerdo. Uno de los puntos más importantes del contrato preve el fin del reclamo judicial por parte de Agua Rica por la propiedad de las 17 minas de Cerro Atajo, actualmente en litigio con CAMYEM. De esta manera, Cerro Atajo forma parte del patrimonio de Camyen.
Además, solo por la firma del contrato, la empresa provincial obtendrá el 3% de la sociedad que controla Minera Agua Rica. Esto significa que la provincia pasará a tener participación en los dividendos que genere este proyecto, al momento de concretarse. Además, CAMYEN recibe de inmediato 300 mil dólares en concepto para comenzar tareas de exploración.
El acuerdo implica también un plan de inversión de $ 2.700.000 dólares para los próximos tres años en Cerro Atajo. De igual manera se reactiva la tarea de exploración en Agua Rica, lo que garantiza la continuidad laboral para los empleados que tiene Minera Agua Rica.
A partir de ahora y con los procesos exploratorios que se pondrán en marcha, se podrá saber con mayor certeza la dimensión de recursos con los que cuenta Cerro Atajo. En caso de resultar factible económicamente la puesta en producción de Cerro Atajo, CAMYEN accederá a 2 puntos más de la propiedad de Agua Rica, que se sumará al 3% inicial.
Con la firma del contrato realizada en el día de hoy entre CAMYEN y YAMANA GOLD, la minera provincial obtendrá el 3% de la sociedad que controla Minera Agua Rica, lo que significa que la provincia pasará a tener participación en los dividendos que genere este proyecto, al momento de concretarse. Este contrato se da en marco al Memorando de Entendimiento suscripto en octubre pasado entre ambas partes por el cual se constituye formalmente el Distrito Minero Agua Rica-CAMYEN.
En Cerro Atajo se realizará un plan de inversión en investigaciones exploratorias durante los próximos tres años que permitirá poner en valor este yacimiento. Estos trabajos serán desarrollados por los más de 100 trabajadores que Minera Agua Rica posee en Andalgalá.
Cerro Atajo es considerada como la piedra angular para un avance posterior en el desarrollo del proyecto Agua Rica. En Cerro Atajo se realizará un plan mínimo de inversión de 2.700.000 dólares para las investigaciones exploratorias por los próximos tres años que permitirá poner en valor este yacimiento.
A partir de ahora y con los procesos exploratorios que se pondrán en marcha, se podrá saber con mayor certeza la dimensión de recursos con los que cuenta Cerro Atajo. Este proceso comenzó con la determinación de que la minería sea una política de Estado, cuyo punto de partida fue la creación de la empresa minera provincial (CAMYEN), y la recuperación de las 17 minas que constituyen Cerro Atajo.
En caso de resultar factible económicamente la puesta en producción de Cerro Atajo, CAMYEN accederá a 2 puntos más de la propiedad de Agua Rica, que se sumará al 3% inicial.
Cabe destacar que en este contrato prevé el desistimiento por parte de Minera Agua Rica de su reclamo por la propiedad de las 17 minas de Cerro Atajo, actualmente en litigio con CAMYEN.
La firma Catamarca Minera y Energética Sociedad del Estado (CAMYEN) y la compañía Yamana Gold conformaron una sociedad que le permite a la provincia recuperar bajo su órbita un total de 17 minas del yacimiento Cerro Atajo, en el oeste provincial, que estaban en litigio con Minera Agua Rica.
Los primeros pasos del acuerdo se había concretado en octubre del año pasado en Toronto, Canadá, cuando se anunció la firma de un memorando de acuerdo entre las empresas CAMYEN y Yamana Gold, propietaria de Agua Rica.
Uno de los aspectos más importantes del contrato prevé el fin del reclamo judicial por parte de Agua Rica sobre la propiedad de 17 minas de Cerro Atajo, que se encuentran en litigio.
El acuerdo prevé que la firma provincial pase a detentar el 3% de la sociedad que controla Minera Agua Rica, lo que repercutirá en las arcas catamarqueñas en ingresos por dividendo, además de recibir un pago inmediato de 300 mil dólares para comenzar tareas de exploración.
El acuerdo implica también un plan de inversión de 2.700.000 dólares para los próximos tres años en Cerro Atajo.
Al mismo tiempo se reactiva la tarea de exploración en Agua Rica, lo que garantiza la continuidad laboral de sus empleados.
La puesta en marcha de la explotación del yacimiento Bajo El Durazno y el cese de hostilidades judiciales por el área de Cerro Atajo con la empresa Yamana Gold, propietaria de los derechos sobre Agua Rica, marcaron diferencias medulares, por primera vez desde diciembre de 2011, entre el Gobierno en curso y sus antecesores. Hasta la semana pasada, podían rastrearse algunos rasgos distintivos de estilo, superficiales, pero eran mayores las evidencias de continuidad estructural en la utilización del peso del aparato estatal con fines facciosos a fuerza de designaciones y asistencialismo y el planteo de la obra pública como eje central de la propaganda oficial, con su correlato de tramas sugestivas con la patria contratista.
El inicio de la explotación de Bajo El Durazno, en cambio, es una ruptura nítida. La escena minera catamarqueña no había registrado novedades significativas desde que se habilitara Bajo La Alumbrera en 1997. En los 18 años de política minera provincial que separan a ambos emprendimientos, se destacaron la pelea por la fórmula de cálculo de las regalías en la gestión de Arnoldo Castillo, la superación de este conflicto bajo Oscar Castillo, la frustrada y finalmente escandalosa reactivación de SOMICA DEM con Eduardo Brizuela del Moral, el despilfarro de la renta millonaria arrojada por Bajo La Alumbrera y, en gran medida como consecuencia, el crecimiento de la prédica antiminera, sobre todo en los departamentos del oeste provincial.
Bajo El Durazno rompe esta decepcionante inercia, con un elemento adicional que potencia políticamente el acontecimiento: su apertura se produjo mientras la inversión minera en todo el país está paralizada a la espera de que se disipe la incertidumbre económica.
La gobernadora Lucía Corpacci, en contraste con el discurso desplegado por el secretario de Minería de la Nación Jorge Mayoral, no se privó de señalarlo. "Hoy no es el momento más floreciente de la minería. Lo voy a decir tal como es: a nosotros nos tocó la fase de declinación. El Gobierno saliente recibía de utilidades de 300 a 340 millones. Cuando asumimos recibimos menos y cada día un poco menos, a punto tal que en 2014 llegamos a recibir 135 millones. Sumemos la inflación, sumemos todo lo que pasó y entonces fíjense cuál fue la situación de este Gobierno provincial en relación con la minería. Pero yo hago eje en esto porque ahí es donde uno puede hablar de los que es política de Estado”, dijo.
Se anota también como un avance el hecho de que YMAD, y la Provincia a través de ella, participe en el 30% de las utilidades que se obtengan en lugar del 20% que tiene en Bajo La Alumbrera. Manuel Benítez, presidente de YMAD, agradeció al Gobierno provincial la contribución para generar "un ambiente de paz social” en torno a la actividad minera.Con el poroto de Bajo El Durazno en el buche, el Gobierno cerró la semana con otra noticia minera auspiciosa. La sociedad del Estado Catamarca Minera y Energética (CAMYEN) llegó a un acuerdo con Yamana Gold, propietaria de los derechos sobre Agua Rica. La firma desistirá de los reclamos judiciales por 17 yacimientos ubicados en el área de Cerro Atajo, que de este modo pasan a formar parte de los activos de la CAMYEN. Ambas empresas explorarán juntas Cerro Atajo, de acuerdo con un plan de inversión para los próximos tres años en el que se invertirán en principio 2,7 millones de dólares. En caso de que Cerro Atajo resulte económicamente viable, la participación de CAMYEN en las utilidades de Agua Rica pasará del 3 al 5%.
Lo que falta
Como Discépolo dijo en el tango "Uno”, la experiencia hace imposible "querer sin presentir”. Los precedentes de Bajo La Alumbrera moderan los entusiasmos con lo que pueda ocurrir con Bajo El Durazno y la capitalización de la estatal CAMYEN. No supone deméritos a lo logrado por el Gobierno señalar algunas similitudes. En 1997 Catamarca no solo habilitaba Bajo La Alumbrera con participación en las utilidades a través de YMAD y su Estado tenía el 51% del paquete accionario de SOMICA DEM, sino que además el panorama nacional, ley de Inversiones Mineras y polémica mediante, era más promisorio para la actividad minera que el actual. Pese a esto, y al éxito de la explotación del yacimiento, las expectativas sociales abiertas por la supuesta concreción del largamente postergado "sueño minero” catamarqueño no se cumplieron.
Las utilidades y regalías de Bajo La Alumbrera se malversaron y SOMICA DEM fue vaciada al punto que un fallo de la propia Corte, luego desconocido por el Gobierno de Brizuela del Moral, determinó su disolución.
La puesta en marcha de Bajo El Durazno supone un repunte de los ingresos provenientes de la minería para las arcas públicas y la capitalización de CAMYEN significa posicionarla para negociar la participación del Estado en futuros emprendimientos, pero no hay garantías de que la renta minera no vuelva a dilapidarse ni de que CAMYEN no vaya a seguir el mismo rumbo que la malograda SOMICA.
Establecer mecanismos que blinden los recursos mineros frente a arrebatos demagógicos y corruptelas para invertirlos con criterios tendientes a reconfigurar la matriz productiva de la provincia y a generar condiciones para el desarrollo de actividades sustentables es lo que le falta al Gobierno para perfeccionar la superación del radicalismo que lo antecedió. La experiencia impide, ciertamente, "querer sin presentir”, pero es útil si lo que se pretende es no reiterar errores. El consenso social en torno a la minería requiere una sociedad que perciba y experimente avances en su calidad de vida que acompañen, al menos, los progresos económicos, muy notorios en los últimos años, de la clase política que administra los recursos públicos.
Asegurar el destino de la CAMYEN parece en principio más complejo, pero bastaría con fijar normas que permitan el control efectivo de su desempeño como empresa, control del que careció SOMICA DEM, con el desenlace conocido.