La petrolera estatal brasileña Petrobras se comprometió ayer a divulgar sus resultados financieros de 2014 de forma "transparente y confiable", después de que la agencia calificadora Moodys rebajara su nota a un nivel especulativo.
En un comunicado, la empresa aseguró que está revisando la planificación financiera y consideró "necesario" reducir las inversiones, elevar la desinversión y "estudiar otras posibilidades de financiación y de incremento de flujo de caja".
También subrayó que trabaja para perfeccionar los controles internos, luego del escándalo de corrupción en el seno de la compañía, por el cual han sido detenidos tres exdirectores de la petrolera y ejecutivos de algunas de las principales constructoras del país.
"En nuestras actividades operacionales, proseguimos en la búsqueda de mejoras de los resultados, como demuestran los sucesivos récords de producción en el presal (yacimientos submarinos), en el refino y en la oferta de gas natural", sostuvo. El miércoles, Moodys fue la primera de las tres grandes calificadoras en situar a Petrobras en el nivel conocido como "bono basura", lo que puede llevar a muchos fondos de inversión conservadores a deshacerse de las acciones de esta empresa. Argumentó que su decisión "refleja una preocupación continuada" por las "potenciales" presiones a muy corto plazo que puede sufrir la petrolera en su liquidez. Afirmó que no espera una reducción del nivel de endeudamiento en el mediano plazo. Y que las investigaciones por el caso de corrupción pueden causar "distracciones" y mermar sus esfuerzos para mejorar su nivel operacional.
La presidenta Dilma Rousseff acusó a Moodys de "falta de conocimiento" sobre Petrobras.
El Tribunal Federal ordenó el bloqueo contra el ex director de Petrobras, Nestor Cerveró, acusado de aceptar sobornos en la contratación de buques sondas para su uso en aguas profundas del Golfo de México y África.
De acuerdo a la prensa brasileña, el monto confiscado equivale a u$s40 millones. Cerveró había sido encarcelado en enero dado que, además de la acusación de recibir sobornos, también está implicado en el lavado de dinero.
Cerveró fue arrestado "preventivamente" cuando desembarcó en un vuelo que lo traía de Londres, a donde el ex director había viajado en diciembre pasado, e inmediatamente trasladado aCuritiba, capital del sureño estado de Paraná y lugar en el que se centran las investigaciones.
El ex director comandó el área internacional de Petrobras entre 2003 y 2008 y en su gestión se realizó la compra inicial del 50% de la refinería Pasadena, en Texas, EEUU, negocio que según el Tribunal de Cuentas de la Unión (TCU) se pagó con un "sobreprecio".
Petrobras compró la mitad del capital de la refinería por 360 millones de dólares a la empresa belga Astra Oil, que un año antes había pagado 42,5 millones de dólares por la totalidad de la planta y después, por una cláusula, fue obligada a comprar el otro 50 por ciento por 820 millones de dólares.
De acuerdo con las investigaciones, se sospecha que Cerveró recibió sobornos para aprobar el negocio.
El juez federal brasileño Sérgio Moro aceptó ayer la denuncia por lavado de dinero hecha por la Fiscalía contra el exdirector del Área Internacional del ente estatal Petrobras Nestor Cerveró.
Cerveró se encuentra detenido desde enero en la cárcel de la policía federal de la ciudad de Curitiba, en el sur del país, por sus presuntos nexos con una red de corrupción que operó en Petrobras entre 2004 y 2012 y que, se estima, desvió durante ese período unos $3,700 millones.
De acuerdo con el Ministerio Público (Fiscalía), la denuncia por lavado contra Cerveró está relacionada con la adquisición de un apartamento de lujo en el barrio Ipanema, en Río de Janeiro.
Según la Fiscalía, ese inmueble fue adquirido por Cerveró y el uruguayo Óscar Algorta con dinero desviado de Petrobras. Algorta también está procesado por lavado de dinero.
Al aceptar ayer la denuncia, Moro sostiene que existen indicios de que para ocultar el origen del dinero con el que se compró el apartamento, Cerveró y Algorta crearon en 2007 la empresa “offshore” Jolmey Sociedad Anónima en Uruguay, en la cual el uruguayo era presidente del Consejo de Administración.
El ex presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, recomendó a su sucesora Dilma Rousseff "levantar la cabeza" y no dejarse afectar por el escándalo de corrupción en la más importante empresa del país, la petrolera Petrobras.
"Dilma tiene que levantar la cabeza y decir: 'Yo gané las elecciones'. Nosotros ganamos las elecciones y parecería que tenemos vergüenza de haberlas ganado", expresó Lula, quien inauguró en 2003 el proceso del Partido de los Trabajadores (PT) en el gobierno de Brasil, que se mantiene desde hace 12 años. A su vez, Lula defendió a Petrobras e hizo un alegato para evitar que las investigaciones por corrupción mancillen a la empresa estatal, en un acto que reunió a militantes del PT y a movimientos sociales, que se enfrentaron antes del encuentro con grupos opositores que pedían juicio político a Rousseff, quien ayer se pronunció en contra de la rebaja que aplicó la calificadora Moody's contra la petrolera.
"Yo creo que (la rebaja del rating de la deuda de Baa3 a Ba2) es una falta de conocimiento cierto de lo que está sucediendo en Petrobras. Yo no tengo dudas de que Petrobras va a tener capacidad para recuperarse de eso sin grandes consecuencias", manifestó la mandataria. Lula, por su parte, afirmó que Petrobras "no puede ser perjudicada" por las irregularidades cometidas "por media docena o por 50 personas", a la vez que defendió que se aplique el "castigo necesario" a los corruptos.
Petrobras, la mayor empresa del país, está en el centro de una investigación policial sobre una vasta red de corrupción que, según se sospecha, operaba desde la década de 1990 y desvió una suma aún no precisada, pero calculada en miles de millones de dólares.