El proceso de consulta pública por la actividad minera abierto en Chubut genera expectativas en los pobladores de la Meseta. En diálogo con Mining Press, el jefe comunal explica las razones de su firme apoyo a al Sí a la Minería.
-¿Porqué tanto énfasis en pedir que se habilita la Minería?
-Llevo 13 años como intendente en Paso de Indios, en Chubut, tiempo en el que hemos venido trabajando con otros partidos políticos en nuestro deseo de que la minería se pueda discutir. El año pasado tomó estado parlamentario el proyecto ambientalista y fue derrotado. Ahora queremos que se abran las puertas a la minería en nuestra comarca, en donde hay licencia social para su desarrollo. Nuestro reclamo es que se haga una consulta en la Meseta, como se hizo hace tiempo en Esquel.
En Paso de Indios el “Sí” gana seguro porque la posición de nuestra gente es clara. Gastre y Gan Gan también están pidiendo un mejor futuro para su pueblo. Confío en un triunfo contundente.
- ¿Pero cuáles son los factores?
-Son varios. Los factores climáticos terminaron con la mayor parte de los animales en la Meseta, un recurso muy valioso. Vivíamos de la ganadería y hoy no podemos vivir de una tarjeta social, pensiones o subsidios. Primero fue la ceniza del volcán chileno, y hace siete años la sequía nos viene castigando duramente. Nos diezmó el ganado. En toda la comarca, más de 9.000 animales no hay. Estamos muy, muy complicados. ¿Cómo trabajás en esos lugares tan despoblados, donde no tenés posibilidades de nada? En Paso de Indio somos 1.200 habitantes. Todos viven del empleo público. Excepto los pequeños productores que sobreviven con la poca lana y pobres ingresos de su ganadería.
No nos gusta la limosna. Queremos emprendimientos productivos, como la minería. Con todo el cuidado del medio ambiente y el rigor de las leyes provinciales. Por eso insistimos tanto en su momento en la Legislatura. En todo proyecto hay gente a favor y hay en contra. Bienvenido un debate amplio, donde el “Sí” no tiene toda la razón y el “No” tampoco. La Legislatura provincial obró bien y ha dicho “No”, al proyecto antiminero y “Sí” a la licencia social.
-Pero la decisión fue reñida.
- Sí. Finalmente muchos legisladores han tomado conciencia de la crisis en la Meseta, muy postergada por mucho tiempo. Pedimos fuentes de trabajo para dar de comer a nuestros hijos. La ayuda del Estado no es suficiente. Paso de Indios está en el medio de la provincia, a 260 km de Esquel, y 360 km de Trelew. A 605 km del yacimiento de uranio Cerro Solo y a 260 de Gan Gan y Gastre. Ellos están a 30 km de Navidad. Estamos lejos de los centros urbanos de Chubut, condenados, en el mejor de los casos, al empleo público.
- ¿Y los grupos antiminería?
- Realmente no los he visto en la Meseta. Ellos son empleados públicos, de buen pasar. En la Meseta también nos gustaría tener 15.000 pesos a fin de mes en el cajero. Los que no quieren que tengamos minería tienen una vida hecha, nosotros queremos vivir con dignidad. En Paso de Indios se extrajo uranio hace 35 años y no hubo ningún problema ni ambiental ni de salud. Hoy la tecnología ha avanzado más y se puede hacer minería tranquilamente. Pude ver en San Juan importantes minas de oro que trabajan muy bien. No hay que tener miedo, simplemente mucha información. Cuidar el medio ambiente, con muchos controles. Ese es el camino para poder hacer minería en armonía.
-¿A quiénes imagina como aliados del desarrollo minero?
-Hay muchos sectores, tanto como el petrolero, el metalúrgico, la construcción. Sus sindicatos están viendo que en Chubut está faltando el dinero. Hay poca obra, dependemos mucho del petróleo que ha tenido una fuerte baja. Entonces, no tan solo La Meseta está viendo con visión a futuro la minería buena, sino que otros lugares, u otros sectores, que están necesitando también un trabajo digno, están pidiendo por la minería, apoyándonos. Nosotros vamos a seguir insistiendo que se pueda trabajar cuanto antes el tema minero. Y por supuesto lo vemos con todos los sectores, como siempre lo estuvimos haciendo. Y lo que a nosotros siempre nos caracterizó, de hablarlo con otros sectores, trabajarlo en armonía, sin agredir, en paz.