Un año de agua y viento. En 2014, la generación de electricidad en plantas térmicas -diésel, gas natural y carbón- entre Taltal y Chiloé cayó por primera vez en cinco años y bajó 11,8% si se compara el cierre del año pasado contra 2013. En contraste, la generación hidráulica creció en 20,1% en este mismo lapso (2014/2013), y la electricidad proveniente de parques eólicos subió 120,5%.
A raíz de ello, el peso de las centrales térmicas en el Sistema Interconectado Central, que abastece al 93% de la población y se extiende entre Taltal y Chiloé, se situó en su nivel más bajo en cuatro años, siendo el 52,4% del total instalado.
El 2014 fue, además, el año en que se añadió menos capacidad de fuentes termoeléctricas, solamente 1,1% de incremento, según el balance 2014 del Centro de Despacho Económico de Carga (CDEC) del SIC. Esto indica que por primera vez en una década la capacidad termoeléctrica no creció. Ello se debe, explica Hugh Rudnick, socio de Systep y académico de la UC, a que cada vez cuesta más construir centrales térmicas, como lo evidencia la detención de Barrancones (Suez), Castilla (Eike Batista), Punta Alcalde (Endesa) y los problemas de Bocamina (Endesa).
Este 2014 fue el año de la irrupción de los parques eólicos. No solo subió la generación a base de viento (en el mencionado 120,5%), sino que también la potencia instalada de esta fuente; es decir, la capacidad de producir energía subió 128%, ya que en el SIC esta fuente pasó de tener 283 megawatts (MW) a 645 MW en solo un año. En total, existen entre Taltal y Chiloé 1.418 MW provenientes de Energías Renovables No Convencionales (ERNC), y todos los analistas apuestan a que van a ir creciendo en la matriz energética.
Con una salvedad. Este 2015 va a ser de las plantas solares. En 2014 se inauguraron unos 360 MW en capacidad instalada con esta tecnología, mientras que están en construcción otros 873 MW. Así, la tecnología fotovoltaica se convertirá este año en la de mayor expansión.
En cuanto al repunte de la hidroelectricidad, Hugh Rudnick apunta a una mayor hidrología en 2014 en la zona sur del país, que alivió los cinco años de sequía en el país. Y también al ingreso de Central Angostura de Colbún, el primer gran proyecto hidroeléctrico en 10 años, si se cuenta desde que se inauguró Ralco, de Endesa. La planta hidráulica del grupo Matte permitirá abastecer a cerca del 3% de la demanda energética del SIC, ha indicado Colbún. Así, su potencial instalado equivale a la demanda de comunas como Ñuñoa, y a cerca del 70% del requerimiento de Concepción.
Los precios marginales -es decir, los costos que se pagan al operar las centrales más caras del sistema- se redujeron en 2014 a su menor nivel desde 2009. En la estación Alto Jahuel, que sirve de punto de referencia para la Región Metropolitana, disminuyeron en el año 12,5%, entre 2014 y 2013, pero más al norte, en Pan de Azúcar, la merma en el precio fue mayor, de 20,8% entre ambos años, por el ingreso de centrales renovables al sistema.
Rudnick apunta a que este descenso se debe a una mejoría en la producción hidroeléctrica, que es más barata, y a las renovables no convencionales, que si bien son caras en inversión, su costo de operación es cero, dado que el "combustible" que usan, ya sea el sol o el viento, es gratis.
La noticia deja contentos a las autoridades. Y es que al anunciar la agenda energética en mayo, el Gobierno fijó como una de sus metas principales reducir los costos marginales en 30% a 2017. Es decir, se buscaba que el promedio de 2013 de US$ 151,36 MWh llegara a US$ 105,96 MWh al término del período.
¿Qué vendrá este año en precios? La gerenta general de Energética, María Isabel González, explica que es difícil de proyectar, porque depende de la hidrología: a más lluvias, precios más bajos.
Pero el último informe de la Consultora Valgesta muestra que los precios en el SIC tenderán a caer después de marzo, estando bajo los US$ 80 el MWh desde mediados de este año.
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