El presidente de EE.UU., Barack Obama, envió hoy al Congreso una petición de autorización para el uso de la fuerza contra el grupo Estado Islámico (EI), un texto que espera que sirva como base legal para la actual ofensiva y que, según aseguró, no contempla operaciones de combate terrestre a largo plazo.
El borrador enviado por Obama al Congreso no establece límites claros a la campaña contra el EI, pero tampoco autoriza «operaciones de combate terrestre a gran escala y a largo plazo, como las que nuestra nación llevó a cabo en (las guerras de) Irak y Afganistán», según ha explicado el presidente de EE.UU..
Hasta ahora, el Gobierno de Obama se ha basado para llevar a cabo sus ataques contra el EI en Irak y Siria en una «autorización para el uso de la fuerza militar» (AUMF, en inglés) de 2001 y en otra norma de 2002 para Irak que el entonces presidente, George W. Bush, usó para atacar a supuestos terroristas en el extranjero.
No obstante, Obama dijo en noviembre que prefería que el Congreso aprobara una base legal específica para la ofensiva contra el EI, que comenzó en agosto pasado, y durante los últimos tres meses la Casa Blanca ha mantenido contactos con los legisladores para redactar un texto.
En la propuesta enviada al Congreso, Obama afirma que «las fuerzas locales» de los países donde se combata al EI, deben «llevar a cabo» las operaciones de combate terrestre, «en lugar de las fuerzas militares estadounidenses», tal y como ha ocurrido hasta ahora en Irak y Siria.
Pero matiza que su propuesta le «proporcionaría flexibilidad para llevar a cabo operaciones de combate terrestre en otras circunstancias, más limitadas, como operaciones de rescate que afecten a personal de EEUU o de la coalición o el uso de fuerzas de operaciones especiales para actuar contra el mando del EI».
«También autorizaría el uso de las fuerzas estadounidenses en situaciones en las que las operaciones de combate terrestre no se esperan ni se prevén, como la recopilación e intercambio de información de inteligencia, misiones para permitir bombardeos cinéticos (con misiles o bombas), o la provisión de planes operacionales y otras formas de asesoría y asistencia a las fuerzas aliadas», añade.
El borrador enviado por Obama no contiene detalles sobre posibles límites a la duración de la campaña, que, según algunos medios, podría quedar reducida en la autorización a tres años más, ni a su posible extensión geográfica más allá de Irak y Siria.
El secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, aseguró en diciembre que la posición de la Administración era que la autorización contra el EI «no debe incluir una limitación geográfica», dada la posible extensión de las actividades del grupo yihadista.
El gobernante afirma en su documento de hoy que, además de su voluntad de trabajar con el Congreso para «refinar, y en último término derogar», la autorización (AUMF) aprobada en 2001, poco después de los atentados del 11 de septiembre contra EEUU, y que permite a Washington realizar ataques aéreos contra grupos terroristas en el extranjero, en términos generales.
Obama defiende así la necesidad de "ajustar" la base legal de las autorizaciones de guerra aprobadas por el Congreso para campañas militares específicas.
Por Jim Acosta y Jeremy Diamond
El presidente Barack Obama pidió al Congreso de Estados Unidos este miércoles que autorice formalmente la guerra contra ISIS, según fuentes del Capitolio, la primera vez en 13 años que un mandatario estadounidense ha solicitado esa aprobación.
Los legisladores recibieron la mañana de este miércoles el borrador para la Autorización del Uso de la Fuerza Militar (AUMF, por sus siglas en inglés), enviado por la Casa Blanca, su aprobación generaría un esfuerzo militar de seis meses contra el grupo extremista.
Obama hablará la tarde de este miércoles sobre el tema.
La resolución limitaría al presidente para librar una batalla contra ISIS a tres años y no permitiría “una ofensiva duradera de operaciones de combate en tierra”, de acuerdo con el texto. El documento también asegura que ISIS es “una grave amenaza” para la seguridad nacional de Estados Unidos y la estabilidad regional.
“El llamado Estado Islámico es una amenaza a la gente y a la estabilidad de Iraq, Siria y el Medio Oriente, así como para la seguridad nacional de Estados Unidos”, escribió Obama en una carta al Congreso que acompaña el borrador.
“Amenaza al personal estadounidense y sus centros localizados en la región y es responsable de las muertes de ciudadanos estadounidenses”. James Foley, Steven Sotloff, Abdul-Rahman Peter Kassig, and Kayla Mueller, han muerto a manos del grupo extremista.
Hay un amplio apoyo en el Congreso a la autorización, aunque los legisladores aún no están de acuerdo en el alcance de los poderes militares que deberían ser dados al mandatario.
Obama anunció durante su discurso del Estado de la Unión, el pasado 20 de enero, que el Congreso necesita formalmente autorizar una operación militar contra ISIS. Y resaltó en su carta de este miércoles que no autorizaría una “una operación de combate militar por largo tiempo y a larga escala” como en Iraq y Afganistán.