Los ingresos durante el año pasado de la italiana Enel, controladora de Endesa Chile, ascendieron a 75.800 millones de euros (cerca de US$89,9 millones), una caída de 3,7% respecto a las del año 2013, según un informe preliminar de resultados de la compañía eléctrica.
La disminución se debió principalmente a la baja en los ingresos por venta y transporte de electricidad, asociado con menores volúmenes generados y vendidos en un entorno económico de menor demanda. También afectó los tipos de cambio promedio con respecto al euro de las monedas locales en distintos países en los que opera el grupo (en particular los países de América Latina y Rusia).
El Ebitda de la sociedad bajó 6% hasta los 15.700 millones de euros (cerca de US$19.700 millones), debido principalmente al cambio en la contribución al Ebitda causada por la venta en la participación de algunas inversiones.
El endeudamiento financiero neto se situó en los 38.000 millones de euros (alrededor de US$43.592 millones), en comparación con los 39.700 millones de euros (US$45.543 millones) de 2013.
Francesco Starace, CEO y director general de Enel, comentó que “este es un sólido conjunto de resultados preliminares, que reflejan el beneficio de las acciones llevadas a cabo con respecto a la reorganización del grupo, la reestructuración de las empresas en la Península Ibérica y América Latina”.
La compañía avanzó ayer el ejercicio de 2014 con la publicación de sus datos preliminares consolidados que, sin embargo, no incluyen la utilidad neta, que se anunciará el próximo 18 de marzo.
Será entonces cuando Enel, que cotiza tanto en la Bolsa de Milán como en Madrid, presente los resultados del año pasado detallados y su plan industrial para el periodo 2015/2019.