La industria del cobre en China está recortando la demanda de desechos del metal debido a los bajos márgenes por la debilidad de los precios, lo que podría desacelerar el crecimiento de la producción local de la materia prima refinada este año, dijeron fuentes de la industria.
Esta situación podría llevar a que los productores sean más dependientes de los concentrados de cobre, impulsando la demanda por importaciones.
China es el mayor productor y consumidor de cobre refinado. Casi un tercio de su producción proviene de desechos de cobre en los últimos dos años.
"La producción de cobre refinado estaría más determinada por la capacidad de fundición que por la capacidad de refinación", dijo un ejecutivo de un importante productor del metal que prefirió no identificarse.
Ese productor tiene una unidad de 100.000 toneladas al año que ahora usa blíster en lugar de desechos de cobre, dijo el ejecutivo. El blíster se obtiene de los concentrados de cobre y es usado para la producción de metal refinado.
El ejecutivo espera que la producción de cobre refinado de China suba en 300.000 a 400.000 toneladas en 2015 frente a una estimación de 6,2 millones a 6,3 millones de toneladas en el 2014. La producción del año pasado creció entre 600.000 y 700.000 toneladas.
Muchos productores de cobre redujeron o dejaron de comprar desechos de cobre después de que los precios del metal cayeron por debajo de los costos de producción este mes, dijeron comerciantes y productores.
En contraste, las tarifas de procesamiento para los concentrados de cobre importados han alcanzado un máximo en 10 años este año.
La producción de cobre refinado estaría limitada por la menor elaboración del metal en base a desechos, dijo un ejecutivo de otro importante fabricante.
China podría sumar 650.000 toneladas de capacidad de fundición, que usa concentrado como insumo, para alcanzar 6,25 millones de toneladas en el 2015, según la firma de investigación Antaike.
Se espera que la capacidad de refinación suba en alrededor de 800.000 toneladas en el 2015, para superar los 10 millones de toneladas.
Los precios del cobre han caído a mínimos de cinco años y medio este año, una baja que ha hecho que los proveedores chinos de desechos de cobre se aferren a sus inventarios, dijeron las fuentes.