Las expectativas de crecimiento de la economía siguen en descenso y un factor agravante lo constituye la demora en la ejecución de losproyectos mineros, ya sea por factores externos (menores precios de los metales) o por trabas socioambientales.
Con el fin de allanar este último obstáculo, el Gobierno acaba de promulgar un nuevo reglamento ambiental para este sector, que “evitará que las futuras inversiones mineras sean frenadas”, manifestó Eleodoro Mayorga, titular del Ministerio de Energía y Minas (Minem).
El reglamento entrará en vigencia en febrero o marzo próximo y normará todos los nuevos proyectos, particularmente aquellos en etapa inicial o de exploración, que, según el Minem, demandarán una inversión conjunta de US$25 mil millones.
“El nuevo reglamento acortará los tiempos de evaluación de los estudios ambientales, pero sin sacrificar la calidad de los mismos, disminuyendo costos para las empresas”, puntualizó Mayorga.
En esencia, la norma posibilitará que el Minem se involucre en la elaboración de los estudios ambientales desde la elaboración de la línea de base, es decir, desde el inicio mismo del EIA, y no cuando este ha sido terminado, lo cual demora generalmente un año o año y medio, explicó Guillermo Shinno, viceministro de Minas.
“Ahora habrá una evaluación paralela por parte de la autoridad, lo cual ofrece la opción al titular minero de solicitar una reunión con el Minen o el Senace para presentar una versión adelantada de su EIA. Así, este podrá ser analizado técnicamente desde el inicio, evitando retroceder etapas y reforzando la calidad del estudio”, explicó Carol Mora, abogada de la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental.
Destacó que esto erradicará la posibilidad de que las consultoras de estudios ambientales hagan “copy & paste” con los EIA, como pasa en ocasiones. Otra consecuencia será que los estudios ambientales serán evaluados y aprobados dentro de los 180 días hábiles, conforme a ley, y no en 365 o 400 días.
El nuevo reglamento posibilitará también que proyectos mineros con características similares (como los ubicados en una misma zona ecológica) cuenten con términos de referencia comunes para la elaboración de los EIA. También permitirá que unidades minero-metalúrgicas con instrumentos ambientales vencidos, como la refinería de La Oroya, se acojan a la normativa ambiental vigente.
PROS Y CONTRAS DE LA NORMA
El nuevo reglamento fue promulgado en noviembre del 2014, tras un largo debate técnico entre los equipos del Minem y el Minam. Carlos Aranda, presidente del Comité de Asuntos Ambientales de la SNMPE, considera que la norma aporta reglas claras de juego, que permitirán que “todas las nuevas inversiones mineras se ejecuten con instrumentos actualizados”. No obstante, considera que el reglamento tiene que ser afinado en varios aspectos.
Según Carol Mora, éste tiene dos falencias. “El reglamento reemplaza las modificatorias a los EIA, en el caso de ciertos componentes, por informes técnicos sustentatorios que se aprueban en 15 días, plazo insuficiente para una buena evaluación”, explicó. También omite pedir opinión vinculante al Viceministerio de Interculturalidad, lo que hace suponer que cierra las puertas a la consulta previa.
El nuevo Reglamento Ambiental Minero (RAM), que saliera publicado el 12 de noviembre del 2014, aún no entra en vigencia porque el Ministerio del Ambiente (Minam) no emite opinión favorable a los términos de referencia comunes para los Estudios de Impacto Ambiental (EIA), señaló Eleodoro Mayorga, ministro de Energía y Minas.
Sin embargo, el titular del MEM dijo que el nuevo reglamento demuestra que al interior del gobierno se puede llegar a un trabajo coordinado que facilite las actividades económicas.
"El nuevo reglamento entrará en vigencia al día siguiente de aprobados los términos de referencia comunes para los EIA detallados y los EIA semidetallados. Nosotros hemos remitido al Minam los términos de referencia y esperemos que se concrete", anotó Mayorga.
Enfatizó que el objetivo del nuevo RAM es hacer más eficiente el procedimiento minero mediante la disminución del tiempo de evaluación y aumentando la calidad de los estudios. En los últimos años se aprobaron 3.350 estudios.