En su extensa Cadena Nacional tras la muerte del fiscal de la causa AMIA, Alberto Nisman, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunció la disolución de la Secretaría de Inteligencia, comunmente conocida como SIDE.
En referencia al cambio efectuado en diciembre de 2014, cuando designó a Oscar Parrilli al frente de la Secretaría de Inteligencia, Cristina sostuvo que era “una deuda pendiente de la democracia desde el año 1983” y que “las personas que fueron a ocupar los cargos de esta Secretaria”, tenían la misión de “empezar a trabajar con un proyecto de reforma sobre el sistema de inteligencia argentino para transformar un sistema que no ha estado al servicio de los intereses nacionales”.
En base a ello, Fernández anunció un proyecto de ley enviado a la Secretaría de Legal y Técnica “para que sea encuadrada y será remitida al Congreso a partir del primero de febrero”. Para ello, llamó a sesiones extraordinarias.
En primer término, la propuesta de Cristina plantea la disolución de la Secretaría de Inteligencia. En su lugar, se creará la Agencia Federal de Inteligencia, “cuya conducción estará a cargo de un Director General, de un Director y de un Subdirector que requerirán acuerdo del Senado para poder ejercer el cargo”.
Pero la Presidenta sostuvo que “se establecerán principios completamente diferentes”, dado que “la inteligencia nacional consiste en análisis, recolección de hechos que afecte la seguridad de la nación y sus habitantes”, tras lo cual pasó a enumerar esas amenazas: narcotráfico, trata de personas, delitos tecnológicos y financieros, como también cualquier organización internacional”.
De este modo, la Presidenta sostuvo que “las actividades de inteligencia interna sólo quedarán limitadas a la prevención de delitos contra la Nación”.
Por otro lado, las intervenciones telefónicas que dependían de la Oficina de Observaciones Judiciales de la SIDE, no dependerán ya de la Agencia Federal de Inteligencia, sino de la Procuración General de la Nación, presidida hoy por Alejandra Gils Carbó, miembro de Justicia Legítima, el colectivo de funcionarios judiciales que adhiere a los postulados del Modelo kirchnerista. “De ahora en más todo juez o fiscal que quiera ordenar una escuchadeberá remitirse a la procuración general”, agregó Cristina.
Asimismo, la sección de “inteligencia criminal” que dependía del Ministerio de Seguridad, pasa a depender de la Agencia Federal de Inteligencia.
La mandataria sostuvo también que se desclasificará información y se crearán bancos de protección de datos y archivos de inteligencia. Finalmente, Cristina anunció que habrá penalidades “no menor a los tres años” para toda persona que “interceptare, captare y desviare intecionalmente comunicaciones telefónicas, archivos, datos, paquetes de datos, lo que muchas veces ha sucedido y nos enteramos a través de los diarios”.
Los principales candidatos para la presidencia en 2015 salieron a manifestar su opinión sobre la disolución de la Secretaria de Inteligencia y la creación de la agencia Federal de Inteligencia. Massa y Macri cuestionaron el discurso de la Presidenta y pidieron responsabilidad; mientras que Scioli acompañó el discurso de la mandataria y resaltó el compromiso del Ejecutivo con la causa AMIA.
El líder del Frente Renovador, Sergio Massa, dijo hoy que es tiempo de “ofrecer una recompensa a quién de información” sobre la muerte del fiscal Alberto Nisman.
Tras el discurso que dio ayer la presidenta de la Nación, Cristina Kirchner, donde informó que enviará al Congreso un proyecto de ley para disolver la Secretaría de Inteligencia por una Agencia Federal de Inteligencia, el diputado nacional dijo que “debe haber un compromiso contra la impunidad.
Al respecto consideró que “la Inteligencia debe ser tratada bajo un acuerdo de todas las fuerzas políticas y que las “escuchas deben estar bajo la órbita de la Corte Suprema”.Así agregó que “es muy importante que construyamos una Argentina independiente”, agregó, y que se “viene el tiempo la Argentina de los acuerdos sobre la Argentina dividida”.
Por su parte, el gobernador de la provincia de Buenos Aires Daniel Scioli aseguró que "un gobierno podrá ser criticado, pero este debe ser muy valorado en su compromiso por los derechos humanos".
Scioli sostuvo hoy que "es una injusticia total que se quiera involucrar a este gobierno en apañar el atentado a la AMIA, cuando es valorado en todo el mundo por su compromiso por los derechos humanos".
Y luego agregó: "Para todos los interrogantes y dudas que hay detrás de la muerte del fiscal (Alberto) Nisman, será la Justicia la que dé la respuesta que todos los argentinos esperamos. Eso es el Estado de derecho y una democracia que madura".
Por último, el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Mauricio Macri, aseguró que el PRO rechazará la creación de la nueva Agencia de Inteligencia. “Queremos un grupo de expertos que se dedique a combatir el narcotráfico y el terrorismo pero en estas décadas nos transmitieron más miedo que tranquilidad”, indicó.
En conferencia de prensa en el salón blanco de la jefatura de gobierno de la Ciudad, Macri adelantó hoy que su partido no respaldará el proyecto de ley del oficialismo y aseguró que la idea del gobierno nacional no le transmite “confianza”.
“Queremos un grupo de expertos que se dedique a combatir el narcotráfico y el terrorismo pero en estas décadas nos transmitieron más miedo que tranquilidad. La Secretaría de Inteligencia no cambia con una modificación de su nombre. Tienen que empezar a protegernos y no ser usados para el carpetazo y el apriete”, sostuvo el líder de PRO.
Como respuesta a la muerte del fiscal Alberto Nisman y la denuncia que éste le realizó por supuesto "encubrimiento " a Irán en la causa AMIA, la presidenta, Cristina Kirchner, lanzó un proyecto de ley para modificar la ex SIDE y crear una nueva Agencia Federal de Inteligencia, que tendrá un director cada cuatro años.
Como si esto fuera poco, también dejó bajo la tutela de la Procuración General de la Nación, dirigida por Alejandra Gils Carbó, el sistema de escuchas telefónicas.
Todo esto, según indicó Presidenta en cadena nacional, se hace para "saldar una deuda de la democracia", ya que, según sus propias palabras, la secretaría de Inteligencia no se interviene desde el año 1983.
La oposición política y los analistas salieron a repudiar los dichos de la mandataria y cuestionarque se haya desligado totalmente del organismo.
El sociólogo, Marcos Novaro, fue uno de los especialistas que salió a vapulear dicha postura aldecir que "todos sabemos que Néstor Kirchner desde que llegó a la presidencia tomó el control de los servicios, subió el presupuesto de la SIDE y de otros aparatos de inteligencia".
"Administró mucha información clasificada, reservada y en algunos casos ilegal sobre sus adversarios y aliados", disparó Novaro.
"Lo que nos está diciendo Cristina es que ella no tiene ningún pasado, que tiene todo el futuro por delante", agregó en diálogo con radio Mitre.
En esta misma línea, el politólogo, Rosendo Fraga, aclaró que "en democracia nunca fue la SIDE elproblema que hoy se le está señalando y tras doce años de gobierno kirchnerista" y evaluó que por ello "el Gobierno debe hacer una autocrítica", porque "se ha puesto en evidencia una falencia muy importante en el manejo de la Seguridad y la Inteligencia".
Pero más allá de la polémica sobre si el oficialismo utilizó o no a su favor los servicios de Inteligencia, la oposición se mostró completamente en contra de la nueva Agencia y ya avisó que no votará el proyecto en el Congreso.
La primera en salir a repudiar el nuevo proyecto de ley fue la diputada, Patricia Bullrich, para quien el objetivo del cambio es que el próximo Gobierno tenga un director y un subdirector de inteligencia kirchnerista.
La dirigente opositora también puso bajo la lupa la decisión de traspasar el sistema de escuchas telefónicas a la oficina del Ministerio Público Fiscal.
Luego, el jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, dio una conferencia de prensa en la que se mostró crítico respecto al discurso que brindó la presidenta y opinó que el Gobierno actuó con "desprolijidades".
Seguido a ello, Macri rechazó el proyecto oficial decrear una nueva agencia de inteligencia, al sostener que la gestión de la presidenta Cristina Kirchner "no tiene autoridad en este tema" y admitió desconfianza.
"No nos sentimos cómodos (con la iniciativa), no confiamos. No tienen autoridad en este tema", lanzó Macri, y poco después añadió: "No va a cambiar con un cambio de nombre si la política sigue ejerciendo el poder de esta manera".
Luego, en la misma línea, continuó: "Tiene que ser un lugar donde se trabaje para protegernos. Van a cambiar si cambian los políticos y la forma de hacer política".
El funcionario porteño pidió tener una Secretaría de Inteligencia que transmita tranquilidad: "Saber que hay un grupo de expertos destinados a combatir el narcotráfico, el terrorismo internacional y la trata de personas", sostuvo.
Desde el radicalismo también salieron al cruce de los anuncios presidenciales.
En ese sentido, el senador y presidente del Comité Central de la UCR, Ernesto Sanz considerónecesaria una reforma en los servicios de inteligencia, pero rechazó que lo haga un Gobierno " a punto de terminar su mandato".
"No vamos a aceptar, que de forma unilateral y sin consenso, con el pretexto de una reforma necesaria trate de borrar el pasado", señaló Sanz, y agregó: "Una nueva Ley, SI. Pero tendrá que ser con un nuevo Gobierno. Tendrá que ser con un esclarecimiento previo de todo lo que ha ocurrido en los servicios secretos durante estos 12 años".
En tanto, otro referente del radicalismo y precandidato presidencial, Julio Cobos, pidió "no perder de vista la gravedad institucional generada por la muerte de un fiscal que denunció a la Presidente e iba a ir al Congreso". También rechazó el traspaso de las escuchas telefónicas a la órbita de Gils Carbó.
"Es inadmisible darle más poder a la Procuración que en lugar de promover una justicia independiente defiende una justicia militante", concluyó Cobos.
"No somos demonios"
Julio Schlosser, presidente de la Delegación de Asociaciones Israelitas de Argentina (DAIA)lamentó que Kirchner haya dicho en su discurso que la firma de ese Memorándum "despertó los demonios".
"Nosotros no somos los demonios. No es la primera vez que dice que el Memorándum despertó los demonios, por los que se opusieron", agregó Schlosser desde Mendoza (oeste), donde participó de un acto por el Día en Memoria de las víctimas del Holocausto.
Por primera vez desde que se estableció esta fecha mundial, la comunidad judía argentina no participa este martes del acto oficial de recordación del Holocausto en el ministerio de Relaciones Exteriores, a cargo del canciller Héctor Timerman, integrante de esa colectividad.
En cambio sí participarán de un acto organizado por el alcalde capitalino, Macri.
El senador socialista Rubén Giustiniani lamentó en tanto, que Kirchner "siga sin reconocer su error de haber firmado el Memorándum con Irán" el 27 de enero de 2013.
El fiscal apareció muerto el domingo de la semana pasada, horas antes de presentarse en el Congreso para explicar una acusación hecha pública cuatro días antes contra Kirchner y Timerman de encubrir a Irán en la causa por el atentado a la AMIA, por haber firmado el Memorándum.