¿Está vivo? Aunque HidroAysén perdió su permiso ambiental el año pasado, decisión del Comité de Ministros mediante, aún forma parte de las obras que tiene en carpeta el CDEC-SIC para los próximos años. En el último catastro de proyectos del organismo que coordina y planifica la operación del Sistema Interconectado Central -ente privado financiado con aportes de las propias empresas- aparecen las cinco centrales del complejo hidroeléctrico, claro que con fechas nuevas: la primera en entrar en operaciones, de acuerdo con la estimación (Baker 1, 660 MW) estaría partiendo en 2022, mientras que la última (Baker 2, 360 MW) lo haría en 2029.
Incluso más: según el catastro, las obras de Baker 1 partirían en enero del año que viene, lo que supone no sólo que HidroAysén recuperaría su RCA sino que también se tramitaría en menos de un año -tiempo récord- la línea de transmisión, pues el titular ha señalado que no iniciará obras sin contar con ese permiso, pues sería absurdo construir las centrales y no tener cómo evacuar la energía.
El documento, que tiene fecha 6 de enero, incorpora todos los proyectos que han sido informados al CDEC por los propios titulares, por lo que se entiende que fue la propia sociedad, cuya propiedad comparten Colbún y Endesa, las que entregaron la información. Así lo aseguró el organismo, que explicó a PULSO que la responsabilidad por la información corresponde exclusivamente a las empresas.
¿Por qué HidroAysén sigue incluyendo a sus cinco centrales entre las futuras obras de expansión del parque de generación? PULSO consultó directamente a la compañía y también a sus propietarios, pero no hubo comentarios.
No obstante, en la industria señalan que mientras no esté zanjada la pérdida de la RCA, que es algo que deben definir los Tribunales Ambientales, la empresa no puede sacar de su cartera de proyectos a HidroAysén.
Actualmente, el proceso judicial está radicado tanto en el Tribunal Ambiental de Valdivia como en el de Santiago, luego de que se rechazara la acumulación de causas.
En el sector plantean que si HidroAysén, que hoy lidera Camilo Charme y que sólo se dedica a la estrategia judicial, elimina las centrales de su cartera de proyectos da pie para que la autoridad evoque eso como un antecedente para ratificar la pérdida de la RCA de HidroAysén.
Por ello, la decisión de informar al CDEC de los plazos para la construcción de las cinco unidades del complejo hidroeléctrico sería más bien una decisión instrumental, aunque el CDEC, de todas formas, planifica el desarrollo futuro del contando con esos antecedentes.
Aún así, el controlador de principal accionista de HidroAysén, la italiana Enel, aseguró que el complejo hídrico ya no forma parte de sus planes futuros.
“HidroAysén no está en nuestra carpeta de desarrollo. ¿Cómo se puede desarrollar teniendo a la gente en contra del proyecto? No tiene sentido”, señaló la semana pasada el CEO de Enel, matriz de Enersis, Francesco Starace.
Las distintas versiones podrían distorsionar la competencia en el sector.
La experta María Isabel González plantea que hay muchos inversionistas que quieren desarrollar centrales, pero están viendo que con HidroAysén va podría sumar una oferta importante, por lo que habría menos espacio para entrar a competir. No obstante, dice que esto es poco probable considerando lo que han planteado públicamente las compañías. Por eso plantea que debería aclararse la normativa que obliga al CDEC a informar los proyectos que están en carpeta.
Pero no es todo. Esta indefinición sobre HidroAysén también deja en duda si los US$350 millones que han invertido Endesa y Colbún hasta ahora se llevarán a contabilidad de las empresas, lo que podría afectar el patrimonio de las firmas.